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El bebé es un mamifero


Enviado por   •  27 de Enero de 2023  •  Apuntes  •  1.801 Palabras (8 Páginas)  •  109 Visitas

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Texto Michel Odent,

Las ideas que más me han llamado la atención es sobre la necesidad de rescatar la tarea del cerebro antiguo, primitivo, en nuestra vida y nuestra relación con el mundo, sobre todo porque (aparte de lo que hemos estudiado sobre su función en el parto) me hace reflexionar en torno  a mis propias creencias  profundamente arraigadas sobre  la necesidad de “controlar” “dominar” los instintos, lo instintivo, lo arcaico, lo animal, a la vez recuerdo que esta separación sigue siendo compartida en nuestras formaciones desde pequeñ@s, donde la educación sería algo así como la dominación del cerebro racional por sobre lo primitivo y en ello estaría supuestamente el camino hacia la evolución humana.

Agradezco las reflexiones y estudios de Michel Odent porque a través de un lenguaje cercano, sin dejar la seriedad y las bases históricas/científicas/experienciales de sus análisis, nos lleva a reconciliarnos con esta parte de nuestro ser, relacionándola con aspectos que, en lo personal, me arraigan a la vida en estos tiempos de crisis: la unión con el todo en la naturaleza, la pulsión vital, la intimidad que permite la conexión y la expresión de los afectos y el placer de los vínculos.

También me ha llamado la atención el lugar del arte como la unión de ambos cerebros, pensándolo como la expresión estética, cuidada, desarrollada a través de minuciosos lenguajes que nos llevan a encontrarnos con un todo, inundados de significados que va más allá de la explicación, que se pueden sentir en el cuerpo, que emocionan y que nos unen sin explicaciones.

Con relación al capítulo 12, destaco el asunto de los niveles de prolactina en nuestra sociedad occidental y como esto la caracteriza: difusión de más estímulos eróticos (de consumo), relación con comportamiento de macho dominante, etc. Y por otro lado el ejemplo de una sociedad con mayor prolactina: más respetuosa con el infante, atención y foco en el cuidado y lo que podemos imaginar sobre los efectos de una sociedad donde cada uno en su temprana infancia es el objeto de amor y cuidados de su núcleo familiar y de la sociedad misma. Esto me permite incluso imaginar vínculos más sanos en general, protección a la infancia garantizada (y a sus familias para permitir los cuidados), respeto y cuidado hacia la vida y todo lo vivo en nuestro entorno, finalmente esto nos recuerda nuevamente lo importante que es el modo en que nacemos, y los primeros cuidados hacia el bebé(y la madre) para mantener estas hormonas circulando, apoyando su vínculo (madre y bebé) y la construcción de su relación a futuro y también lo importante del apoyo del círculo familiar, incluyendo padre o acompañante significativo y su relación con los cuidados del bebé, permitiendo también en ellos la circulación de estas hormonas (prolactina, endorfina, oxitocina) como un flujo de amor que comparte el espacio íntimo del hogar.

Texto Parirnos:

Sigo a Sylvia en mi Facebook ya que cuando estaba gestando me quería preparar para un parto natural y comencé a seguir a todas las mujeres que encontraba relacionadas a ello, ahora veo sus tejidos de anatomía femenina y sus publicaciones vinculadas al activismo, también he visto publicaciones donde están sus hijos por lo que puedo colocar  rostros a su relato, en ese mismo tiempo leí esta publicación de relatos de parto, recuerdo haber estado de unos 7 meses tumbada en la cama regaloneando con la guagüita y leyendo, llorando y emocionándome, ahí entendí porque Sylvia eligió ser doula, ahora que vuelvo a leerla vuelvo a sentir dolor, ahora más consciente aun de la violencia ejercida hacia ella y su hijo, y me doy cuenta cómo podemos ir adelantando lo que viene a través de los comportamientos de los profesionales que la acompañaron, tal como si fuera una película de suspenso o más bien terror.

Por otro lado, es hermoso que haya podido pasar por un proceso de gestación, parto y postparto respetados, amorosos y acompañados por profesionales respetuosas y su compañero, que haya podido sentir su propio poder, que su hija haya tenido lo que necesitaba como recién nacida (los brazos, el calor y el pecho de su madre), que Sylvia haya podido sentir su cuerpo vivo, palpitante, fuerte, gozoso, una experiencia que pasa por toda la gama de emociones pero que no queda fijada en la sumisión, dolor y miedo como ocurrió con su primer bebé, sino que por el contrario lo vivencia  como protagonista, poderosa y llena de amor.

Texto Sadler

Me ha llamado la atención la revisión de las experiencias de parto cesarea analizadas a través de la antropología del cuerpo, el año 2015 cuando realicé mi tesis sobre “el cuerpo en la infancia” me encontré con la antropología del cuerpo y en esa búsqueda, con nuevos modelos para entenderlo, agradezco esos primeros acercamientos que me llevaron mas allá de la experiencia mental que tuve en la formación como psicóloga, sin embargo puedo seguir sintiendo como el modelo occidental de la dicotomía cartesiana sigue invadiendo nuestra forma de relatar experiencias y sobre todo de entender la salud en el modelo biomédico.

Desde lo anterior, valoro la riqueza en los análisis de estos relatos ya que me siguen convenciendo de la permanente construcción de nuestras identidades inseparables y sobre todo fundidas en cada parte vibrante de nuestros cuerpos.

El primer concepto que destaco es el de “embodiment” (Csordas), cuerpo del ser/estar en el mundo, presencia temporal histórica  y como un  depósito de significados. Este concepto me permite pensar en el cuerpo de las parturientas ,su recorrido individual y la carga histórica en cada uno de esos cuerpos y como éstas cargas que a la vez son acciones, a la vez son lenguaje, interacción, permanente construcción y deconstrucción en la experiencia concreta, todo esto llega a una sala de parto validándose en un autoconcepto sumado a la visión de la mujer que hay en el territorio donde se concrete el parto y cada uno de los presentes, como esto puede jugar también en sus hormonas, en la posibilidad de soltar el cerebro controlador y unirse al todo, al fluir, pienso en Olga ¿Cómo llego a mirarse a si misma de esa manera? Me da la sensación que su experiencia de parto confirma una identidad, posiblemente le agrega elementos pero fluye como un rio.

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