ÉTICA, CIENCIA Y AMBIENTE.

ÉTICA, CIENCIA Y AMBIENTE. REFLEXIONES TEÓRICAS

En nuestros días es muy importante plantearse la idea de que la ciencia no podrá seguirse viendo únicamente como una actividad metodológica sino también como una actividad axiológica, debido a que su finalidad no deberá apuntar solamente a como se desarrollará la tecnología, sino también a que esta misma promueva nuevos valores sobre la responsabilidad ética y social.

En la antigüedad se consideraba que la ciencia tendría que ser basada únicamente en valores cognitivos (conocedores) y reglas metodológicas (técnicas, prácticas.), que excluían total y completamente a los valores morales.

Sin embargo a mediados del mismo siglo xx, con las malas consecuencias ya vividas de la bomba atómica, es cuando se fue tomando conciencia de que la ciencia no era suficiente por si misma para fundar por si misma una sociedad conforme en el mundo, ya que ella si ofrecía muchos beneficios a la humanidad pero también representaba un inmenso riesgo. Se comprenderá entonces que la ciencia no tan solamente representa un beneficio para cambiar el mundo sino también para destruirlo.

El filosofo Francisco Bacon (filosofo ingles), decía que la ciencia era poder, y para el tenia un gran valor biológico, porque decía que era de mucha importancia para la vida, ya que en realidad la ciencia ofrece muchas ventajas fundamentales para el ser humano.

Entre ellas se destacarán las siguientes:

Gracias a la ciencia hoy en día se puede contar con equipos o tecnología capaz de pronosticar el clima, terremotos, etc., y por ello la humanidad puede prevenir muchos desastres. El ser humano se puede transportar de manera más rápida de un lado a otro, existen muchos avances en la medicina, se aplican mejores técnicas educativas en las escuelas, etc.

Por otro lado el sociólogo Robert Mertón, afirmaba que la ciencia no deberá solo ofrecer importantes conocimientos y beneficios, sino que también deberá incluir una seria de prácticas sociales gobernada por normas y valores.

Se puede decir que el conocimiento científico es un bien innegable para el ser humano, ya que el hombre se beneficia de dicho conocimiento en cuanto a la calidad de vida personal, ya que el proceso científico hará la vida más fácil del mismo, pero al ser mal empleada puede aumentar por el contrario los problemas humanos o ambientales y es necesario no solo ponerle limites a la mente humana, sino ponerle limites a la aplicación irresponsable de aquello que el hombre es capaz de inventar o descubrir.

Es por ello importante la aplicación de los principios éticos humanos en la práctica científica, ya que se sabe que todo conocimiento por teórico que sea, esta relacionado directamente con todos los aspectos de la vida. Y por ende tiene relación directa con el hombre, esto hace que se involucre el aspecto moral.

Las teorías científicas son solo una parte del resultado de la ciencia y la tecnología, pero su resultado total se alcanzará gracias a la práctica social que el hombre realice. Es por eso que la visión que deberá tener la ciencia y la tecnología debiera ser enfocada en principios éticos que respondan ante la sociedad.

De esta manera se planteará que la ciencia no puede pensar en la existencia de algún gran descubrimiento científico que tenga una aplicación con fines inhumanos, como por ejemplo: las armas químicas y toda una serie de acciones que día a día se aplican en el mundo moderno.

Es por eso que la ciencia tendrá la responsabilidad de crear nuevos avances enfocados al bienestar de la humanidad y dejar de lado aquellos inventos que solo benefician a unos cuantos y al progreso de la misma ciencia, sin importar si afecta o no al ser humano.

Entonces se entenderá por valor moral todo aquello que llevará al hombre a defenderse y crecer en su decoro de persona. Ya que el valor moral perfecciona al hombre en su voluntad, en su libertad, y en su razón. El valor moral le llevará a construirse como hombre y a hacerse mas humano. Desde luego que todo esto surgirá en el ceno familiar ya que es ahí en donde se dará una transmisión importante de valores, así como el ejemplo y modelo a seguir de las personas con gran significancia en la vida del ser humano.

Como ya se menciono anteriormente la moral y la ciencia son dos actividades que deberán ser complementarias, ya que las dos están llamadas a ayudar al hombre, en la transformación de la naturaleza y de la sociedad, al mejorar las condiciones de vida y el progreso del mismo hombre. La ciencia, según la moral deberá estar encaminada hacia fines sociales y morales, no nada más hacia fines específicos de la propia ciencia y que la beneficien solo a ella.

Un científico no deberá dejar de lado las consecuencias morales de sus descubrimientos, sino por el contrario deberá preocuparse de la aplicación que le da a cada uno de ellos y tener muy presente cada uno de los valores científico.

Según el filósofo de la ciencia Mario Bunge, el código moral de la ciencia deberá contener valores como los siguientes:

La honestidad intelectual: es la estima por la objetividad y la credibilidad, el desprecio por la falsedad y el autoengaño.

La independencia de juicio: es la costumbre de convencerse por si mismo con pruebas

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