Los Esterotipos Entre Adolescentes
110046610 de Junio de 2014
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o Introducción
Desde tiempo atrás sabemos que la adolescencia es una etapa difícil en nuestros jóvenes, que varía mucho los gustos de cada uno o su ideología o forma de pensar, a esta etapa tenemos que agregarle la desubicación por la que se encuentran en la búsqueda de si identidad, factor muy marcado dentro de esta etapa.
Por un lado los jóvenes necesitan encontrar quienes son, que es lo que quieren y conocer bien que es lo que necesitan, para esto realizan actividades como convivencia familiar, la charla con sus pares y el acudir a la escuela, estas tres practicas aunque parecen fáciles no lo son debido a que, en casa los padres de familia esperan al cien por ciento que sus hijos realicen las cosas mejor que otros, en la escuela los maestros queremos que sean alumnos de provecho que pongan atención y que aprendan los que se les quiere trasmitir, pero sus amigos, sus compañeros de clase o cualquier otro adolescente, lo orilla a que debe de estar a la moda, definiendo moda a su manera de actuar, hablar, vestir, escuchar, comportarse, entre otros.
Y creo que no hacemos una pausa para ponernos a pensar que es lo que pasa por su mente, que los aflige, más bien pensamos que a su edad que problemas puede encontrar.
En este trabajo hablare de temas que todos conocemos que quizá pensemos que son tabú, que a nuestros jóvenes no les pasa, que nuestros hijos están bien cuidados y que son muy buenos; errores que cometemos al pensar esa sarta de cosas, y perdemos el camino para orientarlo ante problemas que nuestros jóvenes pueden estar combatiendo o lidiando con ellos día a día; como lo son identificación de trastornos alimenticios: anorexia, bulimia y obesidad, análisis de estereotipos que promueven los medios de comunicación, el consumo de sustancias que atentan su salud, la violencia familiar, el maltrato, el bullying, entre otros.
Los adolescentes ante situaciones que enfrentan.
En plena era digital y tecnológica donde las personas están influenciadas todo el tiempo por los medios de comunicación y la sociedad, ciudadanos letrados o no, forman parte de un sistema de colaboración que busca la convivencia de un todo. Todos los personajes de este sistema viven sin darse cuenta bajo un esquema que dictan los más poderosos, y no estamos hablando precisamente de personas, sino más bien de empresas que buscan mantener una hegemonía económica por encima de los intereses sociales que aquejan a los pueblos del mundo.
Imaginemos entonces como afecta lo anterior a los adolescentes, esas personitas que tienen aun aspecto de niños, alma de grandes y pensamiento inmaduro, viven a expensas de lo que la vida les puede proporcionar día a día. En este texto me refiero a los muchachos de un estrato social medio hacia arriba, pues aun que todos son víctimas de la influencia de los medios, cada escalón social tiene sus propios asegunes, y no podríamos generalizar que los adolescentes están expuestos todos a las drogas, si no todos tiene tanta cercanía a estos vicios, por ejemplo: los niños de la calle crecen viendo con normalidad un bote con resistol que es el que usan para drogarse, por esto no se les puede comparar con el resto.
Los medios de comunicación tienen un objetivo muy especifico y que salta a simple vista, esta meta dista mucho de los ideales que tenia la televisión o la radio en sus inicios, informar y entretener, hablamos pues de una forma de hacerse de dinero, es lo único que les importa a estas empresas que luchan todo el tiempo por tener en sus manos a los que puedan pagar por sus servicios. En esta prostitución mediática, los medios masivos se lavan las manos diciendo que únicamente presentan al auditorio lo que otros desean mostrarles o en el más cinco de los casos, lo que ellos mismos piden ver, así lo dijo el Emilio Azcarraga Milmo, “si basura quieren, basura les doy” (El Tigre, Emilio Azcarraga y su imperio televisa, Grijalbo, 2001)
Son la publicidad y la mercadotecnia las causantes de todos estos males, la primera se encarga únicamente de meterse en la cabeza de las personas y no permite, o al menos ese es su trabajo, que una marca se salga, que deje de ser la primera opción de las personas, es decir; cuando pienso en pegamiento, pienso en pritt, o refresco me avoco a coca cola. Por otro lado la mercadotecnia se encarga de la venta, de darnos todas esas promociones irresistibles que no podemos dejar pasar, nos crea una necesidad de cosas que realmente no requerimos pero la influencia de los medios es voraz.
