Estoicos Y Epicureos

LA BÚSQUEDA DE LA FELICIDAD BAJO LA INSPIRACIÓN EN LOS ESTOICOS Y EPICÚREOS

“Si yo pudiera subir hasta lo más alto del firmamento y desde allí contemplar las maravillas del universo, no sentiría ningún gozo ni alegría si no tuviera alguien a mi lado con quien compartirlo”

(Cicerón)

En torno a la felicidad se plantean varias preguntas:

¿En qué consiste la felicidad?, ¿La felicidad se alcanza en esta vida o una vida ulterior?, ¿La felicidad se consigue a solas o en comunidad?, ¿El bien supremo radica en la felicidad?, etc.

OBJETIVO.-Presentar a la comunidad educativa del Colegio Indoamericano el pensamiento ético de los estoicos y epicúreos como una alternativa de reflexión para normar nuestro criterio de moralidad, en este momento histórico de nuestra vida, circundado y plagado de confusiones y adversidades que nos impiden vivir tranquilos y felices.

JUSTIFICACIÓN.- Una de las grandes preocupaciones del hombre en todos los tiempos, es saber en qué estriba el sentido de la vida. Es decir; cuál es el fin propio de nuestra existencia y como consecuencia, qué debo hacer para conseguir ese fin. Este es un problema filosófico de carácter eminentemente ético, psicológico y social. Hoy preocupados, sinceramente, por encontrar pautas que nos orienten en este océano de tendencias, sistemas, ideologías y posturas tan variadas y tan diversas de vida, que nos atrapan en un mar de confusiones. Y en esta vorágine de la vida donde imperan las presiones, el estrés, la delincuencia y corrupción, síntoma de una profunda crisis de valores, que puede conducirnos a dos situaciones muy marcadas: bien sea, en un sinsentido, carente de toda preocupación y de responsabilidad, viviendo a la deriva, sin ninguna proyección individual ni social; o bien, en una desesperación total por no saber cuál es el criterio moral adecuado por el cual debemos conducirnos. Ambas situaciones están propensas a un resultado fatal, enfermizo y nefasto.

Hoy quiero invitarlos a reflexionar en torno a las propuestas éticas de dos escuelas helenísticas, cuyas características de vida se sitúan en tiempos muy diversos a los nuestros; asimismo, sus condiciones de vida también distintas, pero en el fondo con muchas coincidencias en cuanto a sus crisis y preocupaciones: LOS ESTOICOS Y EPICUREOS, que en apariencia son totalmente opuestas entre sí, pero que en esencia coinciden en un mismo objetivo: LA BÚSQUEDA DE LA FELICIDAD. Como una alternativa que nos de luces; sirva como terapia y solución a nuestros problemas existenciales.

CONTEXTO FILOSÓFICO.- El periodo helenístico está ubicado entre los siglos IV a.C al siglo III de nuestra era, está precedido por dos grandes escuelas helénicas: La Academia de Platón caracterizada por una tendencia idealista y ascética en el campo moral, y la escuela peripatética (Liceo) fundada por Aristóteles impregnada de una fuerte dosis de realismo y eudemonismo ético. Ambas, también aparentemente opuestas y con grandes cantidades de seguidores: la primera busca la felicidad en un mundo ulterior por medio de una vida virtuosa y contemplativa; la segunda busca la felicidad en esta vida por medio del equilibrio (justo medio) en el actuar, guiados por la razón y practicando la virtud. Estas dos corrientes filosóficas estarán presentes y ejercerán una fuerte influencia en todas las escuelas helenísticas: estoicos, epicúreos, escépticos, eclécticos, neoplatónicos, etc., e inclusive, en la Edad Media, Época Moderna y sus enseñanzas han trascendido hasta nuestros días; exhortándonos a reflexionar e inspirándonos a revivir algunas de sus propuestas, claro con sus pertinentes adaptaciones a nuestra situación concreta.

De esta manera el periodo helenístico se caracteriza por la búsqueda de un criterio de moralidad para vivir mejor. La filosofía se convierte en una actividad esencialmente encaminada a fundamentar el sentido de la vida y realización humana “la filosofía es maestra de la vida”. Pues, si bien, Sócrates como padre de la ética se había preguntado, tiempo atrás ¿Cómo ha de vivir el hombre?; haciendo consistir el bien en la sabiduría y el mal en la ignorancia; superando o pretendiendo superar el relativismo moral. En el periodo helenístico se intensifica esta preocupación, convirtiéndose la ética en la rama filosófica rectora de todas las demás ramas que conformaban en su tiempo el sistema filosófico (lógica, física y ética). Centraremos la atención en las propuestas morales de los estoicos y epicúreos, que en lo personal yo considero, son los que han dejado mayor huella hasta nuestros días y son dignos de ser tomados en cuenta para iluminar nuestro camino en esta difícil tarea de encontrar criterios certeros y eficaces de moralidad. La pregunta ¿Cómo ha de vivir el hombre? sigue vigente con sus respectivas redacciones ya sea de tipo personal o comunitaria: ¿qué debo hacer? , ¿Cómo debo comportarme? ¿Cuál es la mejor manera de interactuar con mis semejantes para alcanzar mi realización personal propiciando que los demás también la alcancen?.etc.

“BUSCA EL PLACER Y EVITA EL DOLOR”

EL EPICUREISMO.- Es la doctrina fundada por Epicuro de Samos (341-270 a. C), con una fuerte influencia del atomismo de Leucipo y Demócrito, para moverse bajo tendencias realistas y materialistas; cuyo criterio de moralidad es el PLACER, “viviendo y disfrutando esta vida al máximo, pues no sabemos si existe otra vida ulterior”. Epicuro fundó una escuela “el Jardín”, en Atenas, (307 / 306 a. C), que era una especie de casa de retiro, donde todos los jóvenes y adultos maltratados por la vida, desilusionados y con tendencias suicidas, acudían con el maestro Epicuro, quien con ese “don de gente” que poseía, ese carisma de convencimiento, lograba retribuirles sus ganas de vivir (puede considerársele a Epicuro uno de los más antiguos terapeutas)

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