Honor O Hipocresía

Honor o hipocresía

——Un análisis de los personajes de El Alcalde de Zalamea

Resumen

　　　El Alcalde de Zalamea gira en torno al tema de honor, que es una preocupación constante de la humanidad, y se refleja sobre todo en las obras literarias de la Edad Media y los siglos de oro. En esta obra, Calderón nos presenta el fuerte contraste entre el verdadero honor y el reverso del honor, es decir la hipocresía mediante los personajes de diferentes posiciónes sociales y su arreglamiento magnífico de argumento: la comparación del carácter entre Crespo y su hijo Juan, el conflicto y compromiso entre Crespo y don Lope, asícomo el contraste entre la sinvergüenza de Don Álvaro y la tolerancia y transigencia de Crespo. Por un lado nos hace reflexionar profundamente sobre el verdadero valor y significado del honor, y por otro, nos deja claro cómo debemos comportarnos como un hombre hecho y derecho. Esta obra no se limita a ser un drama, sino nos impresiona con una influencia moralizadora y perpetua.

Palabras claves: honor hipocresía

Introducción

　　Los temas que los dramaturgos del Siglo de Oro español trataron con mucha frecuncia son el honor y los derechos del campesino violados por la casta militar o por la nobleza. El honor es un tema que ha captado la atención de los escritores de la Edad Media, y que no ha desvanecido todavía en el siglo de Oro. Aunque en el siglo XVII España ya está en su decadencia, y no sino es un el esqueleto de un gigante, a los españoles les fascinaba el tema de honor por tener éste un valor social reconocible en medio de una sociedad tan estratificada como la española de los siglos XVI y XVII, en la que las clases sociales se diferenciaban unas de otras no tan soló por la afluencia o las riquezas que poseen sino por la ostentación del honor. El honor medieval fue, en esencia, una virtud construida sobre categorías como el orgullo, la obediencia, la fidelidad, la adoración, y el sacrificio personal, mientras que el honor del Siglo de Oro nos abre una nueva perspectiva de honor en base a la enfásis de la independencia personal, y el libre albedrío de la clase villana. En El Alcalde de Zalamea, Calderón destaca dos visiones de honor, es decir, el honor horizontal y el honor vertical. En vez de alabar el honor vertical, él valora mucho el honor horizontal, poniendo en relieve el honor que gana por uno mismo por su propio esfuerzo en vez del honor heredado de familia que a veces se convierte en la hipocresía. En esta obra, nos muestra con escenas vívidas las visiones bastantes diferentes de la clase villana y la clase de nobleza sobre el honor mediante el conflicto y el compromiso de los personajes. Y por un lado, nos muestra qué es la verdadero valor de honor, y por otro, nos declara qué es la hipocresía bajo la capa de honor. A contiunación vamos a analizar mediante el diálogo de los personajes el honor y la hipocresía reflejados en este drama, y también cómo el honor horizontal del villano logra el triunfo final en cuanto al honor vertical o hipocresía y gana el respeto de todos.

Capítulo I El argumento del drama y los principales personajes.

　　　El alcalde de Zalamea gira en torno al rapto y ultraje de Isabel, hija de Pedro Crespo, por parte de Don Álvaro, capitán de las españoles estacionadas en Zalamea, y que invadirán Portugal. Don Alvaro recibe albergue en casa de Pedro Crespo, un villano rico del pueblo. Don Alvaro rapta y ultraja a Isabel, hija de Pedro Crespo, en infracción de la disciplina establecida de la tropa. Para reparar el honor perdido, Crespo suplica a Don Alvaro para casar su hija con él. A pesar de los ruegos de éste, Don Alvaro no está interesado en casarse con Isabel por ser una villana en vez de una dama. En eso, Pedro Crespo es electo alcalde del pueblo justo en medio de esta tragedia familiar. Valiándose de su poder judical, hace detener a Don Álvaro, y decide ejecutarle. Cuando Don Lope de Figueroa se entera de lo ocurrido, manda que lo libere a Don Álvaro, su capitán. Pero Crespo se niega a hacerlo sino lo ejecuta antes del tiempo decididamente tras seguirle un proceso legal para el cual Isabel debe afirmar sin dejar ninguna oportunidad para que le libera. Y cuando llega el Rey Felipe II, pregunta por lo que ocurre, y dado el crimen cometido por Don Álvaro, el rey justicifa su ejecución a manos de Pedro Crespo, y lo confirma nombrándolo alcalde perpetuo de Zalamea.

Los personajes principales del drama:

Pedro Crespo: Aunque siendo un labrador, es un hombre de mucha inteligencia y prudencia. Tiene gran dominio de sí mismo y gran experiencia de la vida, no cede ante el poder a ciegas, tiene su propio criterio de valorar lo bueno y lo malo, hace las cosas según su propia voluntad y criterio sin atender la clase social, en cambio, muestra mucho orgullo y un exceso de prudencia.Considera el honor como algo tan importante como la vida.

Juan: Es un joven impulsivo, inexperto, acaricia gran esperanza hacia el futuro, considera el honor como algo muy importante pero no tiene muy claro el verdadero valor de honor, se deja llevar por los impulsos sin mucha reflexión.

Don Lope: Es un veterano que es muy austero y orgulloso, tiene mucha consciencia de jerarquía y se deja claro que va a defender en todos momentos a los soldados. Y siempre muestra una actitud muy áspera contra quien no le obedece ni respeta, pero no deja de ser un hombre recto, justo, y digna de respeto.

Don Álvaro: Es una persona hipócrita y vil, lo que él dice no corresponde con lo que hace, también es un hombre impulsivo, y esclavizado por un deseo erótico, a este defecto debe añadir una falta de responsabilidad. Don Álvaro acumula todas las notas negativas del honor estamental. Muestra su hipocresía bajo la capa del honor, y paga caro por lo que ha hecho. Esto significa el triunfo de la dignidad personal frente al honor vertical.

Don Mendo: Es el único noble de Zalamea, pero desafortunadamente es un noble que se halla en la decadencia. Todo lo que queda es una ejecutoria de su familia. Es un personaje hipócrita. Él es pobre no es porque ya no tiene dinero, sino es pobre en espiritu y en su personalidad. Él se sumerge en el honor decaído sin tener nada para sustentarlo. Su comportamiento es el objeto de desprecio, es que siempre se finge ser lo que no es, y además lo que dice no corresponde lo que hace. Este personaje desemepeña un papel cómico y irónico en la obra y desaparece

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