LOS BENEFICIOS DE DAR CARIÑO

LOS BENEFICIOS DE DAR CARIÑO

La ternura es, para algunos psicólogos, una de las seis emociones básicas del ser humano.

Las otras cinco emociones son el miedo, la rabia, la alegría, el erotismo y la tristeza.

Sin embargo, para muchas personas es difícil expresar ese sentimiento -considerado el pariente más cercano del amor- a quienes quieren.

Dice el psicólogo clínico José Elías, que “la ternura es una expresión con la que se halaga a los demás y se recibe cariño de forma altruista, sin esperar nada a cambio”.

Puede ser mediante palabras, gestos, caricias, amabilidad, sonrisas o abrazos. En fin, son muchas formas de expresar cariño, con o sin contacto físico. Elija la que más le guste y empiece a aplicarla. Pronto verá los beneficios.

Ser afectuosos nos reconcilia con el mundo y con los demás. Lejos de hacernos más vulnerables, como se cree, nos hace fuertes y seguros.

No hay que temerle a dar cariño, sino buscar el mejor modo y espacio para ofrecerlo.

Si nos preguntamos cuales pueden ser las necesidades primarias de los seres humanos, enseguida pensaremos en las que compartimos con todos los demás seres vivos: el oxigeno, el calor, el alimento y el agua. Efectivamente, sin alguno de estos cuatro elementos no podemos sobrevivir. Pero ¿no existe ninguna otra necesidad primaria más?

Para comprobarlo (hipotéticamente) podríamos abandonar a un ser humano recién nacido en una isla tropical solitaria, dejándole suficiente agua y alimento para sobrevivir. Imaginemos, incluso, que un adulto se queda con él para ofrecerle sólo el agua y el alimento que necesita durante los primeros años, pero no le proporciona nada más. Es decir, nos aseguramos que el recién nacido se alimenta correctamente. La cuestión es ¿será capaz de sobrevivir?

Evidentemente, este hipotético experimento nos parece terrorífico y no necesitamos realizarlo para saber lo que ocurrirá. Por ejemplo, si pensamos en los depredadores, el niño no podrá ni sabrá defenderse. Puede enfermar por el ataque de cualquiera de los virus y bacterias que pugnan por sobrevivir a nuestra costa. También puede sufrir un accidente, caerse y romperse una pierna o una costilla. No sabrá curarse y sus heridas probablemente se infectarán produciéndole la muerte. Tampoco sabrá distinguir si un alimento es venenoso o no, etc. En definitiva, sabemos perfectamente que no sobrevivirá.

Por lo tanto, tiene que existir alguna necesidad primaria además del calor, el oxigeno, y el alimento para que un ser humano pueda sobrevivir. ¿Cuál puede ser? Lo más probable es que el lector haya pensado que el niño necesita una familia para sobrevivir. En principio es cierto, pero necesitamos aclarar qué es lo que aporta una familia a la supervivencia del niño, ya que existen casos en los que la familia maltrata a sus hijos y les causa la muerte.

¿Qué necesita el niño de una familia? Por ejemplo, podríamos pensar que la mera presencia de otros seres humanos es suficiente para el niño. Pero todos sabemos que no serviría de nada si el niño no puede interaccionar con ellos. ¿Qué clase de interacción necesita? ¿Cualquier tipo de interacción es positiva para el niño? Ya hemos dicho que los malos tratos, por ejemplo, no benefician la supervivencia de los niños.

En este momento, a más de uno se le ocurrirá decir que el niño necesita afecto (cariño, amor, etc.) de su familia. Cierto, pero ¿por qué necesita afecto? ¿por qué sin afecto un niño tiene que morir?

Ahora es cuando tenemos el peligro de entrar en un callejón sin salida, porque existe el prejuicio de que el afecto, el amor, el cariño, son fenómenos espirituales, es decir, no materiales, y, por tanto, inexplicables en último término. Este ha sido el error en el que ha caído la psicología tradicional hasta la fecha y que nos ha mantenido en la más completa oscuridad con respecto al fenómeno afectivo y a muchos otros más.

8 beneficios del amor para la salud

1: Felicidad inminente

Amar y ser amado enriquece nuestras vidas. Cuando la gente se siente emocionalmente cerca de otra persona está más contenta e incluso más sana. El amor nos ayuda a sentirnos importantes, entendidos y seguros. Informó el Instituto Nacional de Salud.

2: Amor = Salud

La psicóloga Anna Gil del Hospital USP-San Jaime de Torrevieja, aseguró que “sentir mariposas en el estómago” de vez en cuando es muy bueno para el organismo: “Tanto en la primera fase del enamoramiento como en las parejas estables de larga duración, “el amor tiene notables efectos para la salud”.

3: Cada día más bello

La psicóloga Anna Gil comenta que existen grandes y notorios cambios físicos que puede experimentar una persona durante la etapa del enamoramiento, como pueden ser “el embellecimiento de la piel, el cabello y las uñas, esto gracias al aumento de estrógenos”.

4: ¡Te ves más joven!

Otro de los beneficios de estar enamorado es que previene el envejecimiento prematuro y aumenta la sensación de vitalidad, ya que se libera la hormona de la melatonina. “Por eso, cuando estamos enamorados no sólo nos vemos mejor, sino que nos ven mejor, nuestra autoestima crece”, aseguró Gil.

5: Te estresas menos

Según Gil, el amor hace que aumente la norepirefrina, mejor conocida como ‘hormona del estrés’, que afecta a la atención y el estado de ánimo, provocando que estemos sensibles hacia la persona que amamos. Además nos lleva a “darnos por completo”, mimar y cuidar al otro.

6: Ayuda a tener un corazón sano

La psicóloga explica que mientras las personas se encuentran enamoradas, se sienten más felices, eufóricas y con mucha energía, por lo que al reducirse los niveles de estrés, mejora nuestro ritmo cardiaco y nos mantiene con buena salud.

7: Aumenta tu autoestima

Una relación amorosa te puede dar la seguridad debido a que sientes el apoyo y tienes la confianza de expresar detalles personales, como preferencias, sueños, preocupaciones, momentos de orgullo, decepciones, miedos y puntos débiles. Esto aumenta tu estado de ánimo y te hace sentir bien emocionalmente.

8: Ya no te enfermas tanto

Otro importante beneficio que produce el enamoramiento a la salud es que fortalece el sistema inmunológico, lo que

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