Turismo de colores y su impacto en la industria

República Bolivariana de Venezuela.[pic 1]

Tecnológico Américo Vespucio.

Hotelería y turismo.

Análisis del turismo de colores y su impacto en la industria.

Docente:        Integrantes:

Fernando Aponte        Angélica Márquez

CI: 27671877

Luisana Sandoval CI: 29768779

INDICE GENERAL.

LISTA DE CUADROS

LISTA DE FIGURAS

República Bolivariana de Venezuela.[pic 2]

Tecnológico Américo Vespucio.

Hotelería y turismo.

Análisis del turismo de colores y su impacto en la industria.

Integrantes:

Angélica Márquez

CI: 27671877

Luisana Sandoval

 CI: 29768779

RESUMEN

El origen del fenómeno turístico es casi tan antiguo como la propia historia de la humanidad, su evolución en el tiempo lo ha llevado a funcionar como un medio de entendimiento para ver los dinamismos económicos, sociales, y el enfoque político de diferentes culturas. A través de la diversidad natural y cultural de los pueblos, hace que su sustentabilidad lo mantenga inalterable en el tiempo. Sin embargo, al ser también un producto de disfrute social, se ha visto afectado por sus nuevas funciones, haciendo de este cambio una experiencia completamente nueva, transformando su planificación con respecto a su división, características y ocupaciones. Este nuevo sistema no solo ha cambiado la perspectiva social con respecto al turismo, sino que ha sido un elemento necesario para impulsar estas actividades en el mundo actual, donde el marketing y la publicidad se han adaptado a la era digital. En el presente trabajo, se busca hacer una investigación exhaustiva con un diseño de investigación de corte bibliográfico, la cual busca analizar el impacto que tiene en la industria el turismo de colores.  Nacida de la propuesta presentada de Ivan Duque y Felipe Buitrago de la economía naranja,  esta inspirado en la psicología de los colores y los fundamentos del neuromarketing, valiéndose del poder de las emociones inmersas en la experiencia que puede vivir el consumidor. El uso del color en una propuesta turística ha demostrado que, cuanto más potente es un estímulo emocional, más profunda es la conexión neurológica que logra establecerse en el mercado.

Palabras claves: Turismo de colores, neuromarketing, marketing emocional, experiencia turística.

                  INTRODUCCIÓN

El origen del fenómeno turístico es casi tan antiguo como la propia historia de la humanidad, las primeras recopilaciones historiográficas que existen en el mundo hablan de los eruditos helenos y romanos y sus viajes, atraídos por las visitas a los santuarios y templos, las termas o por la celebración de diversos acontecimientos de carácter deportivo o religioso.

Sin embargo, el verdadero auge de la actividad turística se produce a partir de los años cincuenta, momento en el que pasa a convertirse en un fenómeno económico. Así como los movimientos de viajeros se incrementan, entre mil novecientos cincuenta y mil novecientos ochenta, a un ritmo sin precedentes en su historia, marcando una nueva perspectiva en la influencia que tiene esta actividad. Y a partir de esta evolución, el turismo pasa a funcionar como un medio de entendimiento para ver los dinamismos económicos, sociales, y el enfoque político de diferentes culturas, la razón por la cual este fenómeno ha existido como una estructura tan relevante en la sociedad es en parte por su sustentabilidad; es decir, que la diversidad natural y cultural de los pueblos se mantenga inalterable y se pueda hacer uso de ella en el futuro en semejante dimensión que se hace en el presente.

El sistema de promoción de turismo se vio afectado por sus nuevas funciones haciendo de este cambio una completamente nueva planificación con respecto a su división, características y ocupaciones, en este contexto se introduce el turismo de colores.  Este nuevo sistema no solo ha cambiado la perspectiva social con respecto al turismo, sino que ha sido un elemento necesario para impulsar estas actividades en el mundo actual, donde el marketing y la publicidad se han adaptado a la era digital. En el presente trabajo se busca analizar el turismo de colores y su impacto en la industria.

CAPITULO I.

1. Planteamiento del problema.

Desde sus inicios el turismo se ha caracterizado por su peculiar privilegio hacia las personas adineradas, se sabe que, en el siglo XVI, se extendió el hábito, entre los ingleses aristocráticos, de enviar a sus hijos a realizar un largo viaje por el Continente, a fin de completar su formación. Estos viajes recibieron el nombre de “gran tour”, expresión de la cual parece que derivan los términos “turismo” y “turista”. Esta conceptualización ha pasado por diversas alteraciones, mientras que en un inicio las intenciones eran académicas, el viajar  y poder gastar una cantidad significante de capital en el turismo se transformó en un símbolo de prosperidad y libertinaje.

Entendiendo el origen de este fenómeno no es de extrañar que cuando se habla de la historia del turismo usualmente se le hace una relación estrecha con la juventud, por su vinculación al mundo del ocio y del hedonismo, en este sentido esta actividad ha sido condenada en cada una de sus etapas evolutivas a tener un marketing adecuado para esta demográfica.

El marketing y la publicidad son factores dominantes en el mundo del hotelería, son piezas fundamentales de la industria turística para generar negocio y oportunidades, así como para sensibilizar, motivar, convencer atraer a los comensales, visitantes o viajeros que son la parte más esencial en toda la actividad.

Una de las formas de marketing más populares en el mundo es el color, cuando se habla de este elemento se debe entender que es una construcción compleja que funciona dentro de diversas dimensiones y puede enriquecer las percepciones de los turistas sobre el destino.

La primera vez que se utilizó un color como forma para categorizar un tipo de turismo se puede rastrear al año dos mil trece (2013), cuando Pedro Felipe Buitrago e Iván Duque Márquez presentaron el manual “La economía naranja: una oportunidad infinita”. De acuerdo a estos autores, la  economía naranja se enfoca en desarrollar un modelo en el cual las actividades creativas y       culturales sean pilares para el manejo económico del país, permitiendo que personas ambiguas puedan tener un aporte directo con el progreso de recursos del Estado.

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