SEMBLANZA PROFESIONAL A PARTIR DE REVALORAR LA PRACTICA EDUCATIVA

SEMBLANZA PROFESIONAL A PARTIR DE REVALORAR LA PRACTICA EDUCATIVA

Desde que era pequeña decía que quería ser maestra y acomodaba a todos mis primos en las escaleras de la casa de mi abuelita para darles clase, e incluso a diario ahí nos sentábamos a hacer las tareas pero nunca dejaba de lado mi papel como maestra hacíamos tarea mientras jugábamos a estar en la escuela. En la preparatoria pensé en cambiar de opinión acerca de lo que estudiaría debido a la presión familiar ya que a ellos no les parecía que tomara esa profesión mis padres querían que estudiara lo que a ellos les hubiera gustado estudiar (doctora y contador) por lo que opte por irme por la rama de ciencias de la salud en el bachillerato la cual se me hacia sumamente interesante, pero las prácticas de laboratorio y a los anfiteatros me dejaban muy desencantada. Hasta que un buen día una amiga de la familia que tenia una guardería y sabia de la situación me ofreció trabajo y al estar ahí con los pequeños me di cuenta que dentro de mi seguía existiendo ese deseo de querer educar y trabajar con niños, me di cuenta de que esa era mi verdadera vocación.

Todo el transcurso de mi estancia en la escuela normal fue verdaderamente maravilloso y yo estaba consiente y segura de que estudiaba todos los días lo que a mi me gustaba, las practicas me llenaban de satisfacción y saberes, por lo que cuando me gradué y comencé a trabajar iba con unas ganas y expectativas verdaderamente altas pensando en que iba a cambiar el mundo con mi enseñanza; ya que mi objetivo principal o mi táctica era el promover un buen ambiente afectivo entre mis alumnos y yo, yo quería aparte de enseñar quererlos y pensaba que con eso la cosa estaría bien, pero ya cuando comencé a trabajar en la práctica real me di cuenta de que hay muchos factores contextuales que influyen positiva o negativamente en el aprendizaje de los niños y en tu práctica docente. Te das cuenta de por mucho que quieras a los niños y los trates bien y los abraces si no han comido durante dos días, si no llevan el lápiz o el cuaderno, o si en tiempo de invierno titiritan de frio debido a que no tienen chamarra porque no tienen los recursos sus posibilidades de aprendizaje se limitan y en un inicio cuando empiezas a trabajar como maestra buscas ayuda a tu familia, conocidos para proveer a esos niños de los necesario y lo logras y tratas de tapar el sol con un dedo teniendo resultados satisfactorios pero te encaras con la realidad de una país que no cuenta con los recursos académicos necesarios para el aprendizaje. Te encaras a una nueva generación de alumnos y de padres de familia algo que no te enseñaron en la escuela normal, pero como maestro te tienes que ajustar a esos cambios y tomar el reto de enseñar a niños tecnológicos, consentidos, con hogares desintegrados, desinteresados, niños que piensan que son los dueños del universo, a

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