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Economía española, sector agrario

Joaquin Garcia VelascoTrabajo10 de Octubre de 2016

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  1. INTRODUCCIÓN

En este capítulo empezaremos identificando los diferentes elementos productivos que componen el sector agrario, así como su evolución en los últimos treinta años y cómo se ha llegado a una especialización productiva y comercial de la agricultura en nuestro país, por eso haremos también un análisis de de las técnicas eficientes y los factores que han conseguido que este sector evolucione. Por último describiremos los elementos más importantes que comprenden la Política Agrícola Común (PAC).

Actualmente, en la economía mundial, la agricultura sigue teniendo un peso importante, sobre todo desde el punto de vista del empleo, pero es cierto que el sector agrario ha ido perdiendo posiciones. Esto puede quedar reflejado en la escasa contribución al producto y al empleo que realizan los países desarrollados en el área de la OCDE, en torno al 2 y al 5%.

Ha sido imprescindible la interacción entre el sector agrario y el resto del sistema productivo para aprovechar al máximo el crecimiento de la economía, en contra de las conclusiones equívocas que se tienen de que la agricultura impide que el resto de actividades pertenecientes al sector secundario y terciario se desarrollen.

Pero la agricultura no ha contribuido en el crecimiento económico siempre del mismo modo. En una primera fase inicial los servicios y la industria demandaban de la agricultura mano de obra y servicios financieros. Posteriormente los agricultores asumieron nuevas tareas relacionadas tanto con la conservación como con el mantenimiento del medio ambiente. Por otro lado, la agricultura ha tenido que aumentar su grado de competencia como consecuencia de la liberalización de los intercambios comerciales.

  1. DELIMITACIÓN Y CLASIFICACIÓN

Si nos fijamos en las Cuentas Anuales veremos que el sector primario está formado por las actividades de agricultura, ganadería, selvicultura y pesca. En España la producción de este tipo de actividades tienen una baja aportación en el VAB (riqueza generada durante un periodo dado que se obtiene por diferencia entre el valor de la producción y los consumos intermedios utilizados como materias primas, servicios y suministros exteriores, etc y en el empleo, ligeramente por encima del 90% en los últimos años. Las actividades de pesca y acuicultura tienen una contribución en torno al 5%.

RECUADRO 1.

Hay que destacar que España está muy especializada en este sector de la pesca si tomamos como referencia el conjunto de la Unión Europea debido a:

  1. Su producción que se eleva a algo más de un millón de Tm.
  2. Genera la cuarta parte del empleo a tiempo completo de la Unión Europea.
  3. Este sector representa la sexta parte de la flota europea.
  4. El consumo de productos frescos por habitante es de 38kg, el cual supera en un 60% a la media comunitaria.

A pesar de la especialización productiva de España en este sector se sigue produciendo un déficit que llegó a alcanzar en el año 2013 1910 millones de euros debido a que los principales proveedores, que son Marruecos, Argentina, Ecuador, Francia, China y Portugal, que producen a un coste menor son quienes absorben el 40% de las importaciones españolas. Este déficit se compensa con el superávit producido entre los países de la Unión Europea.

CUADRO 1.

La agricultura normalmente se desagrega a través de orientaciones. En este cuadro aparecen nueve grandes actividades, importantes por su producción y por su superficie. Atendiendo a los datos que se nos muestran podemos ver que destacan, claramente cinco orientaciones que son granívoros, agricultura general, bovinos, horticultura y frutales y cítricos. En conjunto, su aportación a la producción sectorial se acerca al 80%.

Pero las orientaciones también se pueden clasificar en función de los requerimientos territoriales por unidad de producto, ya que la mayor peculiaridad de la agricultura es que utiliza la tierra como el principal factor de producción. Por lo  tanto, atendiendo a esta clasificación podemos denominar a las orientaciones como extensivas si los requerimientos territoriales por unidad de producto son superiores a la media del conjunto de referencia o intensivas si son inferiores. Por lo tanto, en esta segunda clasificación podemos ver que la agricultura general destaca en las actividades vegetales y ovinos y caprinos en las animales por ser orientaciones extensivas y horticultura y granívoros por ser intensivas.

  1. EVOLUCIÓN DEL SECTOR

Se procede a comparar la agricultura española en los últimos 30 años con el conjunto de la economía.

  1. Análisis comparado

La agricultura tradicional se basaba en dos aspectos importantes:

  1. Una mano de obra abundante y mal remunerada, por lo que las técnicas de producción eran  técnicas atrasadas.
  2. Productos agrarios tradicionales como el cereal o las legumbres que daban lugar a una oferta y demanda de alimentos poco diversificada.

Más tarde se produjo una mejora en el nivel de vida de los ciudadanos, repercutiendo así en su dieta alimentaria dando lugar al mayor consumo de alimentos hortofrutícolas y ganaderos. Además la emigración propició una sustitución del trabajo por el capital.

Debido a lo citado anteriormente la agricultura ha experimentado una serie de cambios para poder adaptarse a la nueva demanda de alimentos. Si en un primer momento el principal objetivo era aumentar la oferta interior para poder satisfacer los cambios en la demanda de alimentos de una sociedad que atravesaba un periodo de crecimiento y urbanización, ahora el principal objetivo será reducir la producción para poder disminuir los costes en excedentes estructurales.

CUADRO 2

Fijándonos en el cuadro podemos ver:

  • Desde 1985, la participación en el empleo del sector agrario ha descendido, quedando en tan sólo un 4% en 2014.
  • La productividad la podemos dividir en precios corrientes (teniendo en cuenta el efecto de la inflación) con un 3% por debajo del VAB agrario en el año 2014, y en términos reales el descenso ha sido menor.

Como conclusión podemos decir que el sector agrario ha perdido importancia en el conjunto de la economía española, y se puede explicar por dos hechos:

  1. Debido al crecimiento económico las preferencias de los consumidores van cambiando, y la parte de la renta que iba destinada al gasto en alimentación es más baja.
  2. El cambio en la naturaleza de la oferta agraria

3.2. INTERCAMBIOS COMERCIALES CON EL EXTERIOR

El gran cambio experimentado por  el sector agrario  es su creciente integración internacional.

 En este punto tendremos en cuenta tanto los productos primarios como los que han sido transformados por la Industria de alimentos y bebida. Tradicionalmente, la oferta agraria se dirigía a satisfacer la demanda interna, pero desde que este sector se integró en la Europa Verde se consiguió (Cuadro 3):

  1. Un continuo aumento del coeficiente de apertura externa (cocientre entre la suma de importaciones y exportaciones agroalimentarias y el VAB de agricultura, ganadería y pesca y de Industria de alimentos, bebidas y tabaco) del sector agroalimentario español, que como podemos comprobar en el Cuadro 3, se ha doblado en el periodo comprendido entre 1985-2014.
  2. El mantenimiento de su peso en el total de las exportaciones de bienes, pese a la comentada desagrarización experimentada por nuestra estructura productiva.

Gracias a la industria agroalimentaria tuvimos un superávit comercial en varios años del periodo mencionado. Cabe destacar que en 2014 se dio una alta tasa de cobertura debido al alto grado de competitividad de una serie de producciones (hortalizas, frutas, bebidas, aceite de oliva y carnes).         

El sector agrario español ha sabido aprovecharse de su integración en la Unión Europea, explotando sus ventajas comparativas en una serie de producciones que son típicas de la zona mediterránea y que, por otro lado, se encuentran entre las que disfrutan de un mayor crecimiento de la demanda mundial. Esta especialización productiva y comercial conlleva riesgos dado el alto grado de exposición a la competencia internacional de una parte creciente de la producción agraria española.

MEDIDAS PREVISIBLES

  • El principal objetivo que se quiere llegar a alcanzar es la liberalización de los intercambios agrarios, para ello la Organización Mundial del Comercio (OMC) reducirá los instrumentos de protección.
  • La Unión Europea está interesada en fortalecer las relaciones comerciales con los países de la ribera meridional del Mediterráneo (Italia, Portugal, Grecia entre otros), por eso tenderá a abrirse a los competidores extracomunitarios (sobre todo al mercado de frutas y hortalizas que requiere mucho factor trabajo).

4. ESPECIALIZACIÓN PRODUCTIVA Y COMERCIAL

La oferta agraria española  se ha ido transformando, debido a:

  • la demanda de nuevos productos
  • las nuevas disponibilidades de factores
  • las modificaciones del marco institucional

 Los tres factores más relevantes utilizados para explicar la estructura productiva de la agricultura española son:

  1. La demanda interna que presenta rasgos distintivos.
  2. Los mecanismos de protección frente a la competencia exterior para lograr el autoabastecimiento en las actividades agrarias de mayor relevancia.
  3. Las ventajas comparativas existentes derivadas de la disponibilidad y calidad de los recursos naturales y del capital humano.

CUADRO 4

Hay que tener en cuenta que tras la integración del sector agrario en la Europa Verde, este ha sufrido importantes transformaciones en su tejido productivo. En este cuadro observamos que la cuota española en la producción agraria de la Unión ha sufrido un gran aumento entre 1987 y 2014 dentro de la UE-12. Posteriormente, esta cuota ha bajado debido a que ya pasamos a ser 28 países en la UE. Cabe decir que, en cuanto a las orientaciones vegetales, destaca el olivar, los frutales y cítricos, y la especialización en horticultura. Y, por último, en cuanto a las orientaciones ganaderas, cabe destacar que la participación de los granívoros, y  de los ovinos y caprinos son las más altas, y, además, son similares. A pesar de ello, a escala europea los bovinos tienen más relevancia productiva.

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