ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Imperio Bizantino


Enviado por   •  6 de Junio de 2015  •  2.187 Palabras (9 Páginas)  •  178 Visitas

Página 1 de 9

Introducción.

En el presente trabajo nos proponemos exponer la importancia que adquirió la cultura bizantina, cuáles fueron las causas, las corrientes que la originaron y sus aspectos más relevantes a través de los cuales logro propagarse atreves del tiempo.

Nos planteamos para comenzar el trabajo investigar el surgimiento del Imperio, para poder responder la siguiente pregunta: ¿en realidad la cultura bizantina se convirtió en una entidad propia o solo fue una evolución de la cultura romana y griega influenciada por la aparición del cristianismo?

Nos evocaremos a desarrollar la cultura principalmente en lo que respecta a su evolución en el arte y especialmente en la arquitectura que a nuestro parecer son las dos ramas de la cultura que se destacan y perduraron más allá de su desaparición y fueron tomadas por otros pueblos como base para el desarrollo de su propia cultura.

Un poco de historia

La cultura bizantina no surgió sola sino que fue tomando de otras culturas elementos diferentes hasta llegar a conformar una cultura propia, por lo cual a nuestro parecer es necesario saber cuáles son las causas o los elementos que originan el Imperio Bizantino, para poder entender el porqué de su cultura.

Según relata G. Ostrogorsky, la estructura romana del Estado, la cultura griega y la fe cristiana son las principales fuentes de las que emana el desarrollo del Imperio Bizantino, el citado autor sostiene:

“Solo la síntesis de la cultura helenística y de la religión cristiana unidas a la forma de estado romana pudo hacer surgir aquel fenómeno histórico que solemos llamar Imperio Bizantino" De esta manera el autor deja claro que va hacer la fusión de tres culturas la griega, la cristiana y la romana la que van a dar origen de Imperio Bizantino. Otro hecho que influye es la división del Imperio Romano en Occidente y Oriente, ya que el Imperio Romano abarcaba grandes extensiones de tierras, lo que producía que su administración sea dificultosa, por lo cual el emperador Teodosio I toma la decisión de dividirlo entre sus dos hijos, de esta manera a su primogénito Honorio le va a dar Occidente y Arcadio Oriente. Debido a la administración infructuosa la gestión de Honorio va a caer en manos de los bárbaros, de esta manera queda Oriente como el único Imperio, este va a tener como capital a Constantinopla allí se va a establecer el Imperio Bizantino.

Podemos decir de esta manera que lo que dará origen al Imperio Bizantino y luego a su cultura va ser por un lado la separación de Roma en Occidente y Oriente y el encuentro entre las tres culturas la griega, la romana y la cristiana.

El imperio bizantino, en realidad, nunca fue nombrado así, ya que en su época era considerado solamente como el Imperio Romano de Oriente. De esta forma relata el ya citado autor “La historia bizantina es, un principio solo una nueva fase de la historia romana y el Estado Bizantino una mera continuación del antiguo Imperiun Romanum” . Es decir que el término bizantino es una expresión posterior, desconocida por los propios bizantinos ellos se consideraban simplemente romanos, luego por el desarrollo económico y cultural que logra alcanzar se pasa a denominar Imperio Bizantino.

El primero en utilizar la denominación Imperio Bizantino fue un historiador alemán llamado Hieronymus Wolf en 1557, lo utilizo para designar este periodo de la historia en contraste con las culturas griegas y romanas.

Por lo cual se puede sostener que la división del Imperio Romano va hacer aprovechada, por el cristianismo y el helenismo pagano que se van a fundir poco a poco en una unidad y van hacer nacer una nueva civilización cristiano oriental que recibió el nombre de Bizantina. El centro de ella va hacer la nueva capital del Imperio romano: Constantinopla.

El principal papel en la creación de un nuevo estado correspondió a Constantino. Bajo su reinado, el cristianismo fue reconocido, de manera decisiva, como religión oficial. Es decir que gracias a las reformas religiosas introducidas por dicho emperador, el antiguo Imperio pagano empezó a transformarse en Imperio cristiano. Se puede sostener, que el Imperio Bizantino sería el primer imperio cristiano, ya que Constantino era el primer emperador de religión cristiana.

A mediados del siglo IV (330), este imperio comenzó lentamente su expansión de fronteras, tomando los terrenos que había dejado el ya destruido Imperio Romano original.

La localización de Constantinopla en la encrucijada entre el Medio Oriente y la del Occidente, contribuyó en cierto aspecto, a la inmensa riqueza que obtuvo el Imperio bizantino abriendo su puerta a los comerciantes, y permitiéndoles pasar por esta encrucijada que conecta tres continentes. La misma riqueza, sumado con el gran prestigio de éste mismo, lo hizo convertirse en un imperio muy respetado, pero también llevaron al imperio a convertirse en uno de los imperios más codiciados de la época. Este imperio seguía su historia de una manera muy diferente al imperio romano de occidente, ya que logro expandirse cada vez más, con la ayuda de Constantino I, y luego con Justino I, a mediados del siglo VI., el imperio va a lograr su máxima expansión.

El gobierno de Constantino es relatado por David Barreras quien sostiene: “Constantino reorganizó además el Imperio en el terreno y estatizó positivamente la moneda, con lo que estimuló la continuidad del comercio, en franca regresión hasta la subida al trono de Diocleciano”

Constantino además emprendió la construcción de grandes murallas que fueron, sin duda, la obra más notable de la ciudad. Estos muros, que fueron extendidos y reconstruidos, combinados con un puerto fortificado y una flota, convirtieron a Constantinopla en una fortaleza inigualable.

Cuando Constantino fallece el reinado queda en manos de sus tres hijos, Constantino II, Constancio y Constante, quienes empiezan, por gobernar juntos el Imperio, con título de augustos. Pero la enemistad existente entre los sucesores de Constantino se complicó por el hecho de que el Imperio tenía que sostener una guerra ruinosa contra los persas y germanos. En el curso de las guerras civiles que siguieron, tanto Constantino II como algunos años más tarde, Constante, perecieron de muerte violenta. Constancio quedó al fin como único emperador.

Años más tardes, las murallas de Constantinopla fueron fuertemente fortificadas durante el mandato de Teodosio II, para proteger el Imperio de futuras invasiones bárbaras y de los hunos. Teodosio pagó un pesado tributo a los hunos para

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (13.4 Kb)  
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com