Trascendencia De Un Ser.

Introducción

Toda una vida de creencias, de sacrificios, de penitencias, de arrepentimientos para poder trascender a un mejor lugar, aun paraíso eterno, donde el ser humano a soñado (a mi parecer, creado en un mundo de fantasía) con descansar eternamente entre nubes, entre seres celestiales y mas importante, entre los seres queridos que han partido anteriormente, todo esto es una esperanza creada por la fe, donde nada esta comprobado y todo puede ser efímero e irreal.

Trascendencia de un ser, trascendencia de un todo.

La palabra “trascender” de trans: mas allá y scando: escalar, donde todo ser humano de cualquier creencia que arraigue como propia, se haya preguntado que hay después de la muerte, preguntándose si todo lo que alguna vez le dijeron era cierto, si ese cielo prometido llegaría algún día a él, si esa paz eterna sería otorgada, si esa reunión tan esperada sería concedida, todo aquello que con solo obedecer las leyes de un Dios, a veces incongruente, otras absurdo pero siempre con la verdad absoluta.

Escalar con buenas acciones, día con día al cielo prometido creyendo fielmente en lo ya prometido, donde llegas a perder oportunidades de disfrutar tu existencia física, por arriesgar la trascendencia, donde los placeres naturales, donde solo los animales tienen ese derecho natural a disfrutar, donde un placer es castigado por ser “impuro” “no digno de su creador” donde es necesario para la existencia pero castigado por el mismo que lo otorgo, donde muchas veces esa trascendencia después de la muerte llega a los vivos, donde un legado del “saber”, de “amor” lecciones de vida dadas por alguien que jamás conocimos, por alguien que tenia concordancias con tu manera de pensar, muchas veces idénticas donde expresaba lo que tu nunca podrías decir, lo que canto, lo que escribió, lo que dijo o hizo alguna vez que trascendió a un plano físico, y quedará en la memoria de generaciones, donde no fue necesario haberle prometido que sería recordado, que sería ejemplo para infinidad de personas, donde su forma expresión fuera la que fuera quedaría marcada en la historia, marcaría un rumbo en la existencia física, donde disfrutar al máximo la vida sin esperar nada a cambio, ni un infierno ni un cielo, donde respetar al prójimo no por ganar un cielo, si no por simples valores morales, donde respetas solo para ser respetado, donde quieres a otro sin esperar nada a cambio, donde ayudas por el simple hecho de ver al otro bien, solo obtener la satisfacción de haber ayudado, sin esperar la gratificación de un Dios que todo juzga, o temer a ser castigado por tus acciones, esperar una trascendencia mas allá

...