LA ÉTICA COMO VALOR EN EL EJERCICIO PERIODÍSTICO CONTEMPORÁNEO

FUNDAMENTOS DEL PERIODISMO

Prof. Pepe Alexander Hidalgo

Piero Navarro Cardoza

LA ÉTICA COMO VALOR EN EL EJERCICIO PERIODÍSTICO CONTEMPORÁNEO

En la actualidad, el periodismo al igual que otros campos de estudio ha evolucionado de forma progresiva y continua, dejando atrás los medios convencionales como la imprenta, la radio y la televisión para dar paso a nuevos medios digitalizados que están al alcance de todos los usuarios. Sin embargo, pese a la gran facilidad que nos brindan estas redes de información, existe una disyuntiva clara en el mundo periodístico. ¿Hasta que punto estos medios representan una amenaza para la cerrera del periodista?, ¿pueden considerarse medios confiables donde tratar la información?, ¿cómo el usuario se ha convertido en un pseudoperiodista, dándose el atrevimiento de emitir información de dudosa procedencia y de publicarla libremente?

Es de suma importancia recalcar tres cosas puntuales. Primero: la carrera de periodismo muy por encima de cumplir una labor social, se rige bajo parámetros éticos inquebrantables que se sustentan en una base histórica.

Para Maidana (2005), la ética no debe ser un instrumento de control, censuras, prohibiciones o sanciones, sino que pertenece al reino de la libertad de la autonomía, y de la autenticidad. Es un acto libre porque compromete las elecciones y decisiones. (pag.59). Por lo tanto, el periodismo cumple de manera objetiva su función como cuarto poder en la sociedad, respetando la integridad individual y colectiva, y ejerciendo su labor bajo normas estipuladas por un código ético y moral.

Segundo: el periodismo es un campo de estudio amplio que necesita ser estudiado minuciosamente, es decir, una cámara, una grabadora o una publicación en redes no te convierte en periodista. Es necesario mencionar que el profesional de periodismo cultiva conocimientos y valores a lo largo de cinco años universitarios, durante ese tiempo, el aspirante atraviesa por numerosos pasajes que le permiten construir una visión real de la sociedad, así como también entender las necesidades y las problemáticas que aquejan a la ciudadanía. Pese a ello, existen usuarios informáticos o pseudoperiodistas que

dejan de lado la gran responsabilidad que lleva en sus hombros el verdadero profesional, y emiten información, muchas de estas falsas, de manera masiva y desmesurada, alimentando la incertidumbre y el descontento social. El periodista debe propiciar una adecuada libertad responsable, es decir la libertad debe ir acompañada de responsabilidad, del mismo modo el respeto a la verdad, que se considera como principio ético; y para alcanzar la verdad, todo profesional tiene el deber de contrastar las fuentes, corregir públicamente los errores en la información, y a su vez, facilitar la oportunidad de réplica de los implicados o lectores. Por lo tanto, “el primer compromiso ético del periodista es el respeto a la verdad" (Blázquez, 2000, pág. 151).

Y tercero: los medios digitales no representan un peligro para el periodista, los usuarios en cambio sí. La era de la tecnología le ha brindado al profesional de periodismo herramientas importantes y canales de mayor difusión. Gracias a estas redes, los usuarios pueden informarse de cualquier acontecimiento de manera inmediata, permitiendo al periodista desempeñar su labor de manera eficiente y teniendo un alcance mayor entre los ciudadanos. Pero, ¿qué sucede cuando estos medios son usados de manera incorrecta? Sencillo, pueden ser los causantes de muchas dudas, confrontamientos y caos social. Un claro ejemplo de ello son las famosas fake news, que son contenidos pseudoperiodísticos difundidos a través de diversos medios informativos, y cuyo objetivo es la desinformación. Para frenar este círculo vicioso es importante que tanto periodistas como ciudadanos puedan tomar conciencia de que es una cuestión que tiene incidencia en la sociedad en su conjunto, que afecta la integridad democrática y que debe ser abordada en sus dimensiones política, social y cultural.

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