Las Reglas Del método, Las Meditaciones Metafísicas

a) La regla del método se dividen en cuatro reglas fundamentales, hechas por Descartes en su “Discurso del método”.

La primera de ellas es la evidencia, consistía en no admitir jamás como verdadero cosa alguna sin conocer con evidencia que lo era, es decir, evitar cuidadosamente la precipitación y la prevención y no comprender.

La segunda, en dividir cada de las dificultades que se examinan en tantas partes como fuese posible y en cuantas requiere su mejor solución, el análisis del problema.

La tercera regla, trata en conducir ordenadamente los pensamientos, comenzando por los objetos más simples y más fáciles de conocer, para ir ascendiendo poco a poco, como por grado, hasta el conocimiento de los más compuestos, y suponiendo un orden aun entre aquellos que no se preceden naturalmente unos a otros.

La ultima regla, en realizar en todos unos recuerdos tan completos y unas revisiones tan generales que pudiese estar seguro de no omitir nada.

b) Las mediciones de la metafísica las dividió en 6:

La primera medición trata de creer si realmente, este Dios que el tanto quiere demostrar, quiere que vivamos en un mundo de engaño y mentira. Pero esto no es posible, puesto que Dios es bondad suprema y no sería coherente que quisiera que fuéramos engañados. Así pues, llega a la conclusión de la posibilidad de la existencia de un genio maligno, que mediante trampas nos lleva al error.

La segunda medición, Descartes busca entre las funciones del alma, pues las tareas que necesitan del cuerpo no pueden afirmarse puesto que no podemos demostrar la existencia de tal cuerpo. Descartes llega a la conclusión de que si piensa existe. Con esto ya ha encontrado la verdad absoluta y ya ha demostrado la existencia del espíritu.

La tercera medición, Descartes demuestra la existencia de Dios. El cuerpo evidentemente nace de un parto y lo explica la biología, lo que nos falta es quién crea el alma. Evidentemente debe venir de un ser superior, Dios, solo él es capaz de unir al cuerpo una alma. Y así queda resuelto el segundo argumento de la existencia de Dios.

La cuarta meditación, Descartes menciona que para no caer en el error debemos usar la razón antes que la voluntad. Dios nos proporciona la voluntad y nosotros le hemos dado un mal uso. Para realizar buenos juicios debemos ver si la idea viene de Dios y es clara y distinta, pues será verdadera, y debemos evitar ideas confusas probablemente creadas por un genio maligno.

La quinta meditación, en esta meditación Descartes vuelve a demostrar la existencia de Dios a base de razonamiento matemáticos e incluso vuelve a demostrar la esencia de las cosas materiales.

La ultima meditación, en esta última meditación

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