Érase una vez familia

Érase una vez familia, Alfredo Torres un hombre de piel Blanca con ojos azules, que se esfuerza por mantener una familia, que es el padre de Amelia, vendía productos médicos a las farmacias del centro de Monterrey. Estuvo casado con Elena López una mujer trabajadora, alta de pelo castaño, ojos verdes y piel aperlada, con la que tuvo dos hijos, Alejandro que era un joven de piel banca y ojos verdes, que desde que cumplió la mayoría de edad se puso a trabajar por que todavía no sabía que carrera estudiar, y Amelia la cual era de tez blanca con ojos azules, y hasta el momento sólo se preocupaba por andar a la moda, los hijos actualmente tienen 19 y 18 años respectivamente.

Después de 2 años casado con Elena, Alfredo la engaña con Bertha Esquivel, la cual era de tez Blanca con ojos color miel, quien era la propietaria de una de las farmacias a la que Alfredo le surtia producto médico, Alfredo y Bertha tuvieron un hijo, al cual llamaron Alberto, era un joven con ojos color miel, el cual actualmente tiene 18 años.

Cuando la madre de Amelia, Elena se entera de la infidelidad, le pide el divorcio y la manutención de sus hijos, hasta que tuvieran 18 años, lo cual Alfredo acepta.

Amelia al enterarse del divorcio de sus padres, se puso muy mal, ya que tuvo que ser intervenida de emergencia debido a una sobredosis, cuando Alfredo se entera de lo sucedido va al hospital.

-Hija, tu madre y yo decidimos que lo mejor era divorciarnos- le dijo una vez que vio a Amelia más tranquila.

-Tienes mucha razón papá, solo que me quede en shock cuando supe lo que iba a pasar y no supe como responder a eso y lo último que recuerdo es tener ese bote de pastillas para dormir en mi mano- le dijo con lágrimas en sus ojos.

- Hija no te apura para eso ya pasó, sigues con nosotros que es lo que cuenta, duerme un rato más- le dijo a Amelia a la vez que le limpiaba las lágrimas y le daba un beso, pasó unos minutos cuando Amelia se quedó dormida.

Amelia comprendió lo que su padre le había dicho y pasando su recuperación decido que iba a estudia psicología para ayudar a las personas que pasaban por una situación similar, y así evitar que algunas personas cometieran su mismo error.

Antes de que Amelia saliera de la preparatoria, a su padre le detectaron cáncer en la próstata, y el tratamiento que requería era muy costoso.

Cuando se le aplica el primer tratamiento, Elena y sus hijos deciden ir a visitarlo pero al llegar al cuarto del hospital donde se encontraba, Elena y Bertha tuvieron una muy fuerte pelea, por lo cual Elena y sus hijos tuvieron que irse a la sala de espera.

Al pasar pasar el tiempo Amelia acabo la preparatoria pero no pudo entrar a la facultad ya que el tratamiento de su padre era muy caro y le pagaba la facultad a Alberto, por lo que tuvo que trabajar y empezó a ahorrar el

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