Guerra Del Pacifico

LA GUERRA CON CHILE: ANTECEDENTES

Concepto

La Guerra con Chile fue el conflicto armado que enfrentó a Perú, Bolivia y Chile durante los años 1879 y 1883. También se le conoce como la 'Guerra del Pacifico' porque tuvo como escenario la cuenca este del Pacífico Sur; e igualmente como la 'Guerra del Guano y el Salitre', porque fue el afán de estas riquezas una de las motivaciones principales.

Esta guerra fue desastrosa para el Perú, pues ocasionó la destrucción de la pu¬jante agricultura costeña, la pérdida del departamento de Tarapacá (rico en sali¬tre), y la paralización del proyecto de desarrollo iniciado a mediados del siglo, sobre todo con Castilla.

Además, el conflicto terminó por romper los lazos comer¬ciales, sociales y culturales que unían al Perú con Chile; vínculos que se habían desarrollado en la colonia y las tempranas décadas de la republicana, a pesar de que entonces no compartíamos ninguna frontera geográfica con el país sureño.

Parte de la explicación del conflicto se encuentra en la necesidad chilena de controlar los territorios salitreros del Perú y Bolivia (Tarapacá y Antofagasta, res¬pectivamente), en un contexto de intervencionismo inglés.

Sucedía que el capita¬lismo británico, representado por empresas salitreras, estaba especialmente interesado en que Chile tuviera el control directo del salitre, pues le aseguraba un manejo económico más completo y beneficioso (Inglaterra era, entonces, la pri¬mera potencia mundial).

Así, el apoyo británico a Chile, que no fue oficial, es decir, sin declaración diplomática de por medio, resultó decisivo en la guerra.

Situación Política.

La cierta estabilidad política que disfrutó el Perú desde la época de Castilla fue trun¬cada por la Guerra con España (1863-66), a partir de la cual la alternancia del poder y la convivencia entre los grupos políticos, civiles y militares fue crítica, sino convulsiva.

La década de 1870 estuvo llena de alzamien¬tos, intentonas revolucionarias y violencia política.

El gobierno de Mariano Ignacio Prado (1876-79), con el que comenzó la guerra, enfrentó una intransigente oposición en el Congreso y el alzamiento de políticos que intentaron derrocarlo.

Esta realidad le daría una conformación débil e inestable, que le restó eficacia a la hora de tomar las medi¬das necesarias, en la coyuntura previa a la guerra.

Situación del Perú en 1879

Hasta la década de 1870 no habíamos cuajado un proyecto nacional que se aplique de manera constan¬te y metódica a lo largo de los gobiernos.

Después del gran intento organizador de Castilla, persistían las costumbres políticas de rasgos anárquicos y de tipo caudillista.

No habíamos logrado una plena organiza¬ción como país, ni forjado algo parecido a un 'acuerdo nacional', que sustente y afirme un desarrollo continua¬do, en base al entendimiento de las clases sociales.

Mientras que en Chile ocurría todo lo contrario: existía una creciente estabilidad política y una clase dirigente más compacta, con un claro horizonte de futuro.

Es un hecho innegable que Chile estaba mucho mejor organizado y que el Perú atravesaba por el peor momen¬to para embarcarse en una guerra.

LA GUERRA MIRADA DESDE EL PRESENTE.

Pocos temas pueden competir con la merecida relevancia que éste tiene en los libros de historia.

Como se ve fácilmente, las heridas de este conflicto aún se encuentran sin cerrar y rápidamente ocasionan recelos y suspicacias, al menor roce.

Tal vez uno de los peores legados que dejó la guerra sea el ambiente tenso y poco amigable que, de tiempo en tiempo, surge entre el Perú y Chile.

Más que para incentivar odios o estar atados inútilmente a un pasado que no podemos cambiar, la Guerra del 79 es una experiencia de donde los peruanos debemos extraer muchas lecciones, pero para bien.

La dolorosa e injusta pérdida de territorio peruano y la in¬molación heroica de muchos compatriotas, no fueron las únicas expresiones de este conflicto.

Debajo de esta reali¬dad estaban otras, no menos importantes; por ejemplo, la cantidad de familias y amigos que vieron rotos sus contactos en las zonas de guerra (des¬de Tacna hasta Tarapacá); fa¬miliares en los bandos con¬tendientes, que tenían víncu¬los con ambos países y que se vieran obligados a optar por uno de ellos.

El CIVILISMO

El partido Civil fue conformado por ex-consignatarios y abogados, para hacer frente al militarismo

GOBIERNO DE MANUEL PARDO Y LAVALLE (1872-1876)

Las elecciones de 1872 fueron un hito importante de la historia política del Perú, era la participación de un importante partido y la llegada al poder de Manuel Pardo y Lavalle, primer presidente civil del Perú.

La situación económica del país no era ya de los años anteriores, teníamos una enorme deuda pública que alcanzaba los 35 millones de libras esterlinas y el déficit fiscal estaba en el orden del 50%, pero a pesar de tan lamentable situación y tras salir liberado de la rebelión de los hermanos Gutiérrez. Pardo inició su gobierno, el 2 agosto 1872, con notoria expectativa.

-El estado se encontraba frente a una cuantiosa deuda pública proveniente de los empréstitos de 1870, 1871 y 1872 (36 mill. de libras esterlinas)

-La renta que proporcionaba la venta del guano por el contrato Dreyfus estaba consumida en lo referente a los años 1872, 1873 y parte de 1874

-El presupuesto de la Nación grandemente ampliado en el gobierno de Balta, sólo podía ser cubierto en un 50%

-El pago de la deuda no pudo seguir pagándose debido a la disminución de la venta del guano, perdiéndose el crédito del Perú en Europa.

Medidas administrativas para retener la crisis

-Recurrió a las salitreras de Tarapacá, creando un impuesto de exportación (25 centavos por quintal), luego monopolizó el salitre mediante los “estancos” y finalmente los nacionalizó.

-Se dispuso el aumento del impuesto al comercio (tarifas de aduanas)

-Introdujo la descentralización administrativa de los municipios y la educación.

Esta descentralización se efectuó para obtener una mayor recaudación de los impuestos en las provincias y departamentos (descentralización fiscal)

-Por la desaparición de las monedas de oro y plata se decretó la inconvertibilidad del billete.

-Se cobró el 2% sobre los derechos de importación de las mercaderías extranjeras a favor de los consejos provinciales.

-Se redujo los gastos públicos al mínimo.

-Regresó al sistema de las consignaciones, de la explotación del guano, con la firma del contrato Prado-Raphael

EL SALITRE DE TARAPACÁ

Sin dinero, sin guano y casi sin alternativas el gobierno de Manuel Pardo, echó mano a un nuevo recurso que, como el guano, apareció en el horizonte de las posibilidades: el salitre.

Este elemento sirve como ingrediente de la pólvora y también como fertilizante, el salitre tuvo una demanda considerable en tiempos de la llamada “paz armada”, en Europa a partir de la guerra Franco-Prusiana de 1870.

El Estado comenzó su verdadero interés por el salitre con el impuesto de 25 centavos de 1872, luego vendría el “Estanco del salitre” en 1873 y ante el fracaso de estas medidas, la nacionalización de las salitreras mediante ley de marzo de 1875.

En 1877, las dos terceras partes del total de los yacimientos salitreros habían sido comprados por el Estado peruano y al año siguiente eran 161 las expropiadas y sólo faltaban trece por hacerlo, pero al poco tiempo este negocio y posibilidad para el Estado quedó truncada por la guerra del Pacífico.

Tratado De 1873

Ante el peligro que Chile presentaba ante los territorios de Bolivia y el Perú se acordó firmar un tratado de Defensa, aunque se resolvió mantenerlo en secreto.

Este documento bilateral se firmó el 6 febrero de 1873, entre el plenipotenciario boliviano Juan de la Cruz Benavente y el ministro de relaciones exteriores del Perú José de la Riva Agüero Looz Corswaren.

LA GUERRA CON CHILE

Antecedentes de la Guerra del Pacífico

En 1878 el presidente Hilarión Daza promulgó una ley dada por la Asamblea Nacional de Bolivia, que grababa con 10 centavos a todo quintal de salitre exportado por el puerto de Antofagasta en contrapartida a las concesiones hechas por el ejecutivo a la compañía de Antofagasta.

En diciembre en 1878 el gerente inglés de la compañía Mr. George Hicks fue notificado para que pagase lo adeudado, desde la promulgación de la ley Mr Hicks se negó y el prefecto boliviano ordeno finalmente se sacase en remate los bienes de Antofagasta hasta cubrir la deuda, el gobierno chileno utilizó este incidente para tomar acciones hostiles y se apoderó de los puertos bolivianos de Antofagasta, Cobija y Tocopilla el 14 febrero de 1789.

En respuesta a esta actitud Bolivia le declaró la guerra a Chile el 1ro de Marzo de 1879

El Perú ofreció sus buenos oficios y envió al Plenipotenciario José Antonio Lavalle para que evite la guerra, llegó a Valparaíso el 4 marzo 1879 y fue recibido hostilmente por la población.

Lavalle exigió la desocupación del litoral boliviano a lo Chile se negó inquiriendo por su parte el tratado defensivo y secreto entre

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