Identidad Perdida

¿La identidad chilena nos define realmente? ¿Nos sentimos orgullosos de ser chilenos o chilenas? La respuesta cada vez se torna más negativa, pues al parecer la esencia que solíamos tener en tiempos de sables y sangre, donde el nacionalismo era algo propio de cada uno, se va perdiendo con las nuevas generaciones.

Desde un comienzo, nuestras costumbres han sido influenciadas por otras costumbres, por ende nuestra esencia no es realmente pura. Llevamos en nuestras venas una condición española que se sobrepuso a la cultura indígena, cultura de nuestros antepasados. Es este mestizaje el que se ha visto influenciado, ya sea por los Estados Unidos o los países Europeos, dejando muy atrás lo que alguna vez nos definió como patriotas americanos o chilenos, con una identidad propia de un país único y diferente.

Bernardo Subercaseaux, Profesor de Historia de la cultura, dijo que la Globalización favorece al surgimiento de micro identidades y a un desperfilamiento de una identidad nacional.

¿Pero es efectivamente la Globalización la que nos hace olvidarnos de nuestras tradiciones?

Yo diría, que en parte si, pues la globalización es un proceso histórico de integración mundial, y esto mismo fue lo que nos hizo mirar como referencia a otros países. Basta con sólo fijarnos en que música escuchamos, que películas o series vemos, que equipos deportivos admiramos, que tradiciones celebramos, como nos vestimos o simplemente en que modelo político-económico nos basamos.

Pero no es solo este concepto el culpable de la pérdida de quienes somos, pues nosotros desvaloramos nuestra cultura, hay un desprecio y una ignorancia de nuestra historia, de nuestra lengua, de nuestra raza. Nuestro orgullo sólo esta cuando celebramos y recordamos nuestra independencia o cuando ganamos algo como nación. ¿Pero cuando existen problemáticas de cualquier tipo, estamos ahí de la misma manera que estuvimos en esas eventualidades?

El llamado es a darnos cuenta de esta influencia que nos ha quitado una pieza importante de este rompecabezas que somos nosotros, y que podamos recuperar al menos una parte de lo que antes nos fuimos.

...