En la época contemporánea existe un conflicto altamente reconocido socialmente por unos y completamente ignorado por otros, la sociedad se ha dividido radicalmente.

El conflicto con la fe.

En la época contemporánea existe un conflicto altamente reconocido socialmente por unos y completamente ignorado por otros, la sociedad se ha dividido radicalmente. Y distinguir los bandos no es nada complicado, por en una esquina están aquella persona a fines con algún credo, que en contexto mexicano nos damos cuenta que prácticamente este bando está representado por cristianos y católicos, mientras que por el otro lado se encuentran quienes no profesan el credo de sus contrapartes, a decir verdad, no sólo no lo profesan, pareciera que lo repudiaran, pero eso es juicio personal, poco ad hoc a esta ocasión.

Como iba diciendo, es palpable la tensión que se genera cuando se habla de religión, se ve incluso en la cultura con frases como “nunca hables de religión o política”. Es así como este breve ensayo pretende, por medio de los temas vistos en clase, un análisis que pueda dar un punto de vista crítico a los conflictos entre ambos “bandos” de este conflicto.

Hoy en día mucho se critica a las personas católicas y cristianas tanto por su religión como por creer en Dios, y es que muchos conciben a la religión como placebo social o paliativo comunitario, y otros como medio de control, concibiendo la religión como herramienta social creada para manejar masas. Hago una pausa en este punto para realizar una aclaración, y es que las ideas aquí expuestas sobre las “personas no creyentes” han sido vividas por mí y me han llamado tanta la atención que he decidido escribir al respecto. Es así como estas personas no creyentes, hacen criticas exhaustivas a los cristianos y católicos, y la respuesta a esto no resulta ser la indicada, es así como quedamos encerrados en un círculo vicioso de críticas y respuestas inadecuadas, cayendo, como se decía en clase en un fundamentalismo, ya clásico del posmodernismo.

¿Pero cómo vivir en una sociedad así?, bueno, hay que esclarecer primero varias verdades, ¿el hombre cree por naturaleza? O ¿fue el mismo hombre que se hace creer en algo? Curiosamente las preguntas son la respuesta, el hombre es naturalmente “preguntón”, estas preguntas han llevado a al desarrollo social, tecnológico y científico, es decir, nos han llevado a trascender, y que el hombre se pregunte por la existencia de un ser superior no es mera curiosidad, esta pregunta y otras muchas, ¿Quién soy?, ¿A dónde voy?, ¿Qué es la verdad?, etc., exigen imperativamente su respuesta correspondiente, y la búsqueda de estas respuestas es lo que se conoce como sentido religioso, así que podemos observar que ser religioso no es necesariamente estar adepto a una religión, sino más bien el buscar el sentido de trascendencia, de la respuesta a estas preguntas, es así como por medio de la razón podemos concebir una realidad no física.

Pero ¿qué hay de lo físico?, esto también es importante y a su vez puede ser una catapulta para el sentido religioso, y esto por las experiencias de trascendencia, no me detendré a explicar el significado y lo que pretende los 4 tipos de experiencia, sino más bien quiero aprovechar para resaltar su relevancia en este ensayo.

Las experiencias de trascendencia han estado más cerca de lo que podríamos creer, quien no ha visto videos en Facebook o YouTube donde se muestran la gran capacidad y majestuosidad de la naturaleza, o el lado más bondadoso y humano de las personas, quien no ha leído alguna explicación sensata y científica sobre un tema específico, o quien no ha tenido una amistad tan especial que se hayan sentido el alma mutuamente. Antes esas experiencias quien no ha tenido sentimientos de serenidad, sorpresa, admiración, quien no ha experimentado la electricidad en el cuerpo, el levantamiento de los bellos del brazo o la dilatación de las pupilas, quien no se ha sentido a sí mismo. no hay persona que no haya experimentado eso, o por lo menos es lo que

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