PUERTA LITERARIA

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PUERTA LITERARIA

PUERTA LITERARIA

CAMILO NOVOA

Yo escribo para quienes no pueden leerme. Los de abajo, los que esperan desde hace siglos en la cola de la historia, no saben leer

o no tienen con qué.

-        EDUARDO GALEANO

FRAGMENTOS

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No se es escritor por haber elegido decir ciertas cosas,

sino por la forma en que se digan.

-        JEAN PAUL SARTRE

ALMA DE POETA

Parece que los que tenemos alma de poeta, estamos hechos para que el amor se nos vaya delante nuestro. Y en realidad todos escribimos sobre el desamor.

Sobre esas curvas que no podemos conquistar. Sobre esa boca que jamás conseguiremos besar. Sobre esas pieles que no conseguiremos tocar. Estamos hechos para ser abandonados.

El amor siempre llega tarde a algún sitio cuando estamos enamorados.

AMORES FALLIDOS

A mis inolvidables amores Que cuando se alejan

Me dejan dibujando un libro Y soñando con los regresos.

Y los amigos

Que me regala la poesía.

He aprendido que hay amores fugaces que duran toda una vida y amores eternos que duran sólo una noche. Libros y mujeres prohibidas han forjado mi carácter, se han llevado personalidades que ya olvidé y han creado un ser más sabio y menos creyente en el amor.

¡La puta que me parió! Cuanto daría por no haberlas dejado ir, por cuidar un poco más de esos ojitos que me miraban como si yo fuese todo en la vida.

Ya no sufro por amores fallidos. Gracias por lo que me

enseñaron en la cama y por todo lo vivido, pero he encontrado brazos nuevos que me han acogido. Que oportuno que se hayan ido...

A veces quisiera olvidarme de muchas cosas que me han llevado a ser como soy, es decir las mentiras y desengaños que se apoderaron de mi alma en algún momento. Las decepciones y desilusiones que tomaron lugar en mi vida sólo por mi debilidad ante lo que creía como lo más hermoso que había visto.

¿Será que repetimos el fallo, amor? ¿Será que le damos una oportunidad más a este amor fallido? ¿Será que la vida nos separó para que descubriéramos que pertenecemos a lo que nos hacemos sentir...?

PESADILLAS NOCTURNAS

Parado en el balcón de mis pesares en una noche taciturna, aquellas palabras revuelan por mi cabeza, esas palabras que se vuelven un mártir, aquellas que te ponen forzosamente a pensar y sin lugar a dudas te roban el sueño.

Ha pasado un largo tiempo desde que olvidé que era el amor, ¿Es cierto lo que dicen?, ¿qué del amor al odio sólo hay un paso?, ¿Qué de ese dulce sentimiento te queda lo más putrefacto? Algunos dicen que el dolor y el sufrimiento son parte de la vida, pero que en ocasiones sufrimos innecesariamente.

Parado en el balcón de mis pesares en una noche taciturna, aquellas palabras revuelan por mi cabeza, y me pregunto, ¿Podremos evitar este sufrimiento, y aprender a disminuir ese dolor?

Preguntas que en noches como estas alborotan mi sueño.

ANHELO

Encontraré un nuevo querer, uno que me libere de esta soledad, esta que se asemeja a las calles de un lugar que nadie se atreve a transitar, a una asquerosa pocilga.

La vida querrá que recorra veredas y me haga víctima de la soberbia hermosura de una mujer que, al transitar por las aceras, me hará tirano de los deseos del corazón.

Le ruego a ese nuevo amor que me lleve al puerto de sus besos, moribundo, ebrio y perdido me deje entrar por las puertas de sus hermosos ojos cristalinos.

EL AMOR TIENE OTRO SIGNIFICADO

Durante años tuve una percepción del amor muy distinta a la que tengo ahora. Puede que una o la otra sea errónea, pero sé con certeza que cada vez que la palabra “amor” hace presencia, ya en mi cabeza no se visualizan idas al parque con las manos entrelazadas, ni cartas en las que se expresen los más profundos sentimientos, ni detalles como una serenata o un ramo de rosas.

Cada vez que la palabra “amor” aparece, lo único que percibo es el contorno de su rostro, los trazos que conforman la silueta de su cuerpo, el aroma que desprende y el sonido de su voz junto con el de su risa. Durante mucho tiempo creí que el amor era una sensación; sin embargo, cuando pienso en ello, a mi mente solo llega su nombre y el recuerdo de todo lo que ella representa.

