Alberto Emmanuel

Momo

Momo era una niña huérfana que vivía en un templo deshabitado y viejo, un día unos hombres la encontraron, le construyeron su casa y se hicieron buenos amigos; paso el tiempo y los hombres se dieron cuenta que Momo era una niña que tenía el don de escuchar y transmitir algo que hacía a los demás pensar con inteligencia, además los niños que la conocían, disfrutaban jugar con ella porque siempre era divertido y no tenían ni un solo momento de aburrimiento. Ella tenía 2 grandes amigos, uno de ellos joven llamado Gigi Cicerone y otro viejo llamado Beppo Barrendero. Un día por la noche, Momo estaba sentada en el anfiteatro cuando vio unas sombras que provocaban frio, pero al final se fueron y no volvieron a aparecer.

Los hombres que Momo había visto eran Los hombres grises; hombres vestidos de color gris que siempre fumaban un cigarrillo gris, buscaban estafar a la agente haciéndole creer que ahorrarían tiempo pero en realidad dejarían de hacer cosas y su vida se volvería aburrida y sin sentido.

Ellos estaban haciendo un efecto mayor en los padres de los niños ya que no les prestaban la atención que ellos debían de tener y cada vez eran más los niños que iban a visitar a Momo al anfiteatro. Un día Momo estaba sentada en las escaleras del anfiteatro cuando vio una muñeca grande, quiso jugar con ella, pero no pudo, entonces apareció un hombre gris que a su vez traía mas muñecos con los cuales quería remplazar a los amigos de Momo pero ella sostuvo una riña con él; la cual gano Momo.

Un día Momo estaba en el anfiteatro, entonces apareció una tortuga que escribía cosas en su caparazón y su intención era cuidar a Momo de los hombres grises. Los hombre grises empiezan a buscar a Momo; ellos estaban en todas partes de la ciudad y Momo estaba caminando por la misma siguiendo a la tortuga que se dirigía a la casa de ninguna parte, ahí es donde encontró al maestro hora, quien muestra a Momo las flores horarias, es decir su propio corazón.

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