ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La cura con DNA


Enviado por   •  23 de Junio de 2013  •  1.859 Palabras (8 Páginas)  •  296 Visitas

Página 1 de 8

LA CURA CON DNA

La terapia génica ha salido del exilio con tratamientos innovadores para la ceguera, el cáncer y la mortal enfermedad del niño de la burbuja

J. Neimark

Discover Sept 2009: 36-42

Traducido por: Dr. Aurelio Mendoza Medellín

“Durante sus primeros dos años de vida, mi hija Katlyn estuvo tocando la puerta del cielo cada día” dice Daisy Demerchant, una madre de 26 años de edad que reside en Centreville, New Brunswick, al norte de Maine. “Dos meses después de que nació empezó a estar enferma y ya nunca mejoró”. A los seis meses se le diagnosticó a Katlyn la enfermedad del niño de la burbuja, formalmente conocida como inmunodeficiencia combinada severa (IDCS), que priva al sistema inmune de la capacidad para combatir las infecciones. Existen muchas causas de la enfermedad; en el caso de Katlyn era la deficiencia de la enzima adenosina desaminasa, o ADA, que permite al cuerpo desha- cerse de una toxina natural llamada desoxiadenosina. Al acumularse la toxina destruye los linfocitos T y B, que son las células inmunes que combaten las infecciones. Como resul- tado, las células de Katlyn estaban muriendo.

Las opciones de tratamiento oscilaban entre lo riesgoso y lo siniestro. Una consistía en el transplante de médula ósea, con el cual las células de un donador podrían producir células T sanas para combatir los gérmenes invasores. Pero los transplantes de médula ósea pueden tener conse- cuencias letales y con frecuencia requieren medicamentos que inhiben aún más el sistema inmune del paciente, abriendo una ventana de vulnerabilidad hasta que el transplan- te muere. Otro tratamiento potencial era la aplicación de inyecciones de la enzima ADA. Pero existía el riesgo de que Katlyn desarrollara anticuerpos contra la enzima, dejándola inservi- ble. Y sin ningún tratamiento la niña simplemente moriría.

Mientras valoraban sus opciones, los médicos pusieron a la niña bajo un régimen de potentes antimicrobianos como medida de protección y la remitieron a un hospital que se halla- ba a 8 horas de su casa. Se convirtió en otro frágil bebé de burbuja, aislada del mundo. “Mi esposo dejó su trabajo en la construcción de camiones de bomberos y vivimos con Katlyn en el hospital durante 15 meses” dice Demarchant. Todo lo que usaban los padres tenía que estar estéril, batas, botines, mascarillas y guantes, y tenían que aguantarse el deseo apre- miante de abrazar y besar a su hija.

Precisamente cuando parecía que la vida de Katlyn nunca mejoraría, inter- vinieron la ciencia y el destino. Durante mucho tiempo su enferme- dad, llamada IDCS-ADA había llamado la atención de los investigadores que buscaban la forma de reparar defectos genéticos mediante una técnica llama- da terapia génica. Era una enfermedad rara, mortal y causada por una sola mutación, lo cual la hacía perfecta para quien estuviera intentando reemplazar DNA dañado con genes que sí funcionaran. Con todos sus problemas, la pequeña Katkyn Demerchant había sido casi hecha a la medida para Fabio Candotti, investigador del Instituto Nacional de Investigación sobre el Genoma Humano, en los Institutos Nacionales de Salud en Bethesda, Maryland. Desde antes de que Katlyn se presentara en los INS, ya los médicos en ese lugar se hallaban bien preparados: habían insertado genes sanos de la ADA en un retrovirus modificado de ratón un tipo de virus que puede entrar a las células huma- nas y transferirles nuevo material ge- nético en las cadenas de DNA de sus núcleos.

Una vez que llegó Katlyn, en Mayo de 2007, Candotti y su equipo sacaron células madre de su médula ósea y las expusieron al retrovirus modificado genéticamente, creando un híbrido humano-virus. Luego le inyectaron las células a Katlyn. Como misiles afines al calor, las células madre reparadas encontraron el camino de regreso a la médula ósea. Ahí empezaron a especializarse, creando todas las células secundarias o “hijas” que dichas células madre normalmente producen, incluyendo células T sanas con el gen de la ADA funcional.

Todos esperaban mientras Katlyn, todavía dentro de la burbuja, aprendía a caminar sobre el piso de su espacio aislado y estéril, y a jugar a través de una ventana protegida, con un perro visitante llamado Tofi. El 3 de sep- tiembre las pruebas de sangre mos- traron que el sistema inmune de Katlyn estaba siendo poblado con células T robustas y funcionales. Estaba tan repuesta que sus padres pudieron sacarla por primera vez desde que era una pequeñita. “El primer día que la sacamos estaba muy quieta y un poco aterrada”, dice Daisy Demerchant. “La segunda vez empezó a correr por ahí y nos preguntó muchísimas cosas. Apuntaba hacia el sol, las nubes, las hojas, los autos, todo lo imaginable, y nos preguntaba qué eran. Desde entonces nunca más quiso estar en interiores.”

Seis meses después del transplante de terapia génica Katlyn estaba tan saludable que los médicos la dejaron ir a su casa en Canadá. Puede pasar un año o más para que el sistema inmune se reconstituya por completo, de manera que Katlyn todavía toma antibióticos como precaución, pero hoy en día ella juega en exteriores, incluso en la tierra y es suficiente- mente resistente para volar en aviones comerciales.

Los nuevos tratamientos con DNA para Katlyn Demerchant y otros bebés de burbuja no son poco notables, son la culminación de un importante im- pulso para perfeccionar la terapia génica contra las enfermedades, dice Candotti. Al otro lado del océano, en Italia, también han sido curados bebés de burbuja con IDCS-ADA: un estudio liderado por Alessandro Aiuti, biólogo molecular del Instituto Teletón San Rafael para la Terapia Génica en Milán, restauró el sistema inmune de ocho de diez niños y el noveno presentó mejoría significativa.

Los

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (11.6 Kb)  
Leer 7 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com