El General En Su Laberinto

El General en su laberinto

Autor: Gabriel Garcia Marquez

Arraigado en la memoria de muchos pueblos americanos por su espíritu de lucha y un incansable esfuerzo por tratar de conseguir el triunfo de la libertad para los reprimidos, Simón Bolívar es el héroe de la cual trata esta obra literaria. Relata toda una cadena de hechos reales, situaciones que marcaron el día a día de un idealista aclamado como el Libertador; ése que soñó con la unidad de los pueblos de América, tras la independencia del dominio español. Se narra el último viaje de Bolívar, la separación de la Gran Colombia, su carácter, y el estado de salud que este tenía.

Está aún en la inhóspita e ingrata Santafé: la gloria le ha dado la espalda y la opción ha sido su renuncia del gobierno. Debe emprender entonces un penoso viaje hacia Venezuela para “empezar otra vez desde el principio”.

Bolívar deja Bogotá en medio de la sordina de las manifestaciones; los robos, incendios e insultos provocados por los seguidores de Santander, a quien el libertador apodaba “Cajandro”; parte de Bogotá, desde el rio magdalena donde pasa por lugares como Mompox, Turbaco, Cartagena, Villa de Soledad y Santa Marta. En algunos lugares por los que pasaba el Bolívar era muy aclamado y en otro simplemente olvidado. El General realiza este viaje recortado de dinero, por lo que tuvo que cobrar sueldos pendientes, favores.

Desde el comienzo de esta novela se habla de cómo Bolívar no le gustaba recurrir a los doctores, ya que según él estaría antes de tiempo en la tumba, siempre llevaba consigo un libro de Recetas francesas para curar males de forma natural; pero a medida que fue avanzando en su viaje este acepto hablar con un doctor “Solo para conversar” sobre su estado de salud. Así fue como conoció a doctor Hércules Gastelbondo, quien utilizaba métodos extraños con sus pacientes. También se narra los amoríos de Bolívar, y como Manuela Sáenz siempre fue su fiel compañera.

En medio de alucinaciones y víctima de su mal estado de salud, ignora lo que sucede a su alrededor. Nadie, ni aún los oficiales Venezolanos de su confianza, saben que piensa hacer. Durante el viaje duerme pocas horas recostado en su hamaca.

Su sueño es intranquilo y salpicado de fiebre; extrema cada día los cuidados de su aseo personal “con una sevicia más frenética que la habitual, tratando de purificar el cuerpo y el ánima de veinte años de guerra inútiles y desengaños del poder”.

Cuando Bolívar llega a Villa de Soledad y posteriormente a Santa Marta su salud está muy deteriorada y sus piernas están muy debilitadas incluso en días cercanos a su muerte, Bolívar cae de las escaleras sufriendo lesiones que por fortuna no le causaron la muerte. Pierde peso en forma acelerada hasta llegar a

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