Libertad Jhon Locke

En su libro “segundo tratado de gobierno civil” Jhon Locke expresa su pensamiento sobre la libertad individual, la cual está basada principalmente en que el hombre tiene absoluto derecho sobre su vida. Lo cual estoy bastante de acuerdo con él en su análisis, a continuación mencionaré a modo global muchos de sus argumentos y la opinión que tendría Karl Marx de esta forma de entender la libertad.

Si bien es cierto el hombre como ser libre, es un ser vivo con derechos de elección sobre sí mismo y a la vida. Este tiene derecho de alimentarse y beber de las propiedades que Dios creó en nuestro planeta ya que la razón principal es que le sirva a la gente de la manera más ventajosa posible. Todo tiene su respectivo orden y congruencia, ya que la Tierra es de todos, pero cada uno le aplica su esfuerzo y sudor en diversos aspectos (arar, vivir, comer, beber, cazar, etc.) lo que hace que existan “dueños” de algunos bienes, mientras todo sea bien utilizado y no solo por el básico deseo de apropiarse de todo lo que se encuentre al paso. El mundo es muy grande, nadie puede controlarlo solo, ni mucho menos apropiarse de él. El autor del “Segundo tratado sobre gobierno civil” hace referencia a la libertad natural del hombre, la que consiste en no verse sometido a ningún otro poder superior sobre la tierra, solo a la ley natural. Lo recién dicho complementa la realidad del hombre en sociedad (cuando abandona su libertad natural y entra en una comunidad/estado/sociedad/civilización), aquí tiene que estar sometido solo a las leyes legislativas que le establece su estado (el legislador). Estas leyes son comunes para todos los pertenecientes a la sociedad y tienen como finalidad sacar lo mejor de cada persona y llevar una vida dirigida, normada, pero más estructurada, aquí es cuando uno pertenece a la ley positiva.

Como se mencionó anteriormente, el hombre es dueño de su propia vida, es un derecho y no se le puede otorgar a otra persona una mayor cantidad de poder de la que uno mismo y más aun quien no dispone del suficiente poder para acabar con su propia vida no puede dar a otra persona el poder para hacerlo. Tal como Locke da un ejemplo sobre los israelitas “Reconozco que entre los israelitas, lo mismo que en otras naciones habían hombres que se vendían a sí mismos; pero es evidente que no se vendían como esclavos sino para ejercer trabajos penosos; porque es evidente que la persona vendida no queda bajo un poder absoluto”.

Ahora para hablar sobre lo que podría opinar Karl Marx, voy analizar la concepción que tiene el sobre la libertad del hombre. Marx dice que el hombre no está en libertad individual ya que tiene distintos estratos sociales en los que conviven (proletariado o burgués). Muchos movimientos del hombre son guiados por los diferentes grados de ambiciones que pueda tener cada uno. Por lo anterior mencionado, mi pensamiento es que Marx no estaría de acuerdo con lo que piensa Locke. El alemán no ve al hombre individualmente, sino más bien lo lleva a un ser genérico, se puede apreciar mucho eso en la forma de ver al hombre y su propiedad. Marx dice que no es solamente el que suda por algo el dueño de tal cosa, sino que hay muchos más trabajos por detrás (de otras personas), lo que finalmente lleva a que una sociedad sea el propietario y no solo el individuo.

Para concluir este ensayo, me gustaría terminar diciendo que ambos puntos de vista, tanto de Jhon Locke y Karl Marx son totalmente opuestos entre ellos, ya que tienen una forma distinta de ver la vida, al hombre y el mundo en general. A mi punto de vista, Locke tiene una visión mucho más acertada, en el ámbito del hombre como ser vivo integral.

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