Garantias Constitucionales

Nos referiremos a las garantías constitucionales o jurisdiccionales, por lo cual, es sumamente importante nombrar la constitución política de la república de Chile. Entiéndase esta como una norma suprema, fundante, vinculante, obligatoria tanto para gobernantes como para gobernados, que se propone a si misma como un sistema normativo. La constitución se presenta como algo de vital importancia, y debido a lo que en ella se establece es sumamente necesario su resguardo en todo sentido, de este modo nos encontramos con la existencia de ciertas garantías, responsables de proteger y resguardar los derechos y deberes constitucionales. El tribunal constitucional es el encargado de velar por el cumplimiento de estas garantías. A partir de esto, podemos afirmar que existe justificación respecto a la necesidad de la existencia del tribunal constitucional y por ende de las garantías constitucionales.

El tribunal constitucional es un organismo autónomo e independiente. Según la Constitución política de la República de Chile, podemos evidenciar las atribuciones del Tribunal Constitucional, en el artículo 93, inciso 1 y siguientes.

Ahora bien, ¿En qué justificamos la necesidad de un Tribunal Constitucional, y por ende de las garantías jurisdiccionales? Desde mi punto de vista, y tras las varias exposiciones de derecho constitucional , se ha gestado en mí, una serie de pareceres respecto a este tema, los que a

continuación procederé a presentar y desarrollar respectivamente.

La vida en sociedad es regulada por un sistema normativo, dicho sistema es la base de toda organización y estructura presentes en ella. En este caso, aquel sistema normativo vendría siendo la Constitución Política de la Republica de Chile, en ella se establecen los derechos y los deberes constitucionales. Los derechos y los deberes constitucionales se encargan de regular la vida en sociedad, estos se validan a si mismos en cuanto se condicen con los derechos fundamentales de las personas. Por lo tanto, las garantías constitucionales se encargan de proteger y resguardar la integridad de este principio en la Constitución, o sea de que esos principios que de una u otra forma respaldan el bienestar de las personas, no sean vulnerados. Una de las garantías más importantes que podemos ver en nuestra carta magna puede ser presenciada en el artículo 19 inciso 1° el cual se refiere al derecho a la vida y a la integridad física y psíquica de las personas. A partir de este ejemplo me remito a la idea de la necesidad de las garantías jurisdiccionales, ya que en este caso el tema en tratamiento sería la vida humana misma, a lo que me pregunto ¿es necesario que derechos tan fundamentales como el resguardo a la vida sean garantizados? Por supuesto, ya que es la forma en la que el presente y el devenir de lo establecido se establece y modifica, validándose en virtud de lo

constitucionalmente establecido. En este tema podemos referirnos a la regularidad que Hans Kelsen nos presenta, este nos plantea que una norma es valida siempre que su creación se lleve a cabo bajo los principios legales que la constitución anterior a esta en su normativa establezca, o sea, una constitución es validada por la anterior y esta por su antecesora y así sucesivamente hasta llegar a la norma fundante, que vendría siendo el origen de toda normativa. A partir de esta idea, es deber del tribunal constitucional, verificar que cada norma vigente se constituya constitucionalmente de manera similar a la propuesta por Kelsen. La norma válidamente producida debe cumplir con la garantía que la constitución le otorga a su contenido.

En conclusión, es sumamente importante la existencia del tribunal constitucional y de las garantías constitucionales, ya que gracias al primero, el proceso por el cual las garantías constitucionales se hacen valer, se lleva a cabo de manera concreta según lo establecido por la ley. Por otro

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