La etica del marketing

Angela Maria Murillo Bernal-0000177383

Ética Filosófica

Ensayo final (28-05-2019)

La Ética del Marketing

     El marketing es una actividad que parece no requerir de ningún principio ético, ya que pertenece al ámbito organizacional. A través del tiempo muchas organizaciones han demostrado que lo que en realidad importa es buscar ganancias y esto puede llevar a que se violen principios éticos. ¿Cómo puede la ética influir en las decisiones que son tomadas por los gerentes y personal de mercadeo en las organizaciones, si para aumentar las ganancias no es un requerimiento cuestionarse éticamente? En el siguiente ensayo, se realiza un breve análisis para demostrar que la ética sí es necesaria para tomar las mejores decisiones en el ámbito del Marketing. Me apoyo en autores como Alan Sschwerther, Philip Kotler, Dan Shewan y María Raffino, quienes son expertos en Marketing

     En primer lugar, explico que es el Marketing y cuál es su función en las organizaciones; posteriormente analizo la ética aplicada al Marketing y cierro con la conclusión establecida en el párrafo anterior.

¿Qué es el Marketing?

       El Marketing es un término antiguo. A pesar de no haber sido una profesión consolidada en las universidades hasta hace algunas décadas, se resaltaba la presencia de personas con habilidades de comerico y asuntos comercianles en las empresas, los cuales eran escuchados y tomados en cuenta a la hora de tratar de vender algún producto y/o servicio^[1]. Los empresarios al caer en cuenta de que esta actividad ayudaba a incrementar las ganancias, apoyaron la creación del área de Marketing dentro de las compañías. en esta nueva área se destinaba el personal necesario para la planeación y la dirección del Marketing, concluyendo en que todas las decisiones tomadas y todas las acciones realizadas en esta área debían estar enfocadas hacia el consumidor.

“Gracias a los teóricos y estudios de universidades, fue que se tomó como fundamental el proceso de comercialización en sí, dando paso al Marketing en 1950. Hoy en día, lo que predomina es el sistema uno a uno, donde lo importante es vender a cada persona en particular a partir de la información.” (Raffino, M. 2019)

     Según Alan Sschwerther (2015), el Marketing es un conjunto de estrategias y herramientas que se utilizan para mejorar las ganancias de una compañía, siempre teniendo como fin satisfacer las necesidades de los clientes. El Marketing no es solo publicidad, puesto que la publicidad es una parte del Marketing. Es decir, la publicidad está presente en todo momento desde que se le pretende ofrecer un producto y/o servicio al consumidor, hasta después de que es vendido. De esta manera, el Marketing puede ser visto  como una filosofía, dado que se debe poseer una postura mental, una forma de concebir la relación del intercambio entre la organización y el consumidor, siempre teniendo presente que el fin del Marketing es el consumidor^[2] final.

     En el marketing se utilizan diferentes estrategias para llegar al consumidor, una de esas como se menciona en párrafos anteriores es la publicidad. Las estrategias de mercadeo son conocidas como las 4P: (i) El producto, el cual hace referencia a lo que se le va a ofrecer al cliente, (ii) El precio, el cual es cuanto el consumidor está dispuesto a pagar por el producto, en donde se debe realizar un proceso de investigación para poder establecer el precio mas justo respecto al sector objetivo; (iii) la plaza es donde se va a vender el producto y por último (iv) las promoción es utilizada para aumentar las ventas del producto, para influenciar al consumidor a que compre el producto de cierta compañía y no el de la competencia (La publicidad hace parte de esta estrategia).

     Conforme a lo anterior, el Marketig necesita de ciertos parámetros organizacionales sobre los cuales trabajar: (i) el posicionamiento hace referencia a lo que los que la organización quiere que él consumidor tenga en su mente respecto a sus productos; (ii) la diferenciación se encarga de como el producto se diferencia de los demás productos que son competencia y (iii) la segmentación se enfoca en el segmento de la población a la cual el producto va a ser ofrecido.

     El marketing tiene diferentes ramas, y una de ellas es el Marketing social, el cual busca generar responsabilidad social. Por eso, este tipo de Marketing va más allá de las ventas netas de los productos. Al no tener en cuenta solamente retribuciones económicas, el marketing social busca generar una ética implícita en la marca.^[3] Según Alan Andersen, el fin de este tipo de marketing es el de “Ayudar a mejorar el bienestar del individuo y el de la sociedad” (Andersen, A. s.f). En el Marketing social, hay una importancia implícita en la sociedad y su bienestar cuando un consumidor opta por comprar el producto de la compañía.

La ética en la mercadotecnia

     La ética aplicada es la rama de la ética la cual se encarga de aplicar las teorías éticas a cuestiones morales concretas y así orientar la conducta humana en la vida cotidiana. Una de las ramas de la ética aplicada es la ética organizacional. Según Manuel Guillén (Ética en las Organizaciones. Pg. 8), “La ética organizacional investiga el impacto que los individuos, grupos y estructuras tienen en la conducta dentro de las organizaciones.”. Pretendiendo mejorar la eficiencia de las organizaciones, reflexionando sobre los fundamentos de las normas que guían los códigos de conducta dentro de las empresas.

     En la última década, los consumidores no solo le han exigido a las organizaciones productos de calidad, sino también diferentes aspectos relacionados con el producto y la forma en la cual dicho producto es vendido. Con la aparición de las redes sociales, los consumidores han comenzado a tomar posturas críticas respecto a los productos y/o servicios que les son ofrecidos, y así, las demás personas empiezan a conocer la calidad del producto y/o del servicio, situación que no se presentaba en el siglo pasado. Ahora, las organizaciones al estar en el ojo público buscan que los encargados del departamento de Marketing tomen decisiones moralmente correctas. Es decir, que no solo se tenga en cuenta el beneficio económico, sino que también se tenga en cuenta si las decisiones son tomadas de manera correcta o incorrecta.

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