El Árbol del conocimiento

Introducción:

En este trabajo intentaremos entender el conocimiento a través de Humberto Maturana y Francisco Varela, aplicado en situaciones más bien cotidianas. Todo esto para tener una visión panorámica, y diferente, de lo que es un tópico recurrente en nuestra sociedad: el cómo, qué y cuánto podemos conocer.

Esta investigación se basa en dos grandes pensadores, biólogos chilenos, que plantean la teoría de la Autopoiesis. Estos hombres exponen su teoría en el libro “El árbol del conocimiento” que es lo que usaremos para lograr entender su pensamiento.

Desarrollo:

1. Según estos dos grandes biólogos chilenos explican que el conocer es lo que le permite a un ser vivo continuar su existencia.

Para entender el fenómeno del conocimiento se necesita aniquilar o dejarla de lado la tentación de la certidumbre, ya que siempre tendemos a creer lo que vemos y al final nos cegamos nosotros y no vemos lo verdadero. Colocaron unos ejemplos donde explican unas cosas sobre los colores, de cómo los vemos, nos dicen que en verdad esos colores que divisamos y que creemos que son propios de los objetos, no existen. Cuando dicen: “De ahí, por ejemplo que se diga que la sombra de color es una “ilusión óptica” y que “en realidad” no hay color”. Es provocado por la distribución propia de  la luz blanca, nos dicen que es muy fácil engañar a nuestros sentidos. Por eso no es muy fiable guiarse por ellos. Uno tiene que comprender la organización del objeto para saber si en verdad es real y logremos considerarlo como tal.

“Todo conocer trae un mundo nuevo a la mano”.

Para responder en pocas palabras, el conocimiento es nuestra existencia misma, es todo lo que somos y lo que hacemos.

1. El conocimiento está en cada cosa que hacemos, cada actividad por más mínima que sea, se va a tener que incorporar nuestro conocimiento para lograr hacerla, pero ese conocimiento se obtiene a través de experiencias. Como dicen Humberto Maturana y Francisco Varela en su libro en uno de sus aforismos claves; “Todo hacer es conocer y todo conocer es hacer”.

Dicen también; “los procesos involucrados en nuestras actividades, en nuestra constitución, en nuestro actuar como seres vivos, constituyen nuestro conocer nos proponemos investigar como conocemos a través de mirar estos sucesos con estos procesos”  

Todo nuestro conocimiento lo aplicamos con procesos para realizar nuestras actividades. Por ejemplo cuando caminamos, observamos, respiramos, estudiamos, etc. Pasamos por una serie de procesos en el cual ni nos damos cuenta, porque ya es tan común o cotidiano por así decirlo, que ya no lo notamos.

Nuestras experiencias definen nuestro conocimiento.

1. No, porque nuestros sentidos nos engañan constantemente, por lo tanto, uno no puede determinar ¿Cuánto? Y ¿Qué? Se puede conocer. Porque nunca va a vivir en la realidad o la va a conocer si sus sentidos lo engañan y tienen una certidumbre que los va cegar. Porque uno nunca debe estar seguro de que algo es verdadero, eso es lo que los ciega y no los deja pensar o ver bien. Por eso no se puede determinar.

Conclusión:

Para finalizar puedo entender que el conocimiento se logra a través de experiencias las cuales uno las vive en el día a día. Los sentidos son muy fáciles de engañar, ya que uno le puede prestar atención a una cosa a la vez, por eso no hay que confiar mucho en ellos. Además que sin el conocimiento el ser vivo no podría continuar con su existencia.

Los aforismos claves del libro:

- “Todo hacer es conocer y todo conocer es hacer”

- “Todo lo dicho es dicho por alguien”

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