EL PASILLO DE LOS AMANTES

Dudo mucho que ese individuo esté a mi nivel y tenga las capacidades de dominarte como solo yo supe hacer. Aquel hijo de puta que se cree tu dueño, que risa me da el solo pensar que él es un peón más en tu ajedrez y a diferencia de mí, yo soy el rey.

A ti te digo lo siguiente: recuerda aquel lugar, aquella noche, donde nuestros cuerpos ardían con deseo… Recuerda aquellos instantes en que mis labios saboreaban los tuyos con grandísima vehemencia, que, en tu souvenir no pases por alto que la luna fue cómplice de nuestro amor, que las paredes de ese pasillo sirvieron de testigo a tus incontrolables gemidos.

Como olvidar el enloquecedor aroma de tu perfume, que inevitablemente inhalaba, mientras deambulaba por tu cuello. Pretendo hacerte recordar los instantes en que mis manos se iban de excursión por tus nalgas.

Quiero que no olvides la alocada manera en que nuestras pulsaciones aumentaban, y como las gotas de sudor por tus montañas bajaban. Debes tener claro que las huellas que dejé jamás podrán ser borradas.

MI OTRA MITAD

Qué sería de mí sin la escritura, dónde estarían ahora mis pensamientos llenos de tristeza;

qué forma tendría mi alma si nunca me hubiese atrevido a dejarla en un poema.

Qué desorden serían mis emociones, qué impotencia cargaría con el

resto de mis sentimientos;

cómo podría vivir con tanto dolor y tormento.

Estarían mis sueños dentro de un remolino sin salida; cayendo hondo, muy hondo estaría cada vez mi alegría.

No tendría tanto sentido seguir en este mundo;

tampoco pensar en el futuro sin ser consciente de que poco

a poco se me acaban los días.

MAGIA ENTRE VERSOS

Cuando levanté la mirada, allí estaba ella, con la boca entreabierta en un gesto de ternura mirándome. Me acerqué despacio y rocé con mis labios los suyos, que eran tan ligeros, tan suaves y cálidos. Apreté mi boca contra la suya para hallar la enloquecedora humedad de su lengua. Fue un beso impetuoso, cargado de verdadera pasión, la abracé fuertemente, acaricié su cabello, y anduve por toda su espalda hasta finalmente llevar mis manos hacía la inmensidad de sus caderas. Sentí el deseo de crecer como un ente incontrolable y cerré los ojos para entregarme por completo al movimiento sensual. Mi cuerpo ardía, podía sentir como emanaba el calor de nuestros cuerpos buscándose entre sí; la tomé por sorpresa, me sumergí en la delicadeza de su cuello y la recorrí completa, bebiendo de su cuerpo cada rincón, como si fuera mi elixir de vida.

SOLEDAD

Me acompaña la soledad de mi cama como cada mañana, pero no siento que esté mal.

¿Está bien?

Empiezo a creer que sí.

No me preocupa ni atemoriza que alguien me deje de amar.

No hay desvelos anhelando tener la valentía de poder hablar.

No existen palabras cortando mi garganta esperando poder escapar.

No hay expectativas que alguien deba llenar. No existe nada de eso y no siento que esté mal. Creo que ya aprendí a valorarte, soledad.

ESCRITOS DEL ALMA

He estado analizando detenidamente muchas cosas. Y he llegado a la conclusión de que no merecemos esto, que merecemos algo mejor que ir echando raíces en lugares que no son nuestros, merecemos algo más que tratar de pertenecer a un sitio, a una persona o simplemente dar más de nosotros donde no somos correspondidos, porque algún día nos los arrebataran como casi todo lo que hemos tenido. No sé qué estamos esperando, a estas alturas de la vida lo único que importa es la estrella que nunca deja de brillar. Que de los millones de astros que existen en el universo, siempre nos llama la atención solo una estrella. Como la excepción. Quizás de esa forma es como deberíamos de ser nosotros para alguien, digo. Ser algo más que un alma vagando por un mundo donde ya no tiene rumbo alguno, algo así como ser nuestro propio pilar de la creación. Deberíamos por fin pertenecer a

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