Los Corazones Que Se Auedan
rubiapr19 de Abril de 2015
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Ensayo: Los cerebros que se van y el corazón que se queda
Magali García Ramis, escritora puertorriqueña nacida para 1946, hizo un ensayo que encuentro sumamente interesante. El mismo se titula: “Los cerebros que se van y el corazón que se queda”. En él, la autora nos dice que el puertorriqueño se va al exterior buscando oportunidades de trabajo, tranquilidad, bienestar, seguridad y pensando en el progreso que tendrá en Estados Unidos. Sus sentimientos se quedan en su patria y siempre tienen el deseo de regresar a la misma pronto. En muchas ocasiones, el puertorriqueño cuando se va a pesar de lograr sus metas en el aspecto material, espiritualmente añora las costumbres, tradiciones, sensibilidad y la empatía del puertorriqueño. Eso se palpa más a menudo cuando comienzan las festividades navideñas, acción de gracias y otros, ya que desean sentir el calor del hogar que abandonaron en un momento dado para buscar nuevos horizontes.
En nuestra sociedad existen muchos problemas o situaciones por los cuales los personas se van. Algunos de los que destaca la autora son: el vandalismo, la falta de empleo, poca seguridad, criminalidad, violación a las leyes y malos servicios médicos. La gente compra casas en urbanizaciones donde le prometen una buena seguridad, pero es todo lo contrario Las “gangas y grupos de criminales” esperan a que sea tarde en la noche para destruir los carros, asaltar y robar en las casas. Esto hace que el puertorriqueño no se sienta seguro y decida irse para Allá. Otro problema que nos plantea la autora, es la falta de trabajo en Puerto Rico. Muchas personas se van por la necesidad, porque supuestamente Allá tienen un futuro prometedor. Se van porque tienen ambiciones y muchas veces no se conforman con lo que le ofrecen Acá y deciden irse al extranjero donde le pagan el doble, olvidando su patria y a su familia, con tal de tener un futuro “mejor”. Otra razón para irse es que muchos matrimonios terminan en divorcio y quieren hacer una vida nueva.
Actualmente, en el siglo 21, están vigentes cada uno de los problemas y conflictos que la autora plantea en el ensayo. Por ejemplo, los servicios médicos muchas veces no son los mejores y las personas tienen que viajar para realizarse un tratamiento u operación que les sale costosísimas. A pesar de todo creo que la salud en Puerto Rico ha mejorado, ya que tenemos mejores profesionales y más comprometidos. Lo que no llega a veces es el dinero porque las aseguradoras se quedan con él. Los puertorriqueños que viajan constantemente, comentan que los servicios médicos son mejores allá. En cuanto a seguridad, podemos decir que estamos peor. En cada esquina y rincón hay vandalismo, criminalidad, asesinato, asaltos y robos. No estamos seguros en ninguna parte. Tenemos que estar encerrados, la policía no trabaja efectivamente y no tienen las herramientas para hacerlo. Otro problema que esta vigente, es la falta de empleo, que es la causa principal por la que la gente emigra. Necesitamos más fuentes de empleo.
Volviendo al título del ensayo donde nos dice que; Los cerebros se van y el corazón se queda, pienso que es que la mayoría de los profesionales de Puerto Rico, cuando terminan sus estudios y no encuentran oportunidad de trabajo se van para los Estados Unidos u otros países. Sus cerebros se van a trabajar, a forjar un mejor futuro, pero sus corazones se quedan en su patria con sus familias y amistades. Se pasan leyendo, llamando e investigando todo sobre su lugar de origen, porque lo extrañan y lo añoran. Espero que pronto llegue el día en que esto no tenga que ser así y nuestros profesionales puedan quedarse todos a servir y trabajar en su nación pues de esta manera tendremos un Puerto Rico mejor.
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