Leucocitos

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Los leucocitos, también denominados glóbulos blancos, son células presentes en la sangre en concentraciones muy inferiores a las de los eritrocitos, que se clasifican en cinco tipos: neutrófilos / heterófilos, eosinófilos o acidófilos, basófilos, linfocitos y monocitos. Los tres primeros forman los denominados leucocitos granulares o granulocitos. Los linfocitos y monocitos forman los leucocitos agranulares o agranulocitos,

Los leucocitos son células dotadas de una gran movilidad, que usan la circulación sanguínea y linfática como medio de transporte. Ejercen funciones defensivas frente a agresiones, como virus, bacterias y partículas extrañas. 

[pic 7]GRANULOCITOS Los granulocitos se forman por diferenciación de células hematopoyéticas comprometidas que se denominan mieloblastos de las series neutrófila, eosinófila y basófila.

• NEUTRÓFILOS/ HETERÓFILOS

Constituyen los leucocitos más abundantes (representan el 60-70% de los leucocitos en humanos). En frotis sanguíneos de mamíferos, los neutrófilos se caracterizan por su forma globular (8-12 µm de diámetro) y presentar núcleo multilobulado. Atendiendo a la forma nuclear, los neutrófilos  se dividen en dos tipos: en banda, con el núcleo en forma de herradura, y segmentados, en los que el núcleo presenta lóbulos bien definidos, unidos por estrechos.

Los heterófilos presentan características similares a los neutrófilos, de forma que a microscopía óptica se observa el núcleo multilobulado y la presencia de numerosos gránulos con tamaño y afinidad tintorial variables según la especie.

Los neutrófilos y heterófilos son células de vida media corta, su promedio de vida en sangre es de únicamente unas horas, pero son células muy móviles, capaces de migrar a los tejidos, por diapédesis. Son células con alta capacidad fagocítica de partículas de pequeño tamaño, tales como virus, bacterias, pequeños parásitos, restos celulares, etc., por lo que se llaman micrófagos. Además, sintetizan una gran variedad de productos microbicidas, como lisozima.

• EOSINOFILOS

Su porcentaje varía entre especies (entorno el 2-5%). En frotis sanguíneos de mamífero, los eosinófilos presentan forma redondeada de 10-14 µm de diámetro y se caracterizan por la presencia de un núcleo generalmente bilobulado y por la presencia en el citoplasma de abundantes gránulos específicos, de unos 0,5 µm y fuertemente acidófilos.

Los eosinófilos tienen función de defensa microbicida y antiparasitaria, mediada por el contenido proteico fuertemente catiónico de los gránulos específicos. No tienen la capacidad de fagocitar bacterias como los neutrófilos, pero endocitan complejos antígeno-anticuerpo, evitando daños tisulares. Además, los eosinófilos intervienen en las respuestas inflamatorias y de hipersensibilidad, durante las cuales su número se incrementa en la sangre y en los órganos hematopoyéticos y del sistema inmunitario.

• BASOFILOS

Los basófilos son los leucocitos menos frecuentes (0,5% del total de leucocitos en sangre). Los basófilos se identifican en los frotis sanguíneos por su forma redondeada (8-12 µm de diámetro medio), núcleo redondeado o lobulado, y gránulos grandes y  fuertemente basófilos,  que en ocasiones ocultan parcialmente al núcleo.

Los basófilos intervienen en las respuestas inflamatorias, aumentando su número durante las mismas. Sus gránulos específicos contienen numerosos mediadores proinflamatorios y vasoactivos, como histamina, serotonina, heparina, factores quimiotácticos de otros leucocitos, así como enzimas que generan radicales oxidativos. Además, sintetizan, sin almacenamiento previo, diversos mediadores proinflamatorios de la familia de los eicosanoides (prostaglandinas, tromboxanos, leucotrienos), proceso en el que interviene el retículo endoplásmico liso, que son reguladores de la inflamación.

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