De aquí saltamos a otra influencia que coadyuva con los medios y las materias que hacen que estos crezcan, el Consumismo, tendencia a adquirir gran cantidad de bienes de consumo y sustituirlos rápidamente por otros, (Visual diccionario enciclopédico, ediciones Trébol, 1998, pág. 246) es este una corriente económica pilar de los sistemas más grandes del mundo, consiste en palabras más coloquiales de convencer a las personas, que necesitan comprar, y seguir comprando sin parar, así se mantienen plataformas crediticias, empresas y países enteros como china.
Pensemos tan solo en la industria del vestido, la moda es un excelente ejemplo de cómo funciona el consumismo, un verano las mujeres deberán usar faldas cortas con sandalias sencillas sin adornos, pero el año siguiente la tendencia será que las féminas utilicen vestidos combinados con flats, esto genera que cada temporada se vean forzadas (sic) a comprar ropa y zapatos diferentes, ¿Y cuánta de esta ropa aun funciona al año siguiente? Seguramente casi toda, esto es el consumismo aterrizado, así funciona, con prácticamente todo lo que nos rodea, las computadoras son obsoletas en tan solo 2 años, los carros cambian su diseño cada año con la intención de que los usuarios sientan pena y lo cambien.
¿Cómo afecta esto a nuestros adolescentes? Todo lo anterior son cuestiones creadas por el mundo de los adultos, por lo tanto en teoría debería tener poco que ver con el mundo juvenil, después de todo está prohibido en casi todos los países del mundo beber alcohol antes de los 21 años, así mismo fumar, y drogarse únicamente en algunos de los países bajos. Este mundo de adultos sabe muy bien como llegar a los adolescentes, no por nada la mercadotecnia utiliza segmentos para llegar a su público meta, en este caso los pubertos son la principal fuente de la futura riqueza tanto de medios como de empresas.
La televisión asfixia todos los días con al menos 50 comerciales diarios a los muchachos con situaciones tales como: “necesitas este jabón para no tener acné”, o “esta crema para tener unas piernas hermosas”, “solo este gel te ara lucir genial”, etc. La adolescencia, según Stanley Hall es una edad especialmente dramática y tormentosa en la que se producen innumerables tensiones, con inestabilidad, entusiasmo y pasión, en la que el joven se encuentra dividido entre tendencias opuestas. Por lo tanto resulta fácil darse cuenta que los muchachos están expuestos a situaciones que no son capaces de controlar o disernir, para ellos lo que ven en la tele lo habrán de considerar aceptable.
Y no solo es la televisión, están las revistas especializadas en el segmento adolescente que en su mayoría les explican como tener el mejor sexo de su vida, en vez de cómo cuidarse al tenerlo, o el internet que es una ventana al mundo de los adultos sin tapujos y sin censura que ha producido grandes problemas sociales como el aumento de la promiscuidad o los problemas alimentarios. Y no es para menos si tomamos en cuenta que los chicos desean parecerse a su artista favorito, y peor resulta si este artista es famoso por problemático, drogadicto, y contrario a las reglas sociales.
Además de esto tenemos la convivencia entre pares, que una vez que salen de casa bien influenciados por los medios y menospreciados por sus padres, se encierran en un mundo donde si no encajas no eres aceptado, y de esta forma comienzan los problemas de bullying y este a su vez genera en los afectados que busquen formas de salir de esto, lo cual recaerá directamente en bulimia o anorexia o en el peor de los casos suicidio. Estas dos enfermedades son las que más aquejan al mundo adolescente, y son los medios los causantes en compañía de la misma sociedad y de los sistemas económicos y de gobierno.
La alimentación es clave durante la adolescencia. Se trata del período de mayores necesidades nutricionales, tanto desde el punto de vista energético como cualitativo. Para hacer frente a los cambios, los requerimientos nutricionales son muy elevados. Según la Revista Chilena de Neuropsiquiatría, el término "alimento" procede del latín alimentum y posee a lo menos dos claras acepciones: primero es el "conjunto de cosas que el hombre y los animales comen o beben para subsistir", y segundo apunta a "la cosa que sirve para mantener la existencia de algo que, como el fuego, necesita de pábulo". En ambos casos, hace referencia a algo fundamental.
Es por eso que es tan importante preocuparse de los diversos trastornos y desórdenes alimentarios, que además se encuentran en el tercer lugar de las enfermedades de los adolescentes, después de la obesidad y el asma. Los más conocidos son la anorexia y la bulimia, que son problemas diferentes pero que en muchos casos se desarrollan juntos.
Anorexia es la obsesiva búsqueda de adelgazamiento mediante una dieta progresivamente restrictiva. Los principales síntomas de la anorexia son:
• Rechazo a mantener el peso corporal por encima del mínimo adecuado para la estatura, llegando a situaciones de delgadez extrema.
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