Defensa Del Humanismo Y De Los Derechos Humanos

Defensa del humanismo y de los derechos humanos:

La figura del sujeto y su historia

Se propone analizar el humanismo en el renacimiento en la ilustración, y en el mundo contemporáneo; basándose en ideas de grandes pensadores humanistas.

Se dice que el pensamiento moderno es un lugar común donde se relaciona la manera estrecha del humanismo con la declaración de los derechos humanos.

El concepto de humanismo sirgué en un contexto histórico diferente, en el renacimiento; el humanismo se desarrollo en la academia florentina con Ficino, Pico della Mirandola y otros autores. Se hace referencia al pensamiento humanista en su dimensión cultural como aparece en el renacimiento; así como en su dimensión filosófica.

El concepto de humanismo en el renacimiento no es ajeno al pensamiento actual; lo que más choca al hombre democrático de nuestro tiempo es la estrecha relación que existía en el renacimiento entre el humanismo y los estudios literarios.

El humanismo en la actualidad no está vinculado totalmente con la formación humanística. En el renacimiento, el humanismo estuvo íntimamente asociado con el arte de la retorica y de la elocuencia que se remita a los sofistas griegos.

No es propósito desplazar el humanismo renacentista a favor del humanismo ilustrado, sino analizar ambos con el fin de contribuir a esclarecer nuestro concepto de humanismo en el mundo contemporáneo. El humanismo actual ya poco tiene que ver con el humanismo renacentista o ilustrado.

El humanismo conteporaneo se enfrenta principalmente con la muerte de todos los valores, en el momento en que la historia se convierte en todo real a partir de Hegel, y destruye el ámbito de los valores intemporales y eternos.

Según Strauss sostiene que es posible volver a los antiguos para recuperar y fundamentar el derecho natural que se ha destruido por el concepto de historia de los modernos. Para los antiguos la naturaleza es la fuente de todos los valores, mientras que los modernos instauran un antropocentrismo que según Strauss y Villey, destruye todo fundamento universal y transcendente del derecho natural.

El humanismo constituye la figura inaugural de la modernidad tal y como lo demuestra Alain Renaut: afirma que el individualismo moderno surge del humanismo, este individualismo se define como una de las posibilidades lógicas del humanismo, al final termina destruyendo los fundamentos del humanismo.

Los primeros en combatir directamente las ideas humanistas fueron los conservadores y los reaccionarios del siglos XVII y XIX, que se opusieron a la declaración de los derechos humanos (libertad, igualdad y fraternidad). La libertad de los modernos, que culmina con las grandes revoluciones en el siglo XVII y XIX, desemboca en el individualismo que destruye la unidad de la sociedad.

Alain Finkielkraut, en su obra la derrota del pensamiento define la postura de los conservadores después de la postura de los conservadores después de la destrucción del mundo tradicional basado en el derecho divino.

Los conservadores defienden el sometimiento y la obediencia a un poder superior a las voluntades individuales, pero, a falta del fundamento divino, recurren a otra forma de exterioridad: la sociedad.

Los conservadores se oponen a la libertad de los modernos y por lo tanto, a los valores de la modernidad como la libertad y la igualdad. El humanismo defiende la idea de la libertad contra cualquier poder transcendente que impida al hombre liberarse de las ataduras de la tradición y de la naturaleza.

El humanismo desde el renacimiento ha permitido pensar al hombre como dueño de su propio destino. Esta es la tesis que defiende T. Todovov.

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