ALIMENTACION

ALIMENTACION

“La alimentación es el proceso fisiológico por el cual un organismo recibe las sustancias que necesita para su mantenimiento o crecimiento, y para poder llevar a cabo las funciones de relación con el entorno (…)” .

Nutrición: “conjunto de procesos fisiológicos que proporcionan a un organismo las sustancias necesarias para su crecimiento o mantenimiento (…)” .

Las comidas deben constituir una actividad social porque si el comensal se encuentra en compañía con otras personas, se genera un clima agradable que le permite proveerse de nutrientes, masticar los alimentos con tranquilidad y disfrutar de lo que está ingiriendo. De esta forma ayudaremos a nuestro sistema digestivo a realizar un trabajo menor para llevar a cabo la digestión.

El aprendizaje, la práctica y la experiencia en la cocina, nos debe servir para elaborar platos que sean gratificantes y beneficiosos para nuestra salud. Debemos emplear nuestra imaginación para preparar comidas saludables y utilizar los recursos que la naturaleza nos ofrece, como por ejemplo especias que pocas veces utilizamos y pueden enriquecer el sabor del plato. Pero a la vez, esta gran riqueza de alimentos que disponemos tanto a nivel cuantitativo como cualitativo, podría provocar un sobreconsumo de nutrientes que resultaría peligroso, ya que favorece el desarrollo de enfermedades que perjudican nuestra salud, como la diabetes, la obesidad, enfermedades cardiovasculares, entre otras.

Cada individuo debe ingerir una determinada cantidad de calorías, en función de su edad, sexo, estatura, peso, actividad física y situación fisiológica. “(..) Para un adulto normal, el numero de calorías que debe consumir es entre 2000 y 3000 Kcal diarias (…)” . Sin embargo, esto no siempre sucede así, ya que en muchos casos la cantidad de calorías consumidas diariamente suelen ser superiores, por lo general con un mayor consumo de grasa, que no son recomendadas para una buena dieta, porque es la principal causante de obesidad. “Para conocer si una persona está en su peso ideal, existe una formula creada por la Organización Mundial de la Salud, llamada Índice de Masa Corporal que determina situaciones de obesidad, sobrepeso o delgadez extrema.” Esta fórmula consiste en multiplicar la estatura (en metros y centímetros) por sí misma, o sea la altura elevada al cuadrado. Luego se divide el peso (en kilogramos) por la cifra resultante anterior. El resultado es entonces, el Índice de Masa Corporal. Para una persona que está obesa el índice tiene que ser mayor que 30 y si tiene sobrepeso debe ser entre 25 y 29. Para que sea un peso normal tiene que estar entre 19 y 24, y si el índice es menos de 18 está indicando delgadez. Si individuo presenta un alto grado de obesidad o delgadez, debería preocuparse ya que estos dos extremos resultan perjudiciales para la salud, particularmente en la infancia porque podría dejar graves secuelas en su posterior desarrollo.

Por lo general se recomienda que tengamos una ingestión variada y equilibrada de alimentos. Al no existir un único alimento que nos proporcione todos los nutrientes para mantener la vida y la salud, debemos tener un consumo regular de un conjunto de alimentos que nos proporcionen las cantidades adecuadas de proteínas, lípidos, glúcidos, vitaminas minerales y agua. “Las calorías que consumimos diariamente, deben estar repartidas en un 55-58 % de hidratos de carbono, un 12-15 % de energía a partir de proteínas y un 30% de grasas.”

¿Dónde encontramos estos nutrientes? Las principales fuentes de proteínas son las carnes blancas (pollos, pescados, conejos, langostas, etc.), las carnes rojas (vaca, caballo, cerdo, etc.), el huevo y los lácteos. También existen en los vegetales, pero aquellas proteínas de origen animal son mas completas.

Otros nutrientes indispensables son los hidratos de carbono o azucares. Éstos nos proporcionan la energía necesaria para trabajar. Los hidratos de carbono se encuentran en el arroz, los cereales (trigo, avena, cebada, centeno), las pastas, papas, batatas, legumbres y semillas, en general. También en las frutas y hortalizas, que además nos aportan fibras.

Las fibras son un tipo de nutrientes que además de dar saciedad, ayudan a nuestros intestinos a que se movilicen y aceleran el paso de los residuos alimenticios. Podemos obtener fibras del salvado de trigo, pan integral, repollo, papas sin cáscaras, coliflor, naranja, manzana, apio, zanahoria, etc.

Las grasas proporcionan energía más del doble que la que proporcionan los hidratos de carbono y las proteínas. Aportan nutrientes necesarios, pero hay que prestar mucha atención a la cantidad y al tipo de grasas que consumimos porque como ya sabemos el exceso de grasas influye en el desarrollo de enfermedades.

La ingesta de alimentos, además tiene que estar repartida en cinco tomas: el desayuno, almuerzo y comida, merienda y cena. Menos de tres comidas en el día es demasiado poco y mas de cinco significa que se come en exceso. Al estar dividida entre horas, es decir una comida a media mañana y otra a media tarde, evitamos llegar con hambre y tener atracones a la hora del almuerzo o la cena, y conseguimos que el cuerpo cuente con suficiente energía para poder realizar las actividades diarias. El desayuno muchas veces es ignorado, lo cual es un error, porque teniendo en cuenta que en las horas previas de descanso no ingerimos alimentos, es fundamental que por la mañana nuestro organismo se provea de nutrientes y energía.

Así mismo, todos los detalles de la ingesta alimentaria van en función de las características de cada consumidor, por ejemplo, los niños, los ancianos, los deportistas y las embarazadas tienen distintas características que las diferencian del resto, por lo tanto tienen necesidades específicas.

Alimentación sana:

Una alimentación sana y equilibrada es la base sobre la que debe estar sustentada nuestra salud. “Una dieta equilibrada es aquella que contiene todos los alimentos que son necesarios para conseguir un estado optimo nutricional.” Describimos la alimentación saludable como aquella que es suficiente en energía y nutrientes, es decir que aporten la cantidad de calorías necesarias para mantener las funciones vitales y para realizar actividades físicas e intelectuales diarias. Tiene que ser equilibrada y respetar el porcentaje recomendado de nutrientes (55-58 % hidratos de carbono, 30 % de grasas y 12-15 % proteínas), variada porque hay que escoger una amplia variedad de alimentos que sean saludables y también tiene que estar adaptada a las necesidades fisiológicas de cada persona.

Una correcta nutrición junto con ciertos hábitos saludables de vida, como el ejercicio físico, el no fumar ni

...