El Capitalismo

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Abril Páez Rosano 22

Ma. Andrea Sánchez Botello 24

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Capitalismo

Los seres humanos siempre tuvieron la tendencia de realizar intercambios, es decir, a tener un impulso natural hacia el comercio. Dicho intercambio fue acentuado y fomentado por las Cruzadas que se organizaron en Europa occidental en el siglo XI hasta el siglo XIII y por las grandes travesías y expediciones de los siglos XV y XVI realizadas al descubrir el Nuevo Mundo. De estos acontecimientos se derivó una economía comercial o mercantil, es decir, cuyo objetivo principal consistía en intercambiar bienes y no en producirlos. La importancia de la producción no tuvo relevancia hasta la Revolución Industrial en el siglo XIX.

El capitalismo es un sistema social en el que la estructura económica se caracteriza por la propiedad privada de los medios de producción.

El término capitalista es inspirado por la obra de Carl Marx El Capital. “En él, Marx se propone utilizar el materialismo dialéctico y el materialismo histórico para analizar y criticar profundamente lo que él denominó modo de producción capitalista” .

Este sistema económico surgió históricamente como un movimiento revolucionario conocido como “individualismo racionalista”. Este movimiento comenzó en las ciudades de Italia en el siglo XIII, sustituyendo al feudalismo y de ahí se propagó al resto de Europa, influenciando en el Renacimiento y la Reforma. Dicha influencia se puede notar en el desarrollo de ciencias de tipo económico. Esto tuvo como consecuencia la expansión de la empresa privada.

El capitalismo pasó por dos etapas. En la primera etapa el capitalismo fue principalmente comercial y bancario, pero a mediados del siglo XVIII surge la Revolución Industrial en Inglaterra, la cual da inicio a su segunda etapa y a partir de la cual se le denomina a este sistema económico como capitalismo. Durante la Revolución Industrial los inventos y nuevas técnicas hicieron posible una producción incrementada, provocando un crecimiento en los negocios y en la organización de éstos.

Debido a este cambio, surgen las sociedades mercantiles, mismas que son consideradas unas de las aportaciones más importaciones del capitalismo.

El primer hombre en describir los principios económicos del capitalismo fue el filósofo escocés Adam Smith. Él consideraba que la división del trabajo y la ampliación de los mercados abrían posibilidades ilimitadas para que la sociedad aumentara su riqueza y su bienestar mediante producción especializada y el comercio entre países. Smith también impulsó el camino de la industrialización y por lo tanto, el capitalismo en el siglo XX. Sin embargo, sus escritos resultan tan condensados y complejos que muchos lectores encuentran mejor expuestas sus ideas en los trabajos de Jean-Baptiste Say, Thomas Malthus y John Ramsay McCulloch.

A diferencia de Adam Smith, en cuyos trabajos se apoyó, David Ricardo, economista y filósofo escocés reconocido por ser uno de los mayores exponentes de la economía clásica, se preocupó sólo en segunda instancia en averiguar las causas del crecimiento. Publicó “La riqueza de las naciones” en la que sostiene que la riqueza procede del trabajo. Por este trabajo lo llaman el fundador de la economía porque fue el primero que hizo un estudio completo del tema. Esta obra representa el intento de diferenciar la economía política de la ciencia política, la ética y la jurisprudencia.

El capitalismo es un sistema de organización económico que se caracteriza por la propiedad privada de los medios de producción, donde las soluciones a los problemas económicos básicos se logran a través del libre juego de la oferta y la demanda del mercado. Por ello también es conocido como Sistema Económica de Mercado.

Las principales características del Sistema Capitalista son las siguientes:

1. Propiedad privada de recursos o factores productivos.

2. Libertad empresarial, lo que significa que las personas son libres de dedicarse a cualquier actividad dentro del sistema.

3. Mercados libres.

4. El juego de oferta y demanda determina los precios de bienes y servicios.

5. Libertad de elección de los individuos de la sociedad para adquirir bienes y servicios.

6. Acumulación de grandes capitales para su inversión en grandes empresas industriales y mercantiles.

7. Al tener gran estímulo las empresas, se perfeccionan tecnologías y se universaliza el comercio.

8. Existencia de grandes organizaciones colectivas que originarán instituciones donde negociar valores.

9. Valorización del rango y éxito en término de acumulación de bienes.

Sobre la propiedad privada, el capitalismo establece que los recursos deben estar en manos de las empresas y personas particulares. De esta forma, a los particulares se les facilita el uso, empleo y control de los recursos que utilicen en sus labores productivas. Como consecuencia de lo anterior, los particulares podrán utilizar los recursos como mejor les parezca.

La libertad de empresa propone que las empresas sean libres de conseguir recursos económicos y transformarlos en una nueva mercancía o servicio que será ofrecido en el mercado que éstas dispongan. Son libres de escoger el negocio que deseen desarrollar y el momento para entrar o salir de éste.

La libertad de elección se aplica a las empresas, los trabajadores y los consumidores, pues la empresa puede manejar sus recursos como crea conveniente, los trabajadores pueden realizar un trabajo cualquiera que esté dentro de sus capacidades y los consumidores son libres de escoger lo que desean consumir, buscando que el producto escogido cumpla con sus necesidades y se encuentre dentro de los límites de su ingreso.

Competencia se refiere a la existencia de un gran número de empresas o personas que ofrecen y venden un producto en un mercado determinado. En dicho mercado también existe un gran número de personas o empresas, denominadas

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