Las Buenas Conciencias

Las Buenas Conciencias, Carlos Fuentes:

Este libro se basa en la vida del joven Jaime Ceballos, miembro de una acomodada familia burguesa conservadora guanajuatense de los primeros años post revolucionarios pero con una antigua tradición que se remonta a varias generaciones. El protagonista se ve inmiscuido en una batalla interna, gracias a lo tradicional que es su familia, de pensamiento católico muy arraigado, y su propia manera de pensar e ideas que chocan con las de sus parientes.

La historia se remonta a la vida de los primeros Ceballos en Guanajuato, el señor Higinio y la señora Margarita, que llegaron de Madrid. Los patriarcas les inculcaron el catolicismo y sus costumbres a sus descendientes, y fueron convirtiéndose en una familia muy importante, exitosa, terminando por ganar un buen nombre y reputación en la ciudad.

Los problemas empezaron a existir cuando los nietos de Higinio y Margarita llegaron a ser adultos: Asunción, que se casó con Jorge Barcarcel y Rodolfo que se juntó con Adelina, con quien tuvo un hijo llamado Jaime. Asunción y Jorge vivían en Inglaterra, y cuando regresaron a Guanajuato, Rodolfo corrió a Adelina y se quedó en la casa familiar junto con su hermana.

La hermana de Rodrigo y su esposo, siempre trataron de que el niño fuera como ellos, religioso, educado, un hombre “honorable -según la idea tradicionalista de la familia Ceballos- empieza a odiar el estilo de vida que han tenido sus ancestros por considerarlos hipócritas. Esto lo dice por las conductas que tienen a pesar de lo que dicen es su ideología: Su papá se separa de su madre porque “no es de la misma clase social que él”, no lo dejan juntarse con su mejor amigo por ser de rasgos indígenas, su tío dice ser honorable pero se la pasa con prostitutas y su tía, que tiene el rol de la mamá, se la pasa teniendo deseos sexuales hasta por su propio sobrino.

En esta novela de Carlos Fuentes se describe de forma muy exacta el estilo de vida de una familia conservadora de la época, de su rechazo a los demás estilos de vida y de su apego por las tradiciones católicas. Por el contexto en el que se da la novela, en la época pre, durante y post Ley Calles, creo que la burguesía de Guanajuato, siendo representada por la familia Ceballos, seguía manteniendo el culto católico para mantener un estatus social, no por su devoción a Jesucristo.

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