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El Hombre Como Sujeto, Objeto Y término De La Cultura


Enviado por   •  27 de Noviembre de 2012  •  1.467 Palabras (6 Páginas)  •  2.458 Visitas

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Vivimos en un mundo de paradojas culturales. La paradoja de un mundo inmensamente desarrollado en orden técnico-científico y paralelamente singularizado por un patente retroceso moral, político y social. La paradoja de un mundo siempre anuente a una más estrecha “alianza de civilizaciones” en favor de la paz e igualdad entre los pueblos pero galvanizado de un creciente imperialismo y latrocinio cultural. La paradoja de un mundo occidental gestado en el seno de una cultura cristiana, aya de sus categorías conceptuales a cuya luz contempla y juzga toda la realidad, y a través de las cuales afirma sin hesitar la imposibilidad teórica y fáctica de la existencia de una cultura cristiana.

Estas paradojas culturales abren una pista importante de reflexión. Las interrogantes que afloran de ellas nos conducen a la consideración filosófica de la cultura en cuanto tal y de su significado.

El Papa Juan Pablo II ha hecho una valiosa contribución en la comprensión de la cultura y los problemas que ella suscita, a lo largo de diversos escritos o discursos. En este breve ensayo únicamente enunciaremos sumariamente cuatro ideas en torno a la dimensión cultural del hombre que el Papa Wojtyla propone tanto en el discurso pronunciado ante la UNESCO el 2 de junio de 1980 en París, como en la Encíclica Apostólica Fides et Ratio, y haremos una consideración un poco más amplia sobre la primera de ellas que creemos la base de las demás.

I. ALGUNAS IDEAS DEL PAPA JUAN PABLO II SOBRE LA DIMENSIÓN CULTURAL DEL HOMBRE CONTENIDAS EN EL DISCURSO A LA UNESCO DEL 2 DE ENERO DE 1980 Y EN LA ENCÍCLICA FIDES ET RATIO

a) La cultura hunde raíces en el hombre. El hombre es el único sujeto óntico de la cultura y también su único objeto y su término.

b) Los valores y la verdad forman parte de la constitución de la cultura. “Las culturas ofrecen modos diversos de acercamiento a la verdad que sugieren valores capaces de hacer más humana la existencia”. En efecto, los valores son un elemento constitutivo de la cultura, ya que son principio de cohesión y caracterización de ella, fuente viva de decisiones y comportamientos humanos. No obstante, la persona no funda los valores sino que los descubre en el ser a través de la cultura y, por tanto, tienen su último fundamente en la verdad del ser. Por ello, el Papa Juan Pablo II en su discurso ante la UNESCO destacará la importancia y el papel que desempañan las instituciones educativas y las que tienen por objeto la búsqueda de la verdad.

c) El diálogo intercultural sólo es posible admitiendo la unidad del espíritu humano y la legítima pluralidad de las culturas. El diálogo presupone siempre una comunión entre individuos diversos. Por tanto, sólo la estima recíproca de la identidad de cada cultura permitirá un diálogo constructivo que no daña ni disuelve la diversidad cultural. Con base en estas consideraciones el Papa Juan Pablo II defiende, en su discurso a la UNESCO, la legítima soberanía de las naciones cuyo puntal último está en la cultura, al mismo tiempo que sostiene en la Encíclica Fides et Ratio que la vitalidad y subsistencia de una cultura procede de su capacidad de permanecer abiertos a la acogida de lo nuevo.

d) La inculturación de la fe cristiana tiene su origen en el hombre. El Evangelio tiene una vinculación fundamental con el hombre en su humanidad misma. Las culturas cuando están profundamente engastadas en lo humano llevan el distintivo de la apertura del hombre a la universalidad y a la trascendencia. Así, la cultura tiene en sí misma la posibilidad de acoger la revelación divina. El cristianismo no priva a las culturas de cuanto bueno tienen, sino que las eleva a la plenitud de la verdad evangélica e incentiva el más auténtico desarrollo y progreso humano.

II. EL HOMBRE ES EL SUJETO ÓNTICO DE LA CULTURA, ASÍ COMO SU OBJETO Y SU TÉRMINO

El Papa Juan Pablo II estima que el problema cultural es ante todo un problema antropológico. Parte de su reflexión gira en torno a un pasaje de Santo Tomás de Aquino que a su vez es una traducción de un fragmento de la Metafísica de Aristóteles: «Genus humanum arte et ratione vivit». El significado primero y esencial del fenómeno cultural, según las palabras citadas del Doctor Angélico, está en el

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