Hermenéutica Scheleirmarcher

El proyecto hermenéutico de Schleiermacher es de carácter universal y psicológico, además aplica el escepticismo a la labor de comprender. Para Schleiermacher todo intento de compresión de un discurso parte de la incomprensión, así pues, cuando nos embarcamos en un proceso de interpretación, la compresión no nos acompaña; partimos del puerto de la incomprensión en busca de la compresión.

Sin embargo, cabe aclarar, que cuando tocamos tierra firme y nos encontramos en un estado de compresión, no podemos pensar que estamos ante una compresión definitiva y total, más bien, se debe hacer uso de un agudo escepticismo, que evalúe lo comprendido en busca de las incomprensiones inherentes a todos los procesos de interpretación, que nos permita formularnos preguntas para ensanchar el terreno entendido; en este sentido podemos deducir dos grandes motores de la hermenéutica de Schleiermacher; La duda y la incomprensión.

Habiendo evaluado los conceptos anteriores, es necesario preguntarnos por la forma en como partiendo de la incomprensión primigenia llegamos a una primera instancia de compresión; en cuanto al método para comprender Schleiermacher nos dice, que al ser la hermenéutica el proceso inverso de la retórica, es necesario reconstruir el discurso, en busca del sentido interno que le da vida y a partir de este, remontarse hasta la génesis del discurso donde se encuentra la esencia primigenia que nos permite la compresión.

En la búsqueda de la huella espiritual en el discurso que nos plantea Scheleiermarcher, podemos deducir el carácter psicológico de su propuesta hermenéutica, al comprender el discurso como expresión del alma. Entonces al tomar este giro psicológico convierte su hermenéutica en una disciplina universal al postularla como el medio para comprender cualquier mensaje.

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