El Origen Del NSDAP

Sin duda alguna no hay un momento tan icónico en la historia mundial como lo fue la Segunda Guerra Mundial para el siglo XX. Y ello no se debe solamente a la cantidad de muertos o a los profundos cambios ideológicos/sociales en los que derivó, sino también, en que su origen nunca quedó completamente esclarecido.

Los orígenes del NSDAP (Partido Obrero Nacionalsocialista Alemán), pueden remontarse, de manera profunda, a los primeros meses después de la firma de la Paz de Versalles (donde Alemania, como única potencia responsable de la guerra, aceptaba la imposición de los "catorce puntos" de Woodrow Wilson), cuando el gran almirante Von Tirpitz formó, como una manera de controlar a los obreros de la Alemania Imperial derrotada, el Partido Patrio ( o Vaterlandspartei), del cual, tras fuertes movimientos sociales, sobrevivieron dos alas radicalizadas: el DAP (Partido Obrero Alemán) con 25 niembros, y el NAP (Partido Nacionalsocialista Alemán) de 77 niembros (ambos números según fuentes históricas) residentes en Munich, capital de la región de Baviera (perteneciente a la recién formada República de Weimar, heredera jurídica del II Reich).

Ambos partidos, sobrevivieron como "juntas de taberna" durante los primeros meses de 1919, cuando, se les presentó ante ellos un joven apátrida de nombre Adolf Hitler, bohemio, que adoctrinaba en diversas cervecerias de Munich a los proletariados y diversos ex militantes de la Primera Guerra Mundial, con una teoría denominada por los periodistas de Baviera como "Socialismo de Trincheras" (consistente en la negacion de la derrota militar como causa de la desgracia alemana, sino en la aceptación de que la guerra fue perdida a causa de la traición en el hogar por parte de extranjeros judíos de diversa índole, que desterraron del poder al Káiser Guillermo II), a posteriori conocida como <teoría de la puñalada por la espalda>. En un par de meses, este joven, de origen austriaco, conmovió y juntó a grandes numeros de masas en las cercanías de la cervecería Eberlbraukeller. Dicha situación llevo a los militantes del DAP a ofrecerle al recién llegado Hitler la oportunidad de unirse a sus filas partidistas, siendo elegido como el asesor propagandístico del partido.

Como jefe de propaganda, Hitler comenzó a volverse cada vez más agresivo con sus discursos, ya no solo culpando a la extranjería judía de la derrota alemana en la Gran Guerra, sino también, pidiendo una limpieza racial profunda de la sociedad alemana (al bocetear, lo que posteriormente seria la Anhenpass -o "Carta de pureza racial"-). Es en estas circunstancias (donde su misma efervescencia oral atrae cada vez mas masas al DAP -de unos cuántos cientos a varios miles, según el tipo de fuente histórica consultada-), que Hitler comienza una serie de viajes a lo largo de Baviera, donde se relacionaría con dos grupos que bifurcarían para siempre el destino del partido: La Liga Pangermanica (un grupo de industriales racistas, seguidores de la "Gran Alemania" -un Reich Alemán conformado no solo por la República de Weimar sino también por las antiguas raíces históricas alemanas: el corredor polaco (arrebatado por la Paz de Versalles), la Austria y la región de los Sudestes alemanes (en posesión de Checoslovaquia)-), que sería de enorme utilidad al financiar las futuras operaciones de Hitler, y la Orden del Thule (seguidores de las ideas de Ostara -un folleto proselitista creado por Adolf Joseph Lanz, del cual Hitler extrajo el antisemitismo y la <puñalada por la espalda>- y de las doctrinas racistas expansionistas del Klu Klux Khan americano), de donde Hitler obtuvo no solo la idea del "espacio vital" aleman, sino también la forma en la cual de manera posterior, para mediados de 1921, realizó la militarización del DAP (ya poderoso en Munich) al crear lo que posteriormente sería uno de los sostenes paramilitares del Hitler omnioso: Las SA ó Sturmabteilungen (Secciones de asalto). Además, gracias a la Orden del Thule, Hitler conoce a Alfred Rosenberg, antisemita que induce a Hitler a creer en las doctrinas de los "Protocolos de los Sabios de Sión", en las cuales, los judíos poseeían la democracia y los gobiernos democraticos como forma del control del mundo para el exterminio lento y pragmático de todas las razas arias.

Para mediados de 1919, cuando el número de seguidores del DAP ya ascendía a varios millares de personas, Hitler entabla relación tanto con Hermann Goring (militante fiel del DAP hasta su final) y con el general Ludendorff (uno de los estrategas más importantes, junto con Von Hindenburg, de la Gran Guerra),a quien en sus inicios Hitler concebía como el futuro Fuhrer (Guia) del III Reich. Es en estos entonces, cuando al cauce popular del DAP se desvía fortuitamente: más que dedicarse a recolectar proletariado en sus filas (como el enemigo DVFP -Partido de la Alemania Libre- formado en Berlín) se dedican a engrosar su militancia con antiguos regimientos de voluntarios y militares retirados del servicio por los Tratados de Versalles.

En 1920, Hitler, aún perteneciente a la milicia alemana (como nimebro del Reichswehr, o Ejercito Imperial), promulga en el seno del DAP lo que en el futuro serían sus estatutos base, los 25 puntos del nacionalsocialismo (como denomino Hitler a su doctrina). Entre estos cabe destacar: la formación de una Gran Alemania, anulación del Tratado de Versalles, recuperación del Imperio colonial alemán, la necesidad de la Anhenpass para la ciudadanía, inexistencia de los derechos civiles a la extranjería (judíos, franceses, ingleses, socialistas, etc), supresión de las rentas no ligadas al trabajo, confiscacion de los beneficios de guerra, nacionalización de los trust -nunca puesta en practica-, repartición de utilidades estatales entre los obreros, incautación de los grandes almacenes y otras propiedades pertenecientes a judíos, la parcelación de los latifundios, la educación militarista en Alemania, y sobre todo, la que sería la más revolucionaria de sus ideas, la número veinticinco que reza:

“Frente a la sociedad moderna, un coloso con pies de barro, estableceremos un sistema centralizado sin precedentes, en el que todos los poderes quedarán en manos del Estado. Redactaremos una constitución jerárquica, que regirá de forma mecánica todos los movimientos de los individuos”.

Con este doctrinario, Hitler inicia una nueva era de giras de propaganda a lo largo de toda Alemania, donde topa de manera directa con las ideas de los tres principales partidos politicos de Weimar: el Zertrumspartei (que preside el gobierno del doctor Von Kahr, conservador reformista, que buscaba una monarquía constitucional a manos del heredero al trono S.M. Ruperto de Baviera) el Partido Comunista Alemán (con la ideología

...