Modelo educativo prehispanico

La educación entre los Tupí

• La sociedad tupí se trata de, según Fernández, una sociedad tradicionalista, sagrada y cerrada que asegura la continuidad de la herencia social a través de la estabilización del esquema de equilibrio dinámico del sistema societario. Los tupí cultivaban maíz, porotos, maní, tabaco, etc. Permanecían dependientes de la naturaleza para la obtención de productos de caza y pesca.  

• Durante el siglo XVI y XVII ocupaban casi toda la extensión de la costa oriental del continente americano, desde la desembocadura del Amazonas hasta el Río de La Plata. Estamos frente a una sociedad homogénea, escasamente segmentada y poco articulada.  

• La educación entre el tupinambá estaba vertebrada sobre tres puntos capitales:

1. El valor de la tradición: Resguarda una conducta adecuada de proteger un comportamiento de eficacia comprobada.  
2. El valor de la acción: Hay que ‘aprender haciendo’. La educación del niño y del adolescente quedaba ligado a las obligaciones y deberes que desempeñaban los adultos.  
3. El sentido del legado de los antepasados y el contenido práctico de las tradiciones.  

• El proceso educativo varía en función del sexo y de las edades: la educación era por imitación. Era crucial entender la ‘dimensión humana’ de la técnica.  No hay educación institucionalizada:  los conocimientos se transmiten de forma informal y asistemática, pero satisfacían funciones básicas: transmitir conocimientos, formación de la personalidad, ajuste a la comunidad, selección y promoción de dirigentes.  Indudablemente los medios empleados eran funcionales a su objetivo, puesto que aseguraban su supervivencia y su cohesión interna.  

La educación entre los Aztecas

• Los mexicas eran un pueblo originario del norte del actual México. No trataron de aplicar su poder directamente sobre los grupos sometidos a su autoridad, sino que los fueron convirtiendo en tributarios. Las nuevas formas de dominio mexicas exigieron una profunda reelaboración de todos los supuestos ideológicos y que se siguiese una política cultural bien determinada.  

• La educación mexica se puede resumir en varios puntos:

1. El niño, desde su más tierna infancia, comenzaba el proceso que distinguía las actividades y funciones de ambos sexos.  
2. La educación hogareña era muy severa, con el objetivo de formar el carácter. Los progenitores podían vender a sus hijos desobedientes e incorregibles.  
3. Había educación “escolar”, la que refleja según el autor la estratificación de la sociedad y sus valores. Estaban los calmécacs [para los hijos de los dirigentes; se hacía hincapié en la sabiduría y formaban a los depositarios de la tradición] y los telpochcalli [para los macehualtin; se hacía hincapié en los aspectos prácticos y quehaceres del campesino]. Ambos, del Estado.  

• Este “modelo” educativo implicaba ciertos riesgos.  La extrema estratificación social llevó a serios resentimientos con Tenochtitlán que acabaron por aliar a ciertas tribus con Cortés, posibilitando la conquista del valle central de México y el acceso a su inconmensurable riqueza. En las ruinas de la sede del imperio mexica se erigiría la ciudad de México, hoy distrito federal.

La educación entre los Incas

• Esta educación debe ser referida al modelo de la sociedad andina de los Incas.  Sus principales características son:

1. El carácter minoritario y selectivo de la enseñanza institucionalizada, cuyos propósitos exceden la socialización para apuntar objetivos políticos específicos.  
2. El empleo de la lengua quechua como instrumento imperial de penetración y consolidación de sus instituciones.  
3. La sociedad estaba asentada sobre una economía agrícola de carácter intensivo, organizada en torno a una unidad religiosa y productiva llamada ayllu.  
4. Fue un imperio altamente centralizado de carácter colectivista. Imponía su autoridad en cada rincón gracias a una organizada administración.  
5. En cuanto a enseñanza, poseían un sistema rígidamente organizado y estratificado.  Los sabios enseñaban a las futuras elites gobernantes en el yachayhuasi. Imperaba una rígida disciplina con castigos corporales.  También había establecimientos para mujeres, acllahuasi, donde se formaban para ser sacerdotisas [en Cuzco estaba la sede principal]. El resto de la población recibía una enseñanza práctica y básica a través de sus padres.  
6. El trabajo era un valor fundamental. El ocio era severamente castigado. Cuando llegó el conquistador, el trabajo perdió su sentido religioso. Había un “saludo” entre los incas: amallulla amaquella – ‘no seas mentiroso ni ocioso’. Era la forma de encomendarse a Dios.  

• La derrota producida por la conquista produce un hundimiento del universo tradicional. Posee un alcance religioso y cósmico para los vencidos: significa que los dioses antiguos perdieron su potencia sobrenatural

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