El Poder De Lo Simple

DESARROLLO

El texto parte de la explicación de lo simple, “El Poder de lo Simple” Nos centra en que comencemos a alejarnos de la complejidad que nos entorpece y busquemos lo sencillo, lo esencial en nuestros negocios. Este debe ser el interés de cualquier persona y de las empresas, pensar en términos de sencillez en términos operativos pues nada puede ser más simple que la grandeza de ser simple. Ser simple es ser grande. El texto dice “Esforzarse más, creer en uno mismo, «caminar sobre brasas de carbón» y decir «sí puedo» no son peldaños que nos ayuden a subir en la escalera del éxito. Una realidad que aún sorprende a muchos es que el éxito no proviene del interior de uno mismo. El éxito es algo que otros nos dan. Cuando se enfoca en sí mismo, sólo tiene un número para el sorteo. Al abrir el horizonte e incluir a otros, aumentan considerablemente las probabilidades de ganar”. Ser simple es creer en los demás, es deshacernos de aquel grado de orgullo, prepotencia, complejidad y arrogancia, para poder abrirnos y reaccionar positivamente ante las oportunidades, ante el encuentro consigo mismo y con el otro. Hoy día es muy necesario simplificar las cosas. El libro nos demuestra variedad de ejemplos en donde muchos quisieron realizar grandes cosas, pensando siempre en lo grandioso, en nuestros términos en lo rebuscado y no llegaron a alcanzar el éxito. En cambio aquel que han vida con simplicidad evitando lo complejo nos han dado muestras de superación y haber galardonado su vida desde lo sencillo, desde el buen sentido, como se nos dice: “Confíe en su sentido común. Le dirá lo que tiene que hacer”, “Trabajar más, no es tan eficaz como trabajar mejor”. El sentido común se basa en lo que se piensa de los demás, es el estar alerta y en sintonía con los demás. El sentido común es la sabiduría que todos compartimos. Es algo que registra una verdad para una comunidad. Las ideas simples tienden a ser obvias porque tienen un toque de realidad. Pero la gente no se fía de sus instintos. Piensa que siempre hay una respuesta oculta más compleja. Lo que es verdad para uno es verdad para muchos. Por eso, en los negocios una solución simple suele funcionar muy bien en el mercado. Pensar no desde nuestros intereses, sino desde los intereses de los demás. Es escuchar al otro, eligiendo palabras cortas, sencillas, familiares, que lleven al diálogo, a evitar redundancias, a utilizar términos entendibles y en lenguaje de la sencillez de la fácil expresión e interpretación. Es decir permitir que los demás confíen en nosotros porque nos entienden. No se debe ser complicado. Se debe tratar de simplificar las cosas. Como dice la Sagrada Escritura: «Bienaventurados los sencillos porque tendrán mucha paz» Es ver la vida con sentido, un poco más simple y los negocios serán más eficaces, darán satisfacción de éxito por lo alcanzado. Es convertirse en líderes positivos, con características de buenos competidores, cubriendo las necesidades de los consumidores y la demanda del producto. Ser venderos del éxito a través de lo simple, de lo sencillo. La gente de negocio debería escribir como hable y lograría mucho más. Hay que fomentar la simplicidad como una forma de escuchar mejor, hoy día no sabemos escuchar, por eso se presentan dificultades en los negocios y en las relaciones interpersonales. Se está viviendo la época en que oímos pero no escuchamos. Se debe tener confianza en si mismos, ser claros y precisos, estar seguros de que cada persona en su empresa u organización, entiende qué es lo que ésta pretende, cuál es su negocio. Es ser simple para los demás, aún cuando esto no es fácil, porque nos dejar influenciar y pensar que quizá nuestra sencillez no es valida y menos para un negocio. No significa no tener educación, sino comunicarnos en tal forma que nos entiendan y que sepan se los tenemos en cuenta, desde el pequeño al grande. “Las grandes ideas

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