Definiendo a la tecnoética

LA TECNOETICA

A finales del siglo XIX se empezó a desarrollar la llamada "ética de la ingeniería" como una ética profesional, que consistía en mirar la ética desde el punto de vista de la tecnología que nos constituye como humanos. La tecnoética recoge la tradición de las éticas profesionales de los ingenieros y las desarrolla de una manera global. Un ingeniero debe plantearse el concepto de responsabilidad desde la conciencia del impacto social y ecológico de los procedimientos tecnológicos. La tecnoética no es estrictamente una ética aplicada sino una manera de plantearse la situación global del hombre en un nuevo.

Definiendo a la tecnoética como una faceta de investigación relacionada con ética y moral de la tecnología en nuestra sociedad, está se deriva de muchas teorías y formas para avanzar en la tecnología junto con la sociedad. Esto se ha hecho para desarrollar principios comunes como una guía para los nuevos avances en tecnología y su aplicación fructífera en beneficio de la sociedad. Es decir, La tecnoética es una disciplina filosófica que reflexiona sobre la valoración moral de los fines y usos de la técnica y la ciencia en la tecnología. Además La tecnoética se interesa especialmente por los cambios que provocan la tecnología y la información en el ámbito de las valoraciones morales.

Encontramos también que el tecnólogo, es el hombre que materializa los conocimientos científicos a través de sus productos y los pone al alcance de la sociedad. Es un promotor de los avances de la ciencia, difundiendo, sugiriendo, implementando o creando nuevas tecnologías a fin de mantener la eficiencia de la producción de bienes y servicios que mejoren la calidad de vida de todos los seres humanos y del medio ambiente, Es un ente con visión de futuro y de reflexión, crítica, sensibilidad y percepción de las necesidades y problemas que surgen y que atentan contra el avance saludable y positivo de la raza humana. Ante todo, un tecnólogo debe ser un humanista. Una persona con valores morales y éticos muy bien fundamentados.

El hombre vive inmerso en el sistema técnico es decir, en una red de interrelaciones, regidas por principios técnicos que obedecen su lógica propia y no necesariamente los deseos o las necesidades de los humanos. Puesto que vivimos en una época, en la cual el querer sobresalir ante la sociedad, está al alcance de todo ingeniero, científico o investigador, siempre y cuando este tenga metas y ambiciones. Pero al querer lograr su propósito, no se detienen a pensar en el mal o el bien que van a causar a la sociedad, ya que hoy en día solo nos interesa nuestro propio bienestar y no el de las otras personas, esto se debe a la carencia de moral de la sociedad que es cada vez más notoria, debido al gran impacto de la tecnología en nuestras vidas, y a que gracias a esta cada vez somos una sociedad un tanto más perezosa. Muchos científicos, ingenieros o investigadores, están cada vez más expuestos a romper con las reglas éticas y morales por tratar de sobresalir, ya que a estos no les importa si su investigación o proyecto va a traer un bien o un mal a la comunidad, lo que a ellos interesa no es nada más que ser reconocidos, y aunque muchas de las veces estos proyectos son muy benéficos para la sociedad, está no les sabe dar un uso adecuado y terminan siendo un arma muy poderosa para la sociedad.

Para finalizar aunque el científico, ingeniero o investigador, antes de realizar su trabajo tiene que analizar a su público, para saber qué es lo que a este interesa, y así unirse en un bien común. Ya que no toda la responsabilidad recae en el científico, sino también en la sociedad, y el uso que estos le den al proyecto o a la investigación ya que todos tomamos las herramientas que se nos brindan y las utilizamos según nuestras necesidades, algunas veces les daremos un buen uso y otras veces haremos

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