Derecho a disentir

Derecho a disentir.

Introducción

El verbo disentir del latín dissentire (ser de opinión diferente, sentir y pensar de un modo alejado de otro) formado por el prefijo dis- (separación por múltiples vías) y el verbo sentiré que significa a la vez sentir y percibir bien por todos los sentidos los matices de la realidad y obtener un pensamiento, reflexión o juicio que constituye una opinión bien fundamentada.

El derecho a disentir, es un derecho que esta casi en el olvido, porque hoy en día en mi entorno, todos siguen un patrón por orden de la sociedad. ¿Por qué estar de acuerdo con lo que me quieren imponer?, ¿Por qué seguir mandatos aún sabiendo que no esta bien?, Por qué el gobierno y la sociedad no permite levantarme y decir: ¡Yo no! Yo seguiré la razón guiada por mi conocimiento.

Bien decía el genial cómico Groucho Marx: “la política es el arte de buscar problema, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados”

Día a día se repite lo común, el fanatismo guiado por el miedo al rechazo social. Estoy casi segura que como yo hay tantas personas en desacuerdo con tantas costumbres que rigen a esta sociedad.

Desafortunadamente esta era de gobierno influida por el clero, tacha de rebelde, opositor y de un peligro a quienes piensan diferente, a quienes van en sentido de la razón y no de las creencias comunes.

“México constitucionalista 1917” donde quedo mi opinión a decir: ¡No estoy de acuerdo!, ¡Yo propongo algo mejor!. ¿Quiénes escuchan las mentes abiertas con grandes ideales, con grandes propuestas, mentes jóvenes, que hoy se encuentran en escuelas; pensamientos que aún no han sido dominados y que quieren un futuro.

¿Quién escucha…?

¿Qué porque callamos? Típica tensión cotidiana: Yo, una simple ciudadana contra mi comunidad ¿Quién ganará? Más que incuestionable la fuerza mayoritaria, aunque siempre esto no sea lo correcto.

Miedo que se vive día a día por no poder disentir con seguridad y protección.

A pesar de las ciencias naturales y sociales, la conducta temerosa continua en el inconsciente colectivo. El miedo paraliza nuestra voluntad y razonamiento.

Mas alla de la discusión sobre lo que mi gente y no quiere, es por lo que estamos aquí, para defender lo que somos … Jóvenes progresistas.

La mayor parte de los opositores son jóvenes alumnos, desesperados por la censura no poder estar en desacuerdo sin que esto les traiga consecuencias.

Este derecho constitucional es bueno para muchos, poco agradable para otros.

Viene a mi mente otra frase que cala hondamente en mi:

“si extendemos la tolerancia ilimitada aún a aquellos

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