Gestion Proyectos
marcelaco272 de Noviembre de 2014
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Actualmente, los equipos que buscan mejorar la gestión de proyectos de software o sitios de internet le prestan poca atención a las lecciones aprendidas del pasado sea cual fuere la distancia temporal que separa el momento actual del punto donde se pueden aprender esas lecciones.
En este sentido, se suele pensar que la línea de tiempo que conecta nuestros propios días con los antecedentes en proyectos es mucho más breve que aquello que indica la realidad objetiva de la historia de los proyectos en general. De esta forma se pierde la
oportunidad de incorporar una visión adicional de la rica experiencia de los directores de proyectos que los precedieron.
La historia de la ingeniería de proyecto revela que la mayoría de los proyectos guardan fuertes similitudes. Todos tienen requerimientos, diseños y restricciones. Dependen de la comunicación, la toma de decisión y la combinación de pensamientos lógicos y creativos. Usualmente involucran una programación, un presupuesto y un cliente.
Una de las actividades centrales y más importantes del proyecto es combinar el trabajo de diferentes grupos de personas en un todo singular y coherente que sea útil para la gente o el cliente. Independientemente que el proyecto desarrolle una aplicación HTML, un producto de cemento y acero, etc. siempre hay un grupo central de conceptos indiscutibles que los proyectos comparten.
Revisando y analizando la historia y la actualidad de diferentes sectores industriales y de servicios se pueden obtener soluciones nuevas, innovaciones u otros puntos de vista que ayuden a mejorar nuestras soluciones.
Scott Berkun resume tres lecciones claves que obtuvo de la revisión de proyectos:
1. La gestión de proyecto y el desarrollo de software no son artes sagradas: cualquier trabajo de ingeniería moderno es una nueva marca dentro de una larga historia de hacer cosas. Las competencias y las tecnologías pueden cambiar, pero la mayoría de los desafíos que hacen a la ingeniería difícil permanecen. Todas las cosas que realizamos son nuevas en algún sentido y derivan de otras. El autor señala que si queremos utilizar tanto conocimiento como podamos del pasado, necesitamos estar abiertos y comprometidos a revisar aspectos de lo nuevo y lo derivado y compararlo con aquello hecho previamente.
2. Cuanto más simple su mirada sobre aquello que tiene que hacer, más enfocado estará en hacerlo: mantener una visión simple sobre nuestro trabajo, nos puede permitir una comparación con otras formas de hacer cosas que ya existen. Hay cantidad de ejemplos y lecciones de la historia y la industria moderna que pueden tomarse, compararse o contrastarse con nuestro caso. Permanecer curiosos y abiertos hace el posible crecimiento, y requiere práctica y esfuerzo mantener esta actitud de pensamiento. Para mantenernos aprendiendo, debemos evitar la tentación de los puntos de vista tradicionales o seguros sobre cómo hacer las cosas.
3. Simple no significa fácil: los mejores atletas, escritores, programadores, gerentes tienden a ser aquellos que siempre ven su actividad simple en su naturaleza y simultáneamente difícil en su realización. Recordemos que simple no tiene el mismo significado que fácil. Por ejemplo, correr una maratón es algo simple, el atleta inicia la carrera y no se detiene hasta completar la distancia de 42 km. La dificultad propia de esta competencia es innegable, tanto como su simplicidad. El liderazgo y la gestión también son actividades difíciles, aunque su naturaleza de hacer la cosa en una forma específica en la dirección de los objetivos es simple.
Aprendiendo de las Fallas
Scott Berkun, plantea que al estudiar la historia de los proyecto surge un pregunta simple reiteradamente, ¿por qué podría cualquiera persona estar dispuesta a sufrir errores y disgustos pudiendo
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