Arquitectura De Paisaje

En el libro la experiencia de la arquitectura, Rogers analiza la estructura de la composición arquitectónica, situando su problemática y por lo tanto la de su estructura, en el medio de principios generales tales como el acto de componer. Afirmando que la estructura de la arquitectura es la arquitectura de la estructura; según Rogers utilidad y belleza son elementos antinómicos de la síntesis arquitectónica. La belleza es un factor de máxima importancia.

Esta idea fue tomada por William Morris en el año de 1881 al decir que la arquitectura abarca la consideración de todo el ambiente físico que rodea a la vida humana y que no podemos sustraernos a ella mientras formemos parte de la civilización. Siguiendo la línea de análisis que Rogers aplica a la construcción arquitectónica, entendemos que los elementos que componen la estructura del paisaje pueden ser naturales o artificiales.

Dentro de los elementos naturales unos pueden ser manipulables por el hombre y otros no; los no manipulables son: el cielo, el mar, la luz, el clima. Y los elementos manipulables son: las costas, los causes de los ríos, los elementos vegetables.

Los elementos artificiales emanados directamente de la actividad humana son: las edificaciones, obras de ingeniería, la red viaria, la agricultura.

Existe una ciencia que se practica por toda China, Corea y Japón llamada Fenshui, se define como el arte de adaptar los lugares de habitación de los vivos. Fundamentalmente no busca el bello sitio sino el buen sitio. Toda construcción deberá tener por lo tanto como función principal asegurar la armonía que debe reinar entre el hombre y el universo.

Hay muchos jóvenes arquitectos en oriente en este momento que están tomando en consideración el estudio del fenshui para el diseño de sus proyectos.

Conclusión:

En este articulo podemos encontrar análisis de la composición arquitectónica, las cuales basan sus problemática en la estructura de las composiciones arquitectónicas, también señala que la arquitectura debe tomar en cuenta el ambiente físico que rodea a la vida humana. Basándonos en aspectos que podemos manipular y algunos otros que no lo podemos hacer. Tanto naturales como artificiales, también se puede dar el caso de considerar aspectos como las creencias o tradiciones que se tienen en el lugar donde se va a desarrollar el proyecto o construcción.

Si con esta realidad queremos situarnos ante un análisis arquitectónico del paisaje, constataremos que si las intervenciones realizadas en nombre de la utilidad han prescindido del carácter fundamental de la belleza, en ese momento, el paisaje ya no es arquitectura. Todos somos consumidores del paisaje sin embargo unos lo producen interviniendo en el, puesto que toda actuación, urbanística, agrícola o industrial

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