LA CONTABILIDAD AMBIENTAL EN SU INTENTO POR MITIGAR LAS LIMITACIONES EN LA MEDICIÓN Y RECONOCIMIENTO DE LOS RECURSOS NATURALES

LA CONTABILIDAD AMBIENTAL EN SU INTENTO POR MITIGAR LAS LIMITACIONES EN LA MEDICIÓN Y RECONOCIMIENTO DE LOS RECURSOS NATURALES

Brigite Alejandra Pulido Cruz

RESUMEN

Debido a la creciente preocupación por la degradación del medio ambiente, se ha hecho necesario relacionar los impactos ambientales con las corrientes de la economía, con el fin de crear medidas necesarias para mitigar el daño hacia la biosfera. Así, surgen dos corrientes de: la economía ecológica y la economía ambiental, las cuales buscan la preservación del medio ambiente y a su vez, distintas formas de ver el problema, bajo diferentes parámetros. Por su lado, la contabilidad no ha sido indiferente hacía estos procesos de reconocimiento, pues ésta disciplina se ha visto en la necesidad de replantear la contabilidad hacía una nueva visión que contemple variables sociales y ambientales. Sin embargo, esta contabilidad presenta una serie de limitaciones en cuanto a la medición de los recursos naturales, una de ellas, si no la más importante, es el intento de objetivar los recursos ambientales a través de unidades de medida monetarias. A su vez, otra gran limitación que surge es el sesgo que se evidencia en las memorias de sostenibilidad de las empresas, ya que allí no se refleja una información conforme a la realidad y tienden a estar enfocadas hacia el beneficio de los inversionistas. A raíz de lo anterior, es importante cuestionarse sobre si: ¿Es conveniente establecer un único modelo de medición para los recursos naturales, teniendo en cuenta las múltiples limitaciones a las que está sujeta la contabilidad ambiental?

INTRODUCCIÓN

El medio ambiente tiene gran importancia en el entorno social, ya que éste ha sido parte fundamental en el proceso de suministro de recursos para la sobrevivencia y desarrollo de la sociedad. Debido a su creciente e inadecuado uso, se ha evidenciado la necesidad de administrar estos recursos, de tal forma que sean organizados para lograr el bienestar social.

Las ciencias económicas, tienen como objetivo la asignación adecuada de los mismos para lograr tal fin. Sin embargo, el problema de las ciencias económicas en los aspectos socio ambientales se basa principalmente en el intento de objetivar los recursos naturales a través de cuantificaciones monetarias, teniendo en cuenta solamente las inversiones y erogaciones de dinero que están vinculadas a la explotación de los recursos, dejando de lado aquellos datos que reflejan las condiciones o los cambios generados a nivel socio-ambiental, consecuencia de las acciones humanas, en su intento por obtener beneficios económicos a costo del bienestar social.

Ha de tenerse en cuenta que, en cierta medida, la degradación del medio ambiente es consecuencia del modelo económico, en un principio productivista y ahora rentista que rige la vida del ser humano y que ha hecho de la naturaleza, el insumo principal para el desarrollo de las actividades productivas dejando de lado la revelación de los verdaderos impactos que genera a nivel social y ambiental. Lo que lleva a pensar la importancia de considerar modelos adecuados de medición que tengan en cuenta aspectos ambientales.

Este documento está basado en las ramas de la Economía ambiental (EA) y la Economía ecológica (EE), pues debido a la toma de conciencia frente a las repercusiones ambientales de las actividades económicas se ha manifestado la necesidad de considerar la problemática que surge de la relación entre economía y ecología. Por un lado, la economía ambiental trata el problema de las externalidades y la asignación óptima de los recursos agotables, proponiendo una serie de metodologías para la estimación del valor económico de los daños ambientales producidos. (Ariza Buenaventura, León Paime, & Gómez Villegas, 2006). De igual manera se tomarán algunos aspectos de la economía ecológica, que se enmarcan en una visión ética más biocéntrica y ecocéntrica, que antropocéntrica. Basándonos en lo anterior, este ensayo será elaborado teniendo en cuenta una serie de artículos de carácter académico, que permitan establecer aproximaciones acerca del papel de la contabilidad y de la disciplina económica en la medición de los recursos naturales y los impactos que se generan tras su explotación; así como las deficiencias en la aplicación de los métodos de medición existentes.

Este ensayo estará estructurado en cuatro partes; la primera de ellas, estará constituida por esta introducción. En la segunda, se hará una contextualización acerca de la importancia del medio ambiente, y su relación con la disciplina económica, además de los diferentes indicadores ambientales que permiten evidenciar el estado del problema. En tercer lugar, se abordarán las limitaciones en la medición de los impactos generados por la explotación de los recursos naturales y el medio ambiente en general. Finalmente, en la cuarta parte se presentará algunas de las razones por las cuales las empresas no reflejan la realidad económica sobre el impacto ambiental y los costos asociados a las actividades productivas.

IMPORTANCIA DEL MEDIO AMBIENTE Y SU RELACIÓN CON LA CORRIENTE ECONÓMICA

La raza humana, a lo largo de su existencia, se ha visto en “la necesidad” de satisfacer sus necesidades, sirviéndose así de ciertos recursos como, la mano de obra, la tecnología y aún más importante, los recursos que ofrece la naturaleza, siendo estos suministrados por el ecosistema global, llamado biosfera, el cual constituye el sustento de la vida en la tierra; su diversidad de recursos es parte fundamental en la producción de diversos bienes y servicios, pero a su vez funciona como el sumidero de los residuos y desperdicios que se generan durante las actividades económicas. (Azqueta, 2007)

La disciplina económica, se encarga del estudio de la extracción, producción y distribución de bienes y servicios, además de satisfacer las necesidades del ser humano, por medio de la adecuada asignación de los recursos. Ésta desempeña un papel fundamental en la sociedad y su relación con el medio ambiente permite entender más a fondo los procesos económicos que se dan en el contexto macroeconómico y al interior de la organización en general, ya que estas constituyen la unidad económica por excelencia del sistema en el que nos encontramos, el capitalismo.

La empresa entendida como una estructura abierta, es producto de un proceso económico, social, político, técnico y ecológico, en el cual interactúan diversos agentes, con intereses particulares. Por ello la diversidad en los intereses y los objetivos que persigue cada organización condicionan las actitudes que se toman frente al medio ambiente (Ariza Buenaventura et al., 2006).  Es decir que desde los diferentes tipos de empresa (comercial, industrial y financiarizada) se ve y se trata el tema medio ambiental de manera diferente, pues influyen otros aspectos, como las tendencias de consumo de los individuos, que muchas veces pueden ser gestionadas por las propias empresas.

Las empresas industriales, debido a la lógica de extracción y transformación a la que están sujetas, son las que generan mayor impacto sobre los procesos de deterioro medio ambiental, pues también producen una gran cantidad de desechos, producto de la realización de sus actividades, que impacta de manera significativa el equilibrio del ecosistema. Por otro lado, la empresa financiarizada, en su búsqueda por la maximización de valor, genera un criterio de reconocimiento en el que los recursos se ven como un simple insumo, que permite generar mayor rentabilidad (Ariza Buenaventura et al., 2006).

En este punto es de vital importancia reconocer el fuerte nexo que siempre ha existido entre la economía y el medio ambiente, pues “las actividades de producción, distribución y consumo de bienes y servicios que constituyen una parte fundamental de la esfera de lo económico, no pueden entenderse de forma auto contenida. La esfera de la economía está incrustada dentro de otra, la biosfera, que no sólo la contiene, sino que la nutre por un lado y la limita por otro” (Azqueta, 2007)

A raíz de esto, se hace más evidente la relación entre la economía y el medio ambiente, surgiendo así una nueva corriente denominada “Economía Ambiental” la cual en primera medida plantea la necesidad de establecer métodos que permitan estimar el valor económico de los daños ambientales y analizar el impacto de las actividades humanas a nivel social, económico y ambiental. Lo que ha llevado a incluir dichos impactos en los procesos de toma de decisiones de los actores que participan en la economía; haciéndose necesario que las variables ambientales estén nutridas de información relevante, disponible en un formato que les permita ser comprendidas y analizadas. Por esta razón, se ha venido desarrollando lo que se denomina Indicadores económicos, cuyo objetivo es lograr un equilibrio entre la precisión de indicadores físicos, que muestran completamente el estado del problema, y la evolución histórica de los mismos. (Aguilera & Alcántara, 1994)

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