Comentario Formula De Abjuración De Galileo

Siglo XVI, Copérnico, ya había formulado la teoría del heliocentrismo, la cual situaba al sol como el centro del Sistema Solar. Sus libros habían sido censurados (1616) por la Iglesia Católica. En éste mismo siglo, nacería Galileo Galilei (1564- 1642), quien defendería la teoría de Copérnico y debatiría las ideas aristotélicas; además, se convertiría en el Padre de la Ciencia por el establecimiento del método científico.

Galileo, fue educado por su padre, Vicenzo Galilei, hasta los 10 años. Posteriormente, recibiría formación religiosa en el convento de Santa María de Vallombrosa. A los 20 años, sería estudiante de medicina de la Universidad de Pisa, carrera que eligió no por su voluntad sino por consejo de su padre. Por su propia cuenta empezaría a estudiar matemáticas, sintiendo especial admiración por Pitágoras, Platón y Arquímides. Se declara opuesto a Aristóteles, lo cual lo lleva a mostrarse en contra de varios profesores de la época. Esto, le impediría obtener un título universitario, no obstante, gana durante su estadía en la universidad mucho conocimiento y afán científico.

Desde 1585, Galileo, empieza a formular, inventar e investigar. Pero no sería sino hasta 1632, cuando publica “Diálogo sobre los sistemas máximos”, donde se desarrolla un diálogo entre Simplicio y Salviati, quienes defienden los sistemas aristotélicos y copernicanos, Sagredo, el tercer personaje tiene el rol de moderador. El personaje que llevaría a Galileo a estar en la mira de los Inquisidores de la época, sería Simplicio, al cual atribuyó palabras del papa Urbano VIII. Roma llama a Galileo e inicia su proceso.

Los Inquisidores, eran sacerdotes de la Iglesia Católica que estudiaban las denuncias sobre herejías, luego, de encontrar culpable al denunciado, lo entregaban al gobierno secular, quienes lo castigaban con sentencias propias de la época. Los procesos de los tribunales inquisidores podían durar varios años, en muchos casos, los demandados morían durante el desarrollo del proceso.

El tribunal inquisidor, califica a las proposiciones de Galileo así:

1. La proposición de ser el Sol el centro del mundo e inmóvil en su sitio es absurda, filosóficamente falsa y formalmente herética, porque es precisamente contraria a las Sagradas Escrituras.

2. La proposición de no ser la Tierra el centro del mundo, ni inmóvil, sino que se mueve, y también con un movimiento diurno, es también absurda, filosóficamente falsa y, teológicamente considerada, por lo menos, errónea en la fe. (Sentencia de Galileo, 1633)

En consecuencia, Galileo tuvo que pronunciar la forma de abjuración, en ésta, Galileo se compromete a:

(…) en el futuro nunca más diré o afirmaré, verbalmente o por escrito, nada que pudiera dar ocasión a una sospecha similar con respecto a mí.

Pero, si llegara a conocer a cualquier hereje o persona sospechosa de herejía, lo denunciaré ante este Santo Oficio o ante el Inquisidor y Ordinario del lugar donde yo pudiera estar. Más aún, juro y prometo cumplir

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