Los antiguos aztecas

Los antiguos aztecas a pecar que tuvieran sus propios dioses o deidades de la guerra o de la prosperidad, la lluvia, entre otras cosas, también contaban con sus  dioses que estaban dedicados a la medicina, no están sencillo conocer el verdadero origen de la medicina americana y las diferentes tribus que la crearon.

Tal vez la medicina americana pudo venir de diferentes migraciones con el paso del tiempo, pero lo más probable es que en alguna de estas migraciones haya pasado a través del famoso Estrecho de Bering. Es muy poco factible sostener que una rama errante que se separó de ella y que vino a fundar la ciudad de Tollan, fue la portadora de sus conocimientos médicos, aunque se sepa que la cultura tolteca fue una de las más avanzadas del continente en esta rama, pero debido a la colonización y otros factores que influyeron en la extinción de esta cultura, y por lo consiguiente a estos vastos conocimientos.

Cuando llego la tribu Mexica o Azteca, fue la que por fin impuso la hegemonía en la República Mexicana, el nacimiento de su medicina tuvo una semana como  la que se practicaba en el Viejo Continente. En México, al principio de la medicina fue empírica y “mágica”, y que con sus antiguas creencias tomaban en cuenta a sus  deidades; rogativas y prácticas seudoreligiosas.

Es indudable que la patología mexicana nació simplemente de la observación, y la terapéutica, del estudio y la experimentación casual o planteada. A través de la historia presentaron la medicina un tanto rudimentaria, también era llamada medicina mágica, ya que trataban de remediar las enfermedades que estaban envueltas en los mitos y en la práctica de hechicería, y trataban de encontrar explicación con sus deidades a las que adoraban.

La diosa Tzapotla, nativa de Tzapotlán (Diosa Mexica), presidía la medicina en general, y se le tenía considerada  como de descubridora de la resina sagrada y curativa (“Oxitl” o “uxitl”).

En los mayas, ese papel lo compartía una trinidad formada por Ix-chel, Citboltun y Zamná.

En los aztecas, el dios Xipe, era la deidad titular de la medicina, su carácter dominante fue el de la venganza, ya que mandaba a los hombres enfermedades como el “mal del ojo”, la sarna y la “postema”.

A Quetzalcoatl, en su advocación de Dios del Aire, se encomendaban los enfermos de catarro y reumatismo, así como las mujeres infecundas que ansiaban tener hijos.

Otro dios principal de la medicina es Tlaltecuin, el dios negro, a quién los padres encomendaban a sus hijos enfermos: para pedirles favores, acudían al templo y ahí entonaban cantos que iban al ritmo de las danzas sagradas.  

A lo que se podía llamar instrucción general, era impartida por los aztecas en ligares como el “Calmecac” y esta las hacían los sacerdotes y recibían a los iniciados. La medicina o “ticiotl” no se aprendía, entraba en la categoría de artesanía u oficio en la que el padre se la enseñaba a su hijo, los padres desempeñaban el oficio de un Maestro.

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