Hombre Y máquinas

INTRODUCCIÓN

A lo largo del tiempo el hombre ha ido produciendo sus propios artículos conforme sus necesidades han ido surgiendo; y mientras más pasa el tiempo la calidad de estos productos mejora.

La mano de obra se puede definir “como el esfuerzo que hace un ser humano para la fabricación de un bien ”.

Existen dos tipos de mano de obra:

• Mano de obra directa: Es aquella involucrada de forma directa en la fabricación de un cierto producto que tiene que producir la empresa.

• Mano de obra indirecta: Es la fuerza laboral que no está en contacto directo con el proceso de fabricación de un determinado producto, ésta se da en distintas áreas como la administrativa o la comercial.

En este caso la primera es de nuestro interés. La mano de obra directa es importante ya que sin ella el desarrollo de distintos procesos no se podría dar, es decir es necesario que un obrero supervise el desarrollo de la elaboración del producto. Sin embargo con la llegada de la tecnología la cantidad de obreros en las empresas ha ido descendiendo poco a poco debido a la creación de distintas máquinas que sustituyen las acciones de los obreros.

Pocas veces nos ponemos a pensar que la tecnología está “desplazando” poco a poco a los seres humanos en algunas actividades. Un claro ejemplo de esto es como la maquinaria ha sustituido la labor de los obreros en las empresas.

Existen diversas razones del porqué los dueños de las empresas deciden usar máquinas en vez de obreros, una de estas razones es porque el producto resulta menos costoso, ya que el tener obreros implica salarios, prestaciones, pago de impuestos entre otros.

Otra de las razones que los dueños pueden tener al decidir sustituir obreros con máquinas es que la calidad de los productos aumenta al ser todo controlado por una máquina que lleva un control de calidad de todos los productos; lo cual le puede garantizar al dueño que sus productos tendrán nulas posibilidades de salir defectuosos; además de que la velocidad de la producción aumenta y se logra satisfacer la demanda que exige el mercado. Estas situaciones crean una competencia cada vez más cerrada entre los productores que usan maquinarias.

En algunos casos la mano de obra es totalmente necesaria y llega a tener un gran valor, por ejemplo en la elaboración de artículos como las esculturas ya que se pueden consideran como productos únicos e irrepetibles.

A pesar de las diversas situaciones ventajosas que el uso de maquinarias pueda tener, también existe la gran desventaja de que un gran número de obreros quedan desempleados; por ejemplo una fábrica que funcionaba con 100 empleados, al contar con máquinas hace que funcione con 10 o menos, perdiendo noventa empleos; sin embargo también hay que mencionar

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