IMPORTANCIA Y USO CORRECTO DE LOS MEDICAMENTOS

INTRODUCCIÓN

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a los fármacos, medicinas, productos farmacéuticos y productos medicinales como aquellas sustancias o productos utilizados en el ser humano con fines profilácticos, diagnósticos o terapéuticos. Dentro de este grupo de sustancias se incluyen las sintéticas y naturales, los biológicos como las vacunas y el suero, y la sangre y sus derivados.

En el mundo, más del 50 % de los medicamentos que se recetan, se dispensan o se venden de forma inadecuada. Al mismo tiempo, alrededor de un tercio de la población mundial carece de acceso a medicamentos esenciales, y el 50 % de los pacientes los toman de forma irracional.

La falta de acceso a medicamentos y las dosis inadecuadas tienen como consecuencia un alto índice de morbilidad y de mortalidad, como se ve en infecciones infantiles y enfermedades crónicas, tales como la hipertensión, la diabetes, la epilepsia o enfermedades mentales. El uso inadecuado y excesivo de medicamentos supone un desperdicio de recursos, a menudo pagados por los pacientes y traen como consecuencia un considerable prejuicio al paciente en cuanto a la falta de resultados positivos y a la incidencia de reacciones adversas a medicamentos.

El presente informe ha sido elaborado para la propia seguridad, salud y bienestar de las personas, es recomendable que, cuando estas tengan que utilizar un medicamento en particular, aprenda el uso adecuado de él.

El uso adecuado de los medicamentos es muy importante para recuperar su salud. Usar un medicamento en forma adecuada es utilizarlo exactamente como lo indicó el médico, a la hora correcta y durante el tiempo que dure el tratamiento. Si se trata de un medicamento que no requiere receta médica para su dispensación o despacho, siga con atención las instrucciones del envase o folleto informativo.

Definición de adherencia terapéutica

Según la OMS la adherencia terapéutica es “el grado en que el comportamiento de una persona –tomar medicamentos, seguir un régimen alimentario y ejecutar cambios en el estilo de vida– se corresponde con las recomendaciones acordadas con un prestador de asistencia sanitaria”.

La falta de adherencia es la verdadera dificultad para el manejo no sólo de enfermedades psiquiátricas como la esquizofrenia, la depresión o el trastorno bipolar, sino de otros padecimientos como la diabetes mellitus y la hipertensión arterial. En el caso de la esquizofrenia, por ejemplo, se ha reportado que hasta el 74% de los pacientes abandona su tratamiento con antipsicóticos en un periodo de 2 años.

Es sabido que este problema es mayor en padecimientos como la esquizofrenia, trastorno bipolar, abuso de sustancias y trastornos de personalidad. Por otro lado, de manera paradójica, en los trastornos de ansiedad y trastornos adaptativos, la adherencia al tratamiento suele ser mejor. Esto se entiende al pensar que mientras el grado de psicopatología sea mayor, la conciencia de enfermedad y la convicción sobre la necesidad de recibir tratamiento es menor; es decir, los pacientes que se apegan adecuadamente al tratamiento, son aquellos cuyo grado de psicopatología y disfunción es relativamente bajo.

Importancia y uso correcto del tratamiento farmacológico

Hacer un uso correcto y racional de los medicamentos es fundamental para conseguir su principal objetivo, mejorar la salud y curar, también es esencial para evitar efectos secundarios, interacciones,

Para que haya un uso racional y correcto de los medicamentos, el paciente tiene que recibir de su médico el medicamento adecuado y tomar la dosis debida durante un periodo de tiempo suficiente.

Los psicofármacos pueden paliar síntomas, reducir la discapacidad, acortar la evolución de muchos trastornos y prevenir las recaídas. A menudo constituyen el tratamiento de primera línea, sobre todo en situaciones en las que no puede recurrirse a intervenciones psicosociales ni a profesionales altamente capacitados.

A pesar de su importancia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) revela que el 50% de los medicamentos se prescriben, dispensan o venden de forma inapropiada, y la mitad de los pacientes no los toman correctamente.

El paciente no puede controlar, sobre todo por desconocimiento, la prescripción de un médico, ni la dispensación farmacéutica, pero si pueden actuar tomando adecuadamente el tratamiento que se les recomienda. Para ello, deben seguir las pautas establecidas por el profesional sanitario.

Ventajas de que el paciente con trastorno mental siga el tratamiento farmacológico

• Menor mortalidad.

• Mejor pronóstico general.

• Disminuye el riesgo suicida.

• Es menos probable que el paciente tenga una recaída.

• Se evitan futuras re-hospitalizaciones y discapacidad.

Efectos de los psicofármacos

Los efectos de un psicofármaco difieren según la categoría a la que pertenecen:

• Tranquilizantes o ansiolíticos: disminuyen la angustia y las manifestaciones de ansiedad (insomnio, tensión muscular...)

• Somníferos o hipnóticos: destinados a provocar y/o mantener el sueño; pueden disminuir el estado de alerta mientras se está despierto.

• Neurolépticos o antipsicóticos: son fármacos usados en psiquiatría, sobre todo para el tratamiento de las psicosis. No tienen riesgo de dependencia.

• Antidepresivos: indicados en el tratamiento de las depresiones, cuyos síntomas son: disminución acentuada del interés o del placer de vivir, trastornos del sueño, agitación o apatía, sensación de fatiga o pérdida de energía inexplicables, sentimiento

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