Derecho al Juego

1. Reflexión personal sobre porqué el juego debe ser un Derecho de la Infancia.

El juego no es únicamente un momento de diversión y distracción. El juego tiene un

papel imprescindible en la vida del ser humano a la hora de desarrollarse, sobre todo

durante la infancia. A través del juego, l@s niñ@s se divierten al mismo tiempo que

aprenden sobre la vida, su entorno, y también sobre ellos mismos, aprenden a

conocerse, lo cual conlleva una gran importancia durante la etapa adolescente.

Mediante el juego, se potencian capacidades como la creatividad y la imaginación;

además de mejorar el desarrollo motor mediante juegos en los que tenga que utilizar

de los sentidos sensoriales como el tacto.

Al juego no se le llega a dar la importancia necesaria puesto que se ve como un

pasatiempo y no como un proceso de aprendizaje, es por eso que debe ser un derecho

de la infancia, pues el aprendizaje del/de la niñ@ se verá muy condicionado a

desarrollarse de una manera muy diferente sin el juego.

2. ¿Crees que se está garantizando este Derecho en la Infancia? ¿Consideras que

existen suficientes medidas para garantizar este Derecho en la actualidad? ¿Qué

puedes hacer tú para fomentar que se cumpla este Derecho?

Llegar a la conclusión de si un derecho está garantizado o no es muy complicado,

puesto que depende de muchos factores y de la postura desde dónde se hable.

Las teorías culturales-contextuales (teoría sociohistórica de Vygotsky y teoría

ecológica de Bronfenbrenner) establecen que el entorno, las relaciones sociales de

las personas y los cambios culturales condicionarán el desarrollo y el aprendizaje de

los individuos. Esto se demuestra en tod@s aquell@s niñ@s que crecen en países o

zonas de pobreza, en lugares donde la criminalidad y la violencia se dan de manera

continuada… Todas estas situaciones pueden provocar que el/la niñ@ sea

sobreprotegido por sus progenitores o tutores, limitando por tanto su libertad de

aprender de forma natural por sí mism@. Además, actualmente,

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