QUEEN ELIZABETH II

QUEEN ELIZABETH II

Isabel II del Reino Unido, es la actual monarca británica, y por tanto, reina de dieciséis Estados soberanos conocidos como Reinos de la Mancomunidad de Naciones: Reino Unido, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Jamaica, Barbados, Bahamas, Granada, Papúa Nueva Guinea, Islas Salomón, Tuvalu, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Belice, Antigua y Barbuda y San Cristóbal y Nieves.

Ella es la principal figura política de los 53 países miembros de la Mancomunidad de Naciones. Su reinado ha tenido una duración de 23,595 días al día de hoy, lo que equivale a 64 años, 7 meses y 6 días. Esto la convierte en la monarca británica que más tiempo ha durado en el trono desde su existencia, superando a su tatarabuela, la Reina Victoria, cuyo reinado tuvo una duración de 63 años. Isabel es, además, la jefa de estado más longeva del mundo.

Isabel nació el 21 de abril de 1926 en Londres, como la hija mayor de los Duques de York, los futuros: Rey Jorge VI y la Reina Isabel. Su padre ascendió al trono en 1936 después de la abdicación de su hermano, Eduardo VIII, quien renunció al trono debido a su deseo de casarse con una estadounidense, Wallis Simpson, quien ya se había divorciado dos veces.

En 1947, contrajo matrimonio con el Príncipe Felipe de Edimburgo, con quien tiene 4 hijos: Carlos, Ana, Andrés y Eduardo. Siendo Carlos el mayor y futuro heredero al trono.

Comenzó a ejercer funciones públicas durante la Segunda Guerra Mundial, al servir como mecánica, en la rama femenina del Ejército Británico. Tras la muerte de su padre el 6 de febrero de 1952, Isabel pasó a ser la jefa de la Mancomunidad de Naciones y la Reina de los países independientes pertenecientes a la misma.

Su coronación se llevó a cabo en 1953 y fue la primera en ser transmitida por televisión de la historia. Entre 1956 y 1992, la mitad de sus reinos obtuvieron su independencia y se convirtieron en repúblicas, Sudáfrica, Pakistán y Ceilán.

Ha vivido épocas difíciles durante su reinado, siendo 1992 su annus horribilis, ya que sus hijos se divorciaron de sus respectivas parejas, el Castillo de Windsor, su residencia oficial, se incendió sufriendo daños considerables, y su familia se vio envuelta en varios escándalos públicos. En 1996, su hijo, el Príncipe Carlos y su esposa, la Princesa Diaa se divorciaron oficialmente, un año más tarde, el 31 de agosto de 1997, Diana falleció en un accidente automovilístico en París, al ser acosada por la prensa, envolviendo, una vez más a la familia real, en escándalos, por su negativa a dar apariciones públicas. Además de la muerte de su madre, la Reina Madre, y de su hermana, la Princesa Margarita, en 2002.

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