Existencialismos

El existencialismo

2.- Karl Jaspers

a) el mundo

El mundo es la totalidad de las cosas, y las ciencias hacen de ellas su objeto. Así pues el saber científico progresa continuamente, superando sus límites provisionales de su conocimiento del mundo, es un proceso que se revela infinito, es inabarcable, ya que el todo no es una cosa, sino una idea.

Toda tentativa científica que intenta una imagen unitaria del mundo acaba en un reduccionismo de tipo positivista que no hace justicia a la riqueza de la experiencia humana. La ciencia es incapaz de demostrar científicamente la legitimidad de sus aspiraciones y tampoco puede dar un sentido autónomo de su quehacer.

La filosofía tiene como tarea la consideración del ser en cuanto ser, que se encuentra más allá del horizonte de la ciencia.

b) la existencia

El hombre se da cuenta también de que su ser no es un abstracto que pueda ser objetivado. Tampoco se puede identificar con el yo abstracto del intelecto o ser entendido como mera vitalidad. Su existencia se explica más bien como situación, punto de partida que le hace posible llegar a ser a sí mismo.

Jasper dice que el hombre no se da cuenta de esta verdad que lo distingue de los demás hasta como dice el , las situaciones límite: sufrimiento, culpa, lucha, muerte. Experimentar situaciones límites y existir para Jasper es lo mismo, se sabe a sí mismo como “existencia”.

Las situaciones límite no es conocimiento objetivo, no es independiente de la situación concreta de cada individuo, sino de la propia existencia: una experiencia personal e intransferible. El camino que lleva a la clarificación existencial sería unilateral, y por lo tanto incompleto, sin el concurso de la comunicación existencial, que es un recíproco reconocer el propio yo en el otro, que se da en el trato entre los individuos. La existencia sólo se realiza en la comunicación.

c) la trascendencia

Las cosas que componen el mundo y los existentes concretos son las “cifras” de la trascendencia, pues en ellas la trascendencia se entrevé, aunque no se le conoce en modo objetivo.

La trascendencia es lo que todo abarca, y por lo tanto es lo inabarcable por excelencia. El ser al que apuntan las cifras es la unidad absoluta, en donde han desaparecido las contraposiciones clásicas entre pensamiento y ser sujeto y objeto, ser y deber ser.

Este absolutamente trascendente puede ser identificado con Dios, al que sólo se puede llegar por la vía negativa, ya que la radical trascendencia nos imposibilita conocerlo.

3.- Jean-Paul Sartre

a) Sartre y la fenomenología

Los instrumentos que la Fenomenología le proporcionó , le permitieron realizar agudos análisis del yo, de la conciencia, de la imaginación y de las pasiones, y de la relación del individuo con el mundo y la sociedad que le rodea.

En La trascendencia del

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