Análisis niño abandonado en la nada

Si en verdad un niño fuera abandonado en medio de la nada —y suponiendo que podría sobrevivir solo—, ¿qué idioma hablaría? ¿O no hablaría?

M. Seeman (1967) señalaba que el hombre al nacer no posee el lenguaje, sino que lo adquiere laboriosamente en la infancia esto explica que los primeros años de la niñez son característicos de aprendizajes ya que en tempranas edades la mente de los niños se asimila a una esponja que absorbe los conocimientos posibles. Esto quiere decir que el niño acoge y trata de imitar lo que se le enseña al igual que lo que escucha.  En este caso si un niño es abandonado a la intemperie trataría de calcar aquello que ha observado durante su crecimiento, en esto se engloba su comportamiento y habla. Para Skinner, el aprendizaje del lenguaje se produciría por simples mecanismos de condicionamiento. En un principio los niños simplemente imitarían, para después asociar determinadas palabras a situaciones, objetos o acciones. Esto hace referencia a lo ya mencionado sobre el aprendizaje de los niños a través de la imitación. Por esa razón el niño al estar en la nada intentaría asemejar lo que ha escuchado, y al no estar en contacto con el ser humano no podría vocalizar ninguna palabra con sentido, simplemente articularía sonidos escuchados en su infancia. Como por ejemplo el caso de los niños salvajes los cuales crecen sin contacto humano y al no tener dicha relación es sumamente difícil su integración a la sociedad puesto que su desarrollo mental es prácticamente similar al de un animal que trata de sobrevivir, como en el caso de Rómulo y Remo que fueron amamantados por una loba o en el caso de John Ssbunya que fue criado por monos.

Los llamados «niños salvajes», crecen sin contacto humano y sin aprender los comportamientos y habilidades sociales propias del ser humano. Sin la correcta estimulación social, su comportamiento es primario y la mayoría de ellos presentan un desarrollo mental similar al de los animales que los adoptaron.

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