Apología de Sócrates

1. Indice:

1. Indice:

página 1.

2. Presentación e introducción a la apología:

página 2.

3. Resumen y extracción de las ideas más importantes:

páginas 3-6

4. Conclusiones a cerca de la obra:

página 7

5. Bibliografía:

página 8

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2. Presentación e introducción

Esta obra, titulada "Apología de Sócrates", se trata de una obra literaria creada por Platón, la cual forma parte de los primeros diálogos que creó este autor y filósofo. Da una versión del discurso argumentado por Sócrates como defensa, ante los tribunales atenienses, en el juicio en el cual se le acusó de corromper a la juventud y de no creer en los dioses de la polis griega que existía en aquellos tiempos.

Aunque su datación exacta es incierta, el texto, por el tema central del cual se trata, pertenece al ciclo platónico de sus primeras obras llamadas "socráticas". Platón las escribió en su juventud, e incluso hay quien piensa que puede tratarse de su primera obra.

En la introducción de esta obra, Platón comienza alegando que existe un hombre sabio que indaga lo que pasa en los cielos y en las entrañas de la tierra, el cual sabe que puede convertir en buena una mala causa. Sin embargo, se han esparcido falsos rumores por parte de peligrosos acusadores. Platón reitera que estos hombres no creen en la existencia de los dioses, y que abundan en gran número. Estos hombres se dividen entre los que citan a Sócrates ante el tribunal y los que le acusan desde hacía ya mucho tiempo.

De este modo, se da paso a la defensa de Sócrates y a la consiguiente condena llevada a cabo por los jueces, continuando con un discurso de Sócrates sobre su opinión acerca del castigo judicial que le ha sido otorgado tras estas injurias.

En otro ámbito, para paginar este texto, debemos referirnos a la Paginación de Stephanus, que es el sistema de referencia y de organización que se emplea en las traducciones y en las ediciones modernas de las obras de Platón, así como las de Plutarco. Esta obra, de acuerdo a esta paginación, debe mencionarse de la manera siguiente: Apología de Sócrates, volumen I (17a-42a).

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3. Resumen y extracción de las ideas más importantes

Durante este juicio realizado ante el tribunal, debido a las acusaciones antes dichas que se han pronunciado en contra de Sócrates, Sócrates comienza argumentando (en su defensa, siguiendo las normas de la ley) las razones por las que ha sido acusado: sus acusadores afirman que Sócrates es un impío, el cual pretende penetrar lo que ocurre tanto en los cielos como en la tierra, lo cual es una grave blasfemia contra las ciencias celestes. Melito fue el hombre que llevó a Sócrates al tribunal, afirmando estos hechos.

En aquellos tiempos, se creían en los dioses de la ciudad, es decir, en los dioses de las polis griegas. Sin embargo, Sócrates tiene otra visión de estos dioses; Sócrates creía principalmente en el Dios de Delfos, el cual, según él, es el único sabio; comparados con él, los demás hombres no podían llegar a conocer la verdad absoluta, puesto que la humanidad se mostraba pequeña ante la fuerza y sabiduría de este Dios. Sócrates creía firmemente, tal como se muestra en la apología, que él mismo era un filósofo encomendado por Dios para librar a los hombres de su ignorancia y que vivieran así con un alma virtuosa. Sócrates, empero, creía que no hay ningún hombre que sea sabio en sí. Sin embargo, los más sabios, son aquellos que saben que no tienen conocimiento de nada, a ciencia cierta. Por ello él consideraba que sabía más que el resto, porque sabía que, aunque no fuera sabio, sí que tenía certeza de esta idea.

Sócrates, pues, para rebatir estos falsos rumores que habían cargado contra su persona, decide desmentir algunos de los mismos; por ejemplo, desmintió el hecho de que él no se dedicaba a la enseñanza. A partir de aquí, explicó la causa del origen de estos rumores ya mencionados: su reputación viene originalmente de una supuesta sabiduría que él poseía. Sin embargo, como ya hemos dicho, él no se consideraba sabio. En este punto, afirmó que Querofonte (amigo de la infancia de Sócrates) había decidido acudir al oráculo de Delfos si había en el mundo un hombre más sabio que nuestro filósofo. La respuesta del oráculo ante esta cuestión fue negativa.

Tras ésto, decidió acudir a diversos ciudadanos, los cuales desempeñaban diversas funciones de la polis, para realizarles unas cuestiones, y comprobar así si ellos poseían verdadera sabiduría. Algunos eran políticos, otros eran poetas, otros eran artistas, otros tenían fama de ser sabios, etc. Sin embargo, tras hacerles estas preguntas, concluía en lo siguiente: estos hombres no eran sabios, puesto que creían saberlo todo.

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Unos resultaban arrogantes cuando no sabían nada, y otros alegaban buenas causas, mas no tenían conocimiento de lo que estaban diciendo, puesto que no lo comprendían. Sócrates, al observar estos acontecimientos, razonaba consigo mismo y concluía que era más sabio que estos hombres. Precisamente, fue esta indagación la que comenzó a crear opiniones en contra de Sócrates.

En este punto, se confirmó otro hecho que también aparece cuando emprendemos el estudio acerca de este filósofo; los de las familias más ricas eran, por norma general, los que disfrutaban de las ideas de Sócrates y los que veían agradable el discurso que él les brindaba. Los más ignorantes, pues, eran los que más resultaban indignados tras haberse encontrado con él y tras haber presenciado su fuerza argumentativa, puesto que les hacía ver que en realidad no eran tan conocedores de las cosas que ocurrían como ellos pensaban.

A continuación, pasa a presentar a los hombres que están ante el tribunal